Periodismo feminista desde la Docta
Un nuevo portal de publicaciones feministas nace en Córdoba. El Tajo es una propuesta autogestionada por comunicadoras que ponen a circular relatos desde el quehacer periodístico feminista. Conversamos con ellas, nos cuentan cómo surge y reflexionan sobre el oficio desde una perspectiva de género y de derechos humanos.
Por Redacción La tinta
Gabriela Weller, Jimena Massa, Pate Palero y Soledad Ceballos le dan vida y materializan la publicación periodística El Tajo desde la que proponen la producción de información y debates con perspectiva de género y derechos humanos, desde y en la Ciudad de Córdoba. En diálogo con La tinta, afirman que “El Tajo es sin lugar a dudas una publicación feminista. Es una continuación de nuestro activismo, hecho letra desde la práctica profesional del periodismo. De diferentes maneras y en ámbitos diversos, todas contribuimos a instalar la perspectiva de género y el enfoque de derechos en los medios de comunicación. Pero con eso no alcanza. Es una tarea a muy largo plazo porque implica un profundo cambio cultural”.
Los trayectos de cada una se fue acompasando en este proyecto que surge, nos cuentan, en un ejercicio de historizarse, a partir de conversaciones e inquietudes que fueron compartiendo, discusiones sobre el abordaje de notas en diferentes medios y también, desde algunos cuestionamientos académicos. El proyecto las vincula desde antes, por la amistad que las convocó, por los espacios de militancia que las encontraron, por diferentes espacios de trabajo que compartieron. Son comunicadoras, periodistas, integrantes de la Red PAR (Periodistas Argentinas en Red por una Comunicación No sexista), comparten la pertenencia a la universidad pública en distintos momentos y de distintas formas y ahora resignifican ese camino en una revista digital feminista.
En El Tajo se encontrarán con secciones de entrevistas, notas de agenda, activismo, data cultural, historias y dossier con renovación semanal y quincenal, con newsletter y activismo en las redes, las compañeras emprenden este proyecto autogestionado, inspirado en la necesidad de construir un periodismo no sexista, plural y transformador. “Como espacio de información y debate feminista, El Tajo pone el foco en hechos y protagonistas de Córdoba, aunque en sintonía con las noticias y discusiones que existen a nivel nacional y/o internacional en materia de género y feminismos”, cuentan en la web.
Periodismo situado
“Creemos que el mapa cordobés no ha estado exento a una profunda concentración mediática, fruto del desmantelamiento de regulaciones y monitoreos de la comunicación en un sentido democrático (como lo planteaba originalmente la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual). Las prácticas monopólicas que priorizan el negocio por encima del derecho afectan directamente a las prácticas plurales, y por lo tanto al sexismo. El machismo en los medios es un negocio muy rentable”, explican.
Desde la trayectoria que las nuclea, en la Red PAR y el trabajo como comunicadoras, advierten y remarcan los avances en relación a la incorporación de la agenda de géneros en algunos medios masivos. “Es saludable que el periodismo haya incorporado la temática en sus programaciones, e incluso que las colegas mujeres tengan un mayor protagonismo y visibilidad”, dicen y explican que en ese proceso existen medios y periodistas que tienen más permeabilidad, “pero en general consideramos que la preocupación por las violencias ha salido del closet”.
Entienden que más allá de esos avances, es necesario trabajar la perspectiva de género en el marco de derechos humanos, “así como en estereotipos de género en general e interseccionalidades”, desarmando las características universales y binarias que ocultan la diversidad y complejidad de las personas y sus contextos. Para ellas, lo más complejo “siguen siendo las brechas de género y las resistencias a incorporar paridad e inclusión real”. En el contexto actual de nuestro país, “cuando después de tantos años de lucha se han instalado social y políticamente los legítimos reclamos del movimiento de mujeres y de los colectivos LGTBIQ+, no incorporar la mirada de género y la sensibilidad feminista es dar la espalda a la sociedad”.
Definen su tarea como “periodismo militante por la igualdad”, sumando aportes también desde la profesión, “como procuramos hacerlo desde nuestras prácticas personales y colectivas”, y citan a Simone de Beauvoir cuando dice que “el feminismo es una forma de vivir individualmente y de luchar colectivamente”. Así es que El Tajo llega para intentar aportar más voces y miradas a los feminismos plurales y diversos de Córdoba, poniendo el foco “sobre las mujeres e identidades menos visibilizadas y más discriminadas”, para contribuir a una comunicación democrática.
Plantean que no ven una tensión entre el periodismo profesional y el activismo, «sino que estamos convencidas de que sin esa mirada feminista, el periodismo se queda corto. Hacer El Tajo es un intento por demostrar que la sensibilidad del feminismo y su proyecto político son indispensables para aportar un plus de calidad”. Creen que, siendo la comunicación un derecho, debiera ampliarse y defenderse desde la producción de todos los medios.
“El Tajo va de frente. Somos feministas y nuestro discurso es situado”, concluyen.
*Por Redacción La tinta.
