El pueblo comechingón y la necesidad de recuperar una casa histórica
La Comunidad Kamichingón de La Toma realizará este sábado un festival para visibilizar su reclamo: recuperar una casona en barrio Alto Alberdi que perteneció a uno de los curacas comechingones hace muchos años y, en la dictadura, fue expropiada por el gobierno de facto. El patio del inmueble tiene un algarrobo de más de 600 años.
Por Redacción La tinta
La comunidad originaria de La Toma de barrio Alberdi y Alto Alberdi continúa firme en su reclamo de devolución de su territorio ancestral.
«Hacia finales del siglo XIX, el estado cordobés y el nacional dieron por muertxs a nuestros abuelos y abuelas, y decretaron que el progreso civilizatorio era quien regiría la vida de allí en más. La ciudad de Córdoba creció y pareció inundar todo de gris. Pero, y muy a pesar de lxs que aún piensan así, todavía estamos vivxs, creciendo y multiplicándonos. Nosotrxs, pueblos indígenas, seguimos resistiendo, luchando y respirando, y lo seguiremos haciendo hasta nuestro último suspiro en este plano», expresó la comunidad en un parte de prensa.
Uno de los despojos más recientes que sufrió la comunidad fue la expropiación de la casa del curaca Belisario Villafañe durante la última dictadura cívico-militar, una vieja casona ubicada en la calle León Pinelo 32 del barrio Alto Alberdi.
Allí, funcionó por varios años la Comisaría 11 de la Policía de Córdoba y, hoy, es un depósito que la Policía, de vez en cuando, entra a dejar cajas.
La comunidad exige que dicho inmueble sea restituido a La Toma, como parte de la reparación de la deuda histórica que los gobiernos provinciales mantienen con los pueblos indígenas.
«Hoy, en un contexto de criminalización y represión de los pueblos indígenas organizados de toda el Abya Yala, es fundamental la recuperación de nuestro territorio sagrado para, desde allí, seguir estableciendo lazos y reciprocidades hacia los cuatros puntos cardinales -en todas sus dimensiones- de hermandad y lucha. No sólo denunciamos la actual política criminalizadora que tiene como finalidad terminar de ocupar nuestros territorios y destruir nuestra episteme, sino que nos organizamos para recuperarlo. No hay posibilidad de espiritualidad sin territorio. Así lo entendemos y lo entendimos siempre», afirmaron.
En este marco, integrantes de la comunidad, vecinxs y organizaciones sociales convocan a participar este sábado 16 de diciembre, a las 18, de una jornada artística y cultural en la Casona (León Pinelo n°32).
«Invitamos a toda la sociedad cordobesa a que nos acompañe a seguir celebrando la vida alrededor de nuestra abuela Taku, un algarrobo que ha estado presente desde antes de la invasión y de la formación del Estado, y que fuera lugar de encuentro de nuestros ancestros. Taku quiere seguir cobijando en su sombra a la nación ancestral kamiare. Son ellos los que nos guían y nos piden que recuperemos el territorio sagrado kamichingon«, concluyeron.
* Por Redacción La tinta / Imágenes: Colectivo Manifiesto