Prólogo del capítulo 3 “Celebrar la lucha. Culturas contra la colonialidad”, del libro “Hasta Mancharse. Tintas para resistir y re-existir” de La tinta. Por Claudia Huergo
“Una escritura con un máximo de cuerpo es, entonces, la que avanza sobre las zonas de silencio, de catástrofe. Produce relevamientos afectivos, inventarios ficcionales. Es lo que permite el despliegue de las potencias contenidas en el acontecimiento. Incluso, la potencia de lo que no se puede”, dice la psicoanalista y escritora Claudia Huergo.