Con mis hijes dejá de meterte: hablemos de “ideologías”

Con mis hijes dejá de meterte: hablemos de “ideologías”
21 septiembre, 2018 por Redacción La tinta

Ayer nos despertamos en Córdoba con una polémica: un empapelado en toda la ciudad, que incluye al transporte público, con una elocuente frase: “Con mis hijos no te metas”. Un grupo de “restauradores del orden” empezó su embate feroz contra lo que denominan “ideología de género”, que sería una especie de conspiración para tomar el control sobre los colegios y obligar a todes a ser como elles. ¿Pero eso no existe ya en la forma de colegios católicos y “escuelitas” evangélicas? Hablemos de ideologías y desentramemos las falacias. Hoy, somos nosotres quienes les decimos ¡con mis hijes dejá de meterte!

Por Redacción La tinta

“La ideología de género es la última rebelión de la creatura contra su condición de creatura.
Con el ateísmo, el hombre moderno pretendió negar la existencia de una instancia exterior que le dice algo sobre la verdad de sí mismo, sobre lo bueno y sobre lo malo.
Con el materialismo, el hombre moderno intentó negar sus propias exigencias y su propia libertad, que nacen de su condición espiritual.
Ahora, con la ideología de género el hombre moderno pretende librarse incluso de las exigencias de su propio cuerpo: se considera un ser autónomo que se construye a sí mismo; una pura voluntad que se autocrea y se convierte en un dios para sí mismo”.
Ratzinger (Papa Benedicto XVI)

Quizás no habría nada que agregar a las palabras del ex líder de la iglesia católica. Por lo que dice, vamos por el buen camino ¡Nos hemos liberado! Al parecer, oponerse al “orden divino” es una “ideología” que desafía la moral del bien/mal que ya estaría constituido “naturalmente”. Y no sólo eso, el pensar que somos autónomes sobre nuestros propios cuerpos también es algo errado.

Uno de los argumentos principales de los antiderechos a la hora de discutir la Interrupción Voluntaria del Embarazo fue que los cuerpos gestantes no somos dueñes de nosotres mismes. El argumento esgrimido ahora en el nombre de les niñes, es que no nos metamos con la educación de sus hijes, porque son suyos, de sus familias, de sus padres. ¿Contradicciones? Si el feto no es de quien lo gesta y es de interés social, entonces sus hijes tampoco son suyes, son responsabilidad de toda la sociedad.

Y en eso andamos algunes, tratando de que la juventud sea lo más autónoma, libre, consciente de su cuerpo y decisiones posible, que puedan decir no cuando no quieran hacer algo, entre muchas otras cosas más. Y acá están, de nuevo, les “restauradores”, que buscan tapar el sol con el dedo, y justo cuando llega la primavera.

Cordoba-via-publica-antiderechos-religioso-esi-educacion-sexual-niñez-cartel-03

Definiciones y “ciencias”

Veamos algunos de los aspectos que esgrimen ciertes católiques y las contrarrestemos con las construcciones y acuerdos internacionales acerca de la sexualidad. Definen a la identidad sexual de la persona como un componente de tres aspectos: el sexo biológico, el sexo psicológico y el sexo sociológico. Ahora bien ¿qué entienden sobre cada uno de los aspectos?

*Sexo biológico: Lo definen como la corporeidad de una persona. El sexo biológico viene determinado por los cromosomas XX en la mujer y XY en el varón. Estas bases biológicas intervienen profundamente en el organismo, como se ve en las diferencias estructurales y funcionales del cerebro masculino y el femenino.
*Sexo psicológico: Lo consideran las vivencias psíquicas como varón o como mujer. Esa conciencia psicológica se suele formar a los dos o tres años y coincide habitualmente con el sexo biológico, aunque haya excepciones a causa de la educación que se haya recibido.
*Sexo sociológico o civil: es la percepción del sexo por el entorno.

