La Provincia deforestó El Montecito, el bosque nativo colindante a la Facultad de Turismo
La porción de monte nativo que sobrevivía frente a la Facultad Provincial de Turismo y Ambiente Montes Pacheco fue arrasada por topadoras el pasado lunes. La obra es parte del trazado de la Circunvalación que lleva adelante la empresa Caminos de las Sierras y desde el Municipio afirman que la jurisdicción es provincial. Hace casi 10 años que se trabajaba para que el lugar sea una reserva escuela. «Era parte del casi único parche de bosque nativo de nuestra ciudad», lamentaron en un comunicado.
Cuando se inauguró la Tecnicatura Universitaria en Guardaparque de la Facultad de Turismo y Ambiente Montes Pacheco en 2015, lxs primerxs estudiantes revalorizaron un pedacito de arboleda nativa que colindaba la casa de estudios.
A pesar que hacía casi diez años que se presentaban iniciativas para declarar esa porción de monte como «reserva escuela», el pedido nunca tuvo respuestas por parte de las autoridades del Gobierno Provincial. Sin embargo, la comunidad educativa de la Tecnicatura lo ejerció de hecho y se convirtió en El Montecito.
«Pese a que nadie había aprobado el proyecto de Reserva Escuela presentado reiteradas veces en diferentes organismos estatales, empezamos a hacer los primeros reconocimientos de flora y fauna nativa, nuestros primeros avistajes de aves, armamos senderos de interpretación y nos sentamos bajo el Tala muchas tardes para planificar esta aula al aire libre, empezamos a caminar el proyecto de reserva escuela», indicaron en un comunicado lxs Estudiantes autoconvocadxs de Guardaparque de la UPC.
Sin embargo, desde comienzos de este año, los jóvenes comenzaron a notar cómo la obra del cierre del Anillo de Circunvalación que lleva adelante la empresa Caminos de las Sierras avanzaba desde el Tropezón, llevándose con ella las vidas de muchos talas, algarrobos, chañares, y todo tipo de vegetación, nativa y exótica.
«Empezamos a preguntar cuál sería el proyecto exacto que pasaría por allí, pero nos quedamos con la incertidumbre. Nos dijeron que no pasaba, que sólo tocaba una punta, que lo atravesaba por la mitad, y finalmente nos enteramos, por un operario, que ahí sería una de las rotondas, y que tenían órdenes de sacarlo todo», lamentaron.
Hace meses que se le solicitó a la Secretaría de Ambiente la información pública respecto del estudio de impacto ambiental, audiencia pública correspondiente y planes de reforestación para remediar la pérdida de este ecosistema, pero no se brindó respuesta alguna.
Ante las quejas de la comunidad educativa y la publicación de este artículo, desde la Municipalidad de Córdoba negaron responsabilidad comunal. Confirmaron que la jurisdicción y las habilitaciones correspondiente en materia ambiental por las obras corresponden al Gobierno de la Provincia de Córdoba, que el Municipio sólo ha intervenido en la diagramación del tránsito durante la obra y que el estudio lo debería haber presentado Caminos de las Sierras a la Secretaria Ambiental.
Mientras tanto, los estudiantes remarcan que se trata de un espacio que no sólo adquiere un altísimo valor natural y cultural sino que era parte del casi único parche de bosque nativo de nuestra ciudad, adjunto a la Reserva Natural Urbana San Martín . «Esta pérdida de bosque nativo preocupa desde el punto de vista ambiental ya que provocará una disminución de la captación de CO2 del aire, desertificación de la zona y una degradación de la flora, la fauna y el paisaje», afirman.
«Una vez más, la ciudadanía no es consultada, ni siquiera informada, respecto a las decisiones tomadas en materia de medio ambiente y obras públicas. Ante el pedido de información, recibimos siempre respuestas distintas, pero ninguna con los límites claros de la obra», acusaron lxs estudiantes de la Universidad Provincial de Córdoba.
Finalmente, el lunes 19 de junio, los estudiantes se dieron con el peor paisaje: «Las máquinas ya estaban sacando los árboles grandes, árboles que tienen más historia que la ciudad, como el Tala, que era el nido de muchas aves y el refugio de muchos insectos, y que era la sombra de las tardes de los estudiantes», indicaron.
La Coordinadora en Defensa del Bosque Nativo exige que se muestren los estudios de impacto ambiental y la audiencia pública realizada que avala el avance de estas obras, según corresponde por ley. Demandan además que se realicen de manera urgente las reforestaciones compensatorias por el ecosistema perdido.