Sexualidades, derechos y subjetividades: voces en disputa
Participamos de la Jornada Multiactoral «Sexualidad(es), derechos y subjetividades» en la UNC. “En un momento en que se producen discursos y prácticas que acentúan los conservadurismos en nuestra región, al mismo tiempo que priman valores del mercado y hay un desinvestimento de lo público, nos interesa detenernos a pensar la intersección entre sexualidades, subjetividad y derechos».
Por Redacción La tinta
Este martes se relaizó una Jornada Multiactoral. En la Facultad de Ciencias Sociales (FCS) de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) y en el marco del Programa de Investigación “Voces en disputa, feminismos y exigibilidad de derechos”, conformado por tres equipos del Centro de Investigaciones de la Facultad de Filosofía y Humanidades (FFyH) y dos equipos de la FCS.
“En la escuela nos enseñaron el cuerpo humano como una imagen plana, como una lámina, era igual estudiar los órganos sexuales que la geografía argentina. Como si el cuerpo no fuera un territorio de disputa, como si no tuviera deseo, emociones, como si el cuerpo no tuviera cultura, economía. Como si los cuerpos no fueran sexuados. ¿Qué está plano?”.
Registro de trabajo de campo de uno de los equipos de investigación en escuelas secundarias
Con estas palabras que son memorias de lo que acontece en algunas aulas cuando se enseña educación sexual, comenzó la jornada. Como una invitación a pensar en aquello que está o aparece como plano cuando se enseña y aprende sobre sexualidades y géneros en las escuelas.
Estas jornadas nacen de la intención de crear espacios de diálogos entre distintos actores involucrados en los problemas que se abordan desde los distintos proyectos de investigación con docentes secundarios, estudiantes universitarios y del nivel medio, sindicatos, trabajador*s de la salud, organizaciones de mujeres y jóvenes mujeres, lesbianas, trans, no binaries. Crear puentes, articular conocimientos y acción política en una coyuntura donde los feminismos y los activismos lgbttiq+ disputan la agenda, demandan y construyen desde los territorios y calles.
El Programa de Investigación “Voces en disputa, feminismos y exigibilidad de derechos” que nuclea a 5 equipos de investigación, se ha planteado como unos de sus objetivos reconocer y visibilizar diferentes discursos y prácticas en disputa vinculadas al acceso, reconocimiento y ejercicio de derechos en un sistema heteropatriarcal, en ámbitos institucionales y territoriales de la ciudad de Córdoba.
El año pasado realizaron la primera jornada de intercambio donde “el derechos/los derechos” apareció como uno de los temas con dificultades desde los actores y sujetos con quienes se trabaja en los proyectos de investigación, principalmente juventudes. “En ocasiones, aparece enunciado como derechos individuales y no colectivos; en otras, formulado en términos morales y no en referencia a obligaciones y garantías estatales. Es en estas confusiones que se invisibilizan situaciones de abuso de poder y violencia que se ejercen en instituciones, organizaciones, comunidades en torno al campo amplio de las sexualidades. La idea del derecho como algo que se posee, o como recurso ya predeterminado al que se accede, invisibiliza a los sujetos y las organizaciones, l*s que ponen en entredicho lo que se habilita como derecho. Es en su propia constitución como sujetos de derechos en la demanda ante la sociedad y el Estado que se conforman estos derechos, que cobran encarnadura, que trascienden lo posible de ser formulado y que son inteligibles en su faz política”, expresaron en la convocatoria a la jornada.
Uno de los ejes de reflexión estuvo vinculado con aquellas distancias entre las normas que garantizan derechos conseguidos en procesos de disputa social y política y la apropiación subjetiva de los mismos. Algunas de las inquietudes que acompañan los procesos investigativos, están vinculadas con los modos en que individual y colectivamente se apropian, recrean y defienden derechos, en relación con las legalidades existentes, pero también a pesar de ella. Es interesante cómo desde la academia se preguntan el modo en que son interpelados funcionarios y efectores estatales en su función de garantizar derechos a las personas que llegan y habitan las instituciones públicas de la salud y de la educación.
Desde la organización de la jornada, expresaron: “En un momento en que se producen discursos y prácticas que acentúan los conservadurismos en nuestra región, al mismo tiempo que priman valores del mercado y hay un desinvestimento de lo público, nos interesa detenernos a pensar la intersección entre sexualidades, subjetividad y derechos. ¿Cómo las sexualidades siguen apresadas en y reguladas por las morales religiosas, aunque sea bajo cierto cariz laico? ¿De qué modo los silencios, el refugio en el desconocimiento, las parálisis y los temores ante conflictos y tensiones aparecen en los espacios sociales e instituciones de nuestras investigaciones? ¿De qué modo se presentan las violencias hacia las mujeres y disidencias que nos desafían a repensar las intervenciones? ¿Cuáles son las nuevas reformulaciones de agendas políticas que se nos presentan como desafíos?”.
Se propusieron mesas de trabajo como espacios de producción y reflexión colectiva, comparticiones de experiencias entre los equipos de investigación, tesistas de posgrado, experiencias desde las intervenciones de políticas públicas y las vivencias y acciones llevadas adelantes en instituciones y territorios.
Las mesas de diálogos propuestas fueron: “Políticas públicas como construcción de derechos y prácticas institucionales”, en donde algunas de las preguntas que orientaron las conversaciones fueron: ¿cómo se piensan los derechos y quienes son sujetos de derechos? ¿Cómo se construye la idea de sujetos de derechos en la interacción, en el encuentro cotidiano en tensión con las definiciones institucionales? ¿Cómo se recuperan las voces y prácticas de los distintos sujetos en las investigaciones e intervenciones? ¿Cómo insiste y cómo desarticulamos el binarismo de género en las políticas y prácticas de salud y educación?
Otra de las mesas, giró en torno a “la construcción de las mujeres y de las personas lgbtttiq+ como sujetos de derecho en lo cotidiano”, aquí las preguntas que disparaban las conversaciones fueron: ¿cómo nos construimos como sujetos en los entornos cotidianos (barriales, laborales, etc.) en la disputa por nuestros derechos? ¿Cuales son las actuales tensiones y conflictos en los activismos feministas? ¿Cuales son los núcleos conservadores dentro de los feminismos?
Otra de las mesas giró en torno a la conversación sobre “las/les jóvenes, configuraciones subjetivas y colectivas, demandas y derechos reclamados”. Una de las cuestiones en esta mesa estuvo vinculada con la marca generacional de las y les jóvenes en las luchas feministas, en tiempos de masificación de los feminismos, ¿qué disputas llevan a los diferentes espacios escuela, barrios, territorio, organizaciones políticas, militancia las jóvenes? ¿Cuáles son las demandas específicas y las formas de organización y construcción de identidades más allá del sexo-género? ¿Cuáles son las discusiones y las formas de los feminismos de las jóvenes de los sectores populares?
Hilvanadas en esas inquietudes se dieron las conversaciones, sostenidas en el compromiso de generar conocimientos desde la academia y procesos de intervención significativos para las juventudes. Evitando las formas dicotómicas de leer las tensiones que aparecen en la actualidad y prestando atención a las clasificaciones binarias de las identidades en las escuelas.
Algunos acuerdos se manifestaron sobre cómo pensar desde núcleos de derechos y su exigibilidad, en un contexto de avance de discursos y prácticas sostenidas desde fundamentalismos y racismos. Y de resistencias en algunas escuelas a la implementación efectiva de la ESI (educación sexual integral). En este contexto, las jóvenes están construyendo estrategias de autocuidado, han desarrollado modos de estar alertas y detectar violencias, y sobre todo pensar que hacer ahí, donde muchas veces no hay respuesta institucional.
Existe una heterogeneidad y diferencia en las juventudes que se asumen en una identidad feminista, y las que no asumen desde ese lugar de enunciación, pero que cuando hay una restricción de derechos asumen un proceso de disputa social. En ambos casos, coinciden quienes trabajan con jóvenes; hay una interpelación política a les adultes, que no reconocen los modos de autorregulación juvenil y que sostienen modos adultocéntricos en las escuelas y otras instituciones. Una consigna que muchas jóvenes repiten es “nada de nosotres sin nosotres”, y es una síntesis para pensar cómo se habitan los espacios con jóvenes. Y en eso, de qué modo lo intergeneracional se entrelaza en alianzas de encuentro más que en distancias y confrontación.
Una de las cuestiones que aparecieron a lo largo de la Jornada es la necesidad de pensar desde otros esquemas, sostenidos con preguntas que no tienen respuestas, al menos inmediatas y certeras, y pero que invitan a dejarse afectar por el mundo juvenil, por otras estéticas, por otros modos de vinculación y estilos de vida. Y así, estas investigadoras van dialogando con la comunidad y pensando los procesos de construcción de conocimientos.
*Por Redacción La tinta / Imagen de portada: Colectivo Manifiesto.