¡Atención aquí! Podemos ver que no consideran que pueda haber personas que no cumplan con este criterio binario mujer/varón. Argumentan que es “ciencia pura, naturaleza pura, biología pura”. Incluso plantean que quienes atraviesan una operación o tratamiento para el cambio de sexo siguen teniendo una fisionomía y un ADN determinados por un sexo. Reconocen al género como una construcción sociocultural que asocia ciertos rasgos a varones y otros a mujeres, pero la “construcción” se frena cuando intentan argumentar que en múltiples culturas alrededor del mundo los comportamientos ligados al sexo biológico son similares, como que los hombres elijan carreras y tareas ligadas a la fuerza, y las mujeres al cuidado (enfermeras, maestras, etc.). Ven “ciencia y estadística”: como en la mayoría de los países del mundo las mujeres hacen tareas de cuidado, entonces deducen que nacieron para eso. Así nos ven, así somos. Maravillosa falacia, pero nada de ciencia.

No existe en su estructura de pensamiento la posibilidad de contemplar una autonomía sobre el sentir y el vivir la sexualidad. Todo estaría condicionado por el XX y XY, ¿es eso lo que nos hace vivir como iguales? Sería algo así como pensar que todos los varones tienen las mismas vivencias psíquicas independientemente de su entorno.


Si de ciencia hablamos, el argumento de que la Ley de Educación Sexual Integral -legislación existente desde el año 2006- no sirvió para detener los embarazos adolescentes, los abusos sexuales a menores y la transmisión de enfermedades, también es una falacia. Los colegios confesionales no han dejado que ésta se aplique tal como se la ideó, escudados en el artículo que plantea que se puede tener en cuenta el “respeto al ideario institucional y a las convicciones de sus miembros” a la hora de diseñar la currícula. Hablamos en otras oportunidades sobre los desafíos en torno a esta ley, pero sí es necesario volver a remarcar que, si no funcionó hasta ahora como se esperaba, es porque no se aplicó correctamente.


Por otro lado, no sólo en los colegios confesionales, sino que en la mayoría de las escuelas públicas, la “moral” de les adultes ha pisado más fuerte que el derecho de les niñes y jóvenes. “Educación para el amor” que oculta el conocimiento del propio cuerpo, que invisibiliza las diferencias y, si aparecen, patologiza al distinto, que enseña abstinencia, y frente a las estadísticas que plantean inicios sexuales cada vez más tempranos, insiste en educar para el “no”, en lugar de enseñar marcos seguros de cuidado de los cuerpos y de les otres. De amor, no hay nada.

marcha-del-orgullo-gay-lgtb-diversidad
Foto: Colectivo Manifiesto

Ideologías

Con la caída del muro de Berlín y el “fin de las ideologías” que planteaba Fukuyama, pareciera que el mundo se olvidó que durante la guerra fría había dos ideologías en pugna. Cuando la URSS desaparece, se considera que la izquierda (como arco político mal asociado sólo al socialismo) perduró en muchos países como partidos de minoría o pequeños movimientos. Y de paso, metieron al feminismo en esa categoría. Se olvidaron, al parecer, de que había otra ideología en ese enfrentamiento que se convirtió, de golpe, en la dominante, pero no por eso dejó de ser una ideología. Ahora, gobiernos como el nuestro se jactan de estar desideologizados y despolitizados, negando profundamente que el neoliberalismo (que deriva y se reinventa de aquél de la guerra fría) es una ideología.

Lo mismo podríamos decir del catolicismo que creció y se potenció a la luz del capitalismo, al que similarmente se le pueden asociar algunas de las características con las que, elles mismes, definen a una ideología: “Es un conjunto de ideas (no necesariamente verdades) fundamentales que caracterizan el pensamiento de una persona, colectividad o época” (Manual de la campaña #conmishijosnotemetas). Características pueden asociarse con la mayoría de las religiones. Un conjunto de ideas que no son necesariamente verdades, porque se basan en un concepto tan abstracto como la “fe” a la hora de comprobar sus dichos pero que, irónicamente, piden rigor científico al resto. “Se constituyen como herramientas de control social que despojan al ser humano de su libertad transformándolo en una masa manipulable”. Y acá, podemos detenernos largo y tendido. ¿Acaso no fuimos las mujeres invisibilizadas, recluidas, relegadas y obligadas a (re)producir vida? ¿Acaso no fueron las identidades disidentes negadas, ocultadas, reprimidas, medicalizadas, y hasta muertas por sentir diferente a lo catalogado como “natural”? ¿Acaso no fueron los valores morales religiosos herramientas de control moral y social, de definición del bien y el mal, y hasta del castigo? ¿No es acaso nuestro Estado un fiel cumplidor de lo que manda la Iglesia?

