Córdoba: la mitad de los niños que asisten a comedores sufren malnutrición
Un estudio llevado adelante durante el primer semestre del 2017, reflejó que el 47 por ciento de los niños y adolescentes de 2 a 19 años relevados se encuentran en alguna de las variantes de malnutrición. La organización Barrios de Pie ratifica la necesidad de declarar la Emergencia Alimentaria.
La organización social Barrios de Pie en conjunto con el Instituto de Investigación ISEPCI (Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana) realizó durante el primer semestre de 2017 un estudio para determinar el Indicador Barrial de Situación Nutricional.
Para ello, en los meses de marzo, abril y mayo fueron pesados y medidos niñxs y adolescentes de 0 a 19 años que asisten a merenderos y comedores en diferentes barrios en situación de alta vulnerabilidad socio-sanitaria para poder avanzar en una detección temprana de malnutrición.
Sobre un total de 949 niños, niñas y adolescentes de 2 a 19 años, sin discriminar grupo etario, el 47% (448 individuos) se encuentran en alguna de las variantes de malnutrición, destacando la preeminencia de los indicadores por Exceso, sobrepeso 20% y Obesidad 18%, que superan significativamente a los indicadores por déficit alimentario, encontramos que un 4% está en Bajo peso y un 5% se ubica en Riesgo de bajo peso.
Estas cifras ponen en evidencia la preocupante vulnerabilidad nutricional en la que se encuentra un conjunto de niños, niñas y adolescentes, que hoy estarían siendo afectados por una alimentación inadecuada para su edad. La presencia de malnutrición en cualquiera de sus variantes, ya sea por bajo peso o sobrepeso, limita su crecimiento y desarrollo integral tanto físico como psicosocial, deteriorando su calidad de vida, abriendo la puerta a enfermedades en la edad adulta.
«Muchos de nosotros hemos tenido que modificar en este último tiempo nuestra dieta alimentaria, para pasar a consumir más hidratos, menos leche, menos proteínas, menos pescado. Las políticas económicas de los gobiernos han afectado tremendamente a los más humildes, sobre todo a los y las niños (…) Los centros comunitarios están desbordados de niñxs que concurren desesperados de hambre «, expresó Silvia Quevedo, militante de Barrios de Pie.
Los relevamientos que viene realizando la organización desde hace varios años en los barrios populares de varias ciudades del país, ponen de manifiesto una de las más graves consecuencias de una situación estructural que sumerge en la pobreza a un tercio de los argentinos y a un diez por ciento en la indigencia (según datos de la Encuesta Permanente de Hogares del Indec).
Según la propia Unicef, casi la mitad de los niños en Argentina son pobres: hay 5,6 millones de chicos pobres en el país y que además de esos chicos, 1,3 millones están en la pobreza extrema, por lo que directamente pasan hambre.
«Se enciende una alerta, ya que los y las niñas que están en bajo peso y riesgo de bajo peso, estarían atravesando por una situación que debe ser revertida con urgencia. La ingesta insuficiente de alimentos (calorías y
proteínas) de forma continua, limitan las necesidades de energía alimentaria, y no permiten garantizar las funciones del cuerpo, su crecimiento y una actividad física normal, situación que de no modificarse tendrá severas repercusiones en el desarrollo y crecimiento de estos niños y niñas», afirma el estudio.
Síntesis de los Resultados del relevamiento de situación nutricional en la provincia de Córdoba
1. La información procesada y sistematizada a la fecha describe la situación nutricional de 1028 niños, niñas y adolescentes, de 0 a 19 años, que asisten a 20 merenderos y/o comedores del Movimiento, ubicados en barrios con alta vulnerabilidad socio-sanitaria-ambiental (Barrios Córdoba Capital: Villa Urquiza, V° Libertador, V° Revol, V° Tortoza, Suarez, Márquez, Mosconi, Nuevo Arguello, Yapeyú, Renacimiento, Pilcomayo, Chingolo, Cooperativa Atalaya, Gobernador Pizarro, Las Violetas, Maipu, San Felipe II, San Jorge, San Miguel; Localidades del
interior: Ríos Ceballos).
2. La población ha sido organizada en cuatro grupos etarios: lactantes de 0 a 2 años (79n), primera infancia de 2 a 6 años (285n), segunda infancia de 6 a 12 (424n) y adolescencia de 12 a 19 años (243a).
3. Se construyeron tres indicadores antropométricos: Peso/edad, para 79 lactantes de 0 a 2 años; Índice de masa corporal (IMC) para 949 n/a de 2 a 19 años; Talla/edad a 1028 n/a de 0 a 19 años.
4. Sobre un total de 949 niños, niñas y adolescentes de 2 a 19 años, sin discriminar grupo etario, según el IMC, el 47%, 448 n/a, se encuentran en alguna de las variantes de malnutrición, destacando la preeminencia de los indicadores por exceso, sobrepeso 20% y obesidad 18%, que superan significativamente a los indicadores por déficit alimentario, encontramos que un 4% (39n/a) están en bajo peso y un 5% (44n/a) se ubican en riesgo de bajo peso.
5. Para un total de 79 lactantes, de 0 a 2 años, el 35% (28n), presenta malnutrición, con indicadores antropométricos que dan cuenta que estos niños y niñas estarían recibiendo una alimentación inadecuada: por déficit 5% de bajo peso y 1% de Riesgo de bajo peso, mientras que los indicadores por exceso presentan un 18% de
sobrepeso y 11% de obesidad. También aparecen un 25% de niños y niñas que presentan baja talla para su edad.
* Por Redacción La tinta / Imágenes: Colectivo Manifiesto.