Amenazas a integrantes del Movimiento Campesino de Córdoba
Conversamos con integrantes del Movimiento Campesino de Córdoba a raíz de amenazas que vivieron compañeres de la organización por su activismo feminista en la zona.
Por Redacción La tinta
Hace unos días atrás algunes compañeres que viven y militan en los barrios de la ciudad de Cruz del Eje, recibieron amenazas a través de mensajes de textos en sus celulares personales, enviados de manera anónima. Amenazas gravemente violentas, misóginas, atentando contra sus vidas y la integridad de su cuerpo.
Estes compañeres vienen hace bastante tiempo militando en la construcción del feminismo campesino y popular. Problematizando y poniendo de manifiesto las desigualdades a las que nos enfrentamos en este sistema capitalista y patriarcal sobre todo las mujeres y disidencias.
Vienen organizando espacios de participación ciudadana, de discusiones políticas, espacios productivos en la elaboración de alimentos y conservas de productores locales, redes de comercialización en ferias de la zona, articulación con otras organizaciones sociales, políticas y feministas de la región.
Al parecer, esto pone bajo amenaza al sistema hegemónico y la respuesta, tan cobarde y contundente, es amenazar anónimamente, poniendo en juego la vida e integridad de las personas involucradas. El empoderamiento de les compañeres que participan de estos espacios genera resistencias, ya que emergen nueves dirigentes sociales capaces de exponer y llevar la voz de les oprimides.
El Movimiento Campesino de Córdoba (MCC) está conformado por 6 centrales ubicadas en el arco noroeste de la provincia. «En el MCC contamos con un equipo de trabajo que hace ya algunos años viene enfocado en la construcción del feminismo campesino y popular», nos contaron desde la organización.
A lo largo de los 20 años de vida fueron desarrollando espacios de participación y formación política para empoderar y visibilizar la enorme tarea que realizamos las mujeres y disidencias sosteniendo la vida campesina.
Se vienen dando espacios de intercambios entre mujeres en los territorios, encuentros de mujeres provinciales, escuelas populares de género, desarrollo de cadenas productivas en las que les compañeres sean las protagonistas. Revalorizan tareas que elles realizan históricamente, pero que son sistemáticamente invisibilidadas por este sistema patriarcal: la cría de cabritos, la producción de leche de cabra, quesos, dulce de leche, mermeladas, envasado de miel, entre otras.
«Al patriarcado le hacemos frente organizades, no permitiremos que nos amedrenten, tiembla porque lo estamos derribando», concluyen.
*Por Redacción La tinta.