Nosotres aparecimos para cuestionarlo todo y les generamos un temor inminente: si cae el patriarcado, cae la estructura eclesiástica y todo el sistema de valores que la rodea. Cuando aparecimos para cuestionar los roles que nos asignaron, cuestionamos esa ideología que complementa una estructura económica de explotación que pretende tener a las mujeres criando mano de obra al precio de un sólo salario. Cuestionamos también la heteronorma y la sociedad construida sobre ese binarismo.

Marcha-orgullo-diversidad-Colectivo-Manifiesto-01
Foto: Colectivo Manifiesto

Iglesia y Estado: Asuntos separados!

Ayer pudimos presenciar los alcances de esta alianza histórica. La campaña, ya anunciada previamente, que apareció en Córdoba, Rosario y algunos lugares de Capital Federal, da cuenta de la hermandad entre estas dos instituciones. Resulta sumamente peligroso que el Estado valide esos argumentos y destine dinero para financiarla, permitiéndoles publicitar sus mensajes en la calle y el transporte público.


Hoy viernes 21 de septiembre, las Fundaciones Córdoba de Todxs y FUNDEPS, con la adhesión de más de sesenta instituciones y organizaciones, presentaron un pedido a la Municipaidad de Córdoba para que la campaña sea retirada de los espacios públicos. En una entrevista con Radio Comunitaria La Quinta Pata, Miguel Magnasco, referente de Córdoba de todxs, explicó que, además de la violación a la Ley ESI y otros convenios internacionales, se está incumpliendo la Ordenanza Municipal 10.378 sobre regulación de la publicidad en espacios públicos y móviles de la Ciudad de Córdoba. Esa ordenanza reza que no puede haber contenido discriminatorio de formas de pensamiento ni tener un discurso contrario a leyes vigente de cualquier nivel. Evidentemente se están violando ambos criterios.


En la solicitada piden que se aplique correctamente la normativa vigente, y si bien la municipalidad debería hacerlo ya que habilita una publicidad que viola sus propias normativas, desde Córdoba de todxs están alertados porque hasta ahora las respuestas recibidas parecen desconocer la ordenanza a la cual se hace referencia, aprobada por este mismo gobierno.

“Es una campaña muy burda que nos hace retroceder en algo que venimos avanzando. Como punto positivo, para que salgan a hacer una campaña multimillonaria deben estar preocupados porque en el sentido común mayoritario de la sociedad argentina, está primando la racionalidad de admitir que hay muchos más matices y diversidades que lo que nos quieren mostrar en color de azul y rosa. Es una suerte de manotazo de ahogado para volver al orden de lo establecido desde hace muchísimo tiempo”, opinó.

Una ley que debiera ser para todes, un estado legislando para unos poques, y más, negando la existencia de muches.

Irrumpimos, estamos, somos. Nadie puede decirnos que vamos en contra de la naturaleza, porque somos cuerpos que luchan, que gritan, que sienten. “Los restauradores del orden” tienen miedo a las grietas que fisuran al patriarcado. No somos como elles, no vamos a imponerle a nadie que sea como no quiere ser, como no lo siente. La campaña #conmishijosnotemetas va en contra de todos los tratados internacionales de derechos y es el último manotazo de ahogado de una estructura retrógrada.

¡Vos, con mis derechos no te metas!
¡Vos, con mis hijes dejá de meterte!

¡Educación sexual integral para decidir!

Cordoba-via-publica-antiderechos-religioso-esi-educacion-sexual-niñez-cartel-01

*Por Redacción La tinta.

Palabras claves: educación, educación sexual, Iglesia Católica, Iglesias evangélicas, niñez

Compartir: