Mujeres Creando: Mamá no me lo dijo – Parte 2
En la primera entrega de Mujeres Creando, organización que tiene una amplia trayectoria de lucha feminista en Bolivia, recorrimos parte de sus más de 20 años de historia, e intercambiamos miradas con María Galindo, una de sus fundadoras. A la vez que asistimos a la reinaguración de la casa de La Virgen de los Deseos. En esta segunda parte, nos acercamos a su concepción de justicia, entendemos la crítica a los pseudofeminismos funcionales al capitalismo, y profundizamos en la lectura política de la coyuntura boliviana, entre otras cosas.
Por Redacción La tinta
Es hora de pasar de la náusea al vómito
“El discurso ideológico no se come, no se ve, no se toca, no se ‘nada’, ¿no? es como vender una bolsa de aire vacía” (María Galindo).
María nos invita a reflexionar sobre el modo en que el neoliberalismo triunfó en América Latina planteándonos que el mismo, ofrece algo muy concreto a la sociedad: el consumo, el acceso (ficticio) a bienes y servicios. Y a ello contrapone la necesidad de crear “políticas concretas” contra el capitalismo y el patriarcado, algo que se pueda tocar, y que cualquier mujer, feminista o no, pueda acceder. Entre esas políticas concretas, existe la producción de justicia, que va mucho más allá de realizar asesoramiento jurídico con una abogada. Se trata de generar una práctica y un discurso que necesariamente apunten a políticas que se materialicen.
Según ella, existen tres maneras en que buscan producir justicia en torno a la violencia machista desde la organización: en el campo jurídico, en el campo social (llegar a un acuerdo) o en el campo ilegal, que es “hacer justicia en el acto y sin permiso de nadie”. Los tres métodos se combinan y se trabajan alternadamente según lo que sea posible y necesario.
Y nos explica: “Lo concreto en producción de justicia es lo que Juana, lo que María, lo que Carmen, lo que Beatriz necesita, decide y quiere ¿ya? entonces puede ir desde la firma de un acuerdo en una asistencia familiar hasta el escrache”.
Cuidado, el patriarcado ahora se disfraza de mujer angurrienta de poder
Galindo es muy crítica hacia algunas corrientes latinoamericanas que se dicen a sí mismas “feministas” y que en realidad son funcionales al capitalismo. “Se llama feminismo pero es una comprensión muy superficial, muy distorcionada y confusa. Es liberalismo”, y continua diciendo: “Yo sé que hay una especie de plataformita de intelectuales feministas latinoamericanas que se van de evento en evento. Me cago en ellas, en todas. Empezando en la A y terminando en la Z. Y te lo digo en serio. Nosotras dialogamos con la realidad concreta de las mujeres. Con el pan amargo de cada día. Con el feminicidio. Con la tipa que ha sido asesinada no por el capitalismo sino por un tipo que se llama Juan y era su novio”, afirma enérgica.
Nos cuenta que ella tomó una decisión hace años, “en el año 2000 yo decidí dejar de ir a los encuentros feministas latinoamericanos porque son encuentros en hoteles 5 estrellas que llegan a costar más de medio millón de dólares que están pagados por organizaciones como la Fundación Ford o el Banco Mundial ONU Mujeres y que lo único que están es cooptando al feminismo para el propio neoliberalismo y están llenos de tecnócratas”.
Desde Mujeres Creando se organizan dos encuentros por año con financiamiento autónomo: uno en la región andina de Bolivia y otro en la región amazónica. Allí se encuentran mujeres costureras, desempleadas, peluqueras. Mujeres que empiezan a crear nuevos feminismos.
Mujer, confía en el sonido de tu propia voz
En la reinaguración de La Virgen de los Deseos, la chef Emiliana Quispe narró su historia de aprendizajes. Comenzó contando que es de un pueblo llamado Guaqui, en el departamento de La Paz, ubicado a las orillas del lago Titicaca. Emiliana es integrante de Mujeres Creando desde hace 12 años y también fue integrante del programa Soy Trabajadora del Hogar: “Hemos tenido un equipo, puras mujeres trabajadoras del hogar que sin saber de periodismo hemos asumido la radio, hemos aprendido mucho nosotras”. Así comenzó a tener un espacio radial en el que recuperaba los saberes de los abuelos, de los ancestros. “Lo que yo hacía era rescatar los productos nativos y hacer entrevistas a las compañeras que vienen del campo a traer sus productos desde la zona del valle, del oriente y les hacía entrevistas”.
Cuenta que en un principio le resultó muy difícil agarrar el micrófono y la grabadora, “entonces yo temblando así, después ya me ha gustado hacer eso. He estado casi 8 años en el programa con orgullo y dignidad”. Así, Emiliana entrevistó a muchas otras mujeres a las que les preguntaba qué productos producían en sus pueblos y cómo los hacían. Y llegó a una conclusión: “En el campo las mujeres inventan con los productos que hay. Entonces de esos preparados son sus alimentaciones. En el campo no hay receta”.
Ella sistematizaba lo que había oído y lo transmitía en la radio. “Entonces después ya he empezado a estudiar porque me gusta preparar la comida. Es mi pasión. Mi mamá es cocinera y siempre me ha gustado. Para mi la comida es un arte, una arquitectura porque combinas sabores, colores”, afirma Emiliana quien nos dice que todo se puede aprender.
La lucha es fiera mujer, sin partido ni caudillo
María Galindo lanza también su lectura acerca de la coyuntura política boliviana: “La situación política en Bolivia es muy complicada porque el gobierno de Evo Morales, hace mucho tiempo ya ha perdido contenido ideológico. Es un aparato de destrucción de las organizaciones populares. Y es un aparato simplemente de poder estatal. Ahora lo que a nosotras nos preocupa muchísimo es que si bien el gobierno de Evo Morales no tiene contenido ideológico, no es un gobierno indígena, no es un gobierno de respeto a la Pachamama, no es un gobierno de despatriarcalización, etcétera, etcétera. No es un gobierno de descolonización tampoco, es un gobierno neoliberal, extractivista, depredador de la naturaleza, de corte completamente colonial pero tiene una especie de disfraz ideológico potente”.
Esta crítica que hace Galindo al gobierno de Evo Morales, traer aparejado un problema que ella deja bien en claro y que nosotras resumimos en la pregunta ¿Qué después de Evo?
“Cuestionar un gobierno así te provoca un cierto problema porque quien aprovecha de manera directa el cuestionamiento del gobierno de Evo Morales son fuerzas racistas, empresariales, oligárquicas, etcétera. Que aunque están dentro del gobierno y están siendo beneficiadas por el gobierno igual y todo quisieran sustituir. Entonces yo tengo mucha preocupación de que en Bolivia pase algo parecido a lo que ha pasado en Argentina. O sea el kirchnerismo era una mierda, y Macri es una mierda al cubo. Entonces no es que podemos ir a peor del gobierno de Evo Morales. Pero no queremos que el cuestionamiento del gobierno de Evo Morales nos instale en el péndulo trágico de la historia de un giro hacia una visión conservadora de la sociedad. Porque ha costado mucho esfuerzo llegar al punto donde estamos”.
Ante este panorama tan complejo la apuesta de Mujeres Creando es la autonomía. “Creemos muy importante este florecimiento de la idea de autonomías, de colectivos que hay un reflotar de eso y al mismo tiempo hay que trabajar de nuevo contra los racistas, contra los fascistas como si no hubiera pasado nada. Es un doble trabajo muy duro el que hay que hacer, y hay que hacerlo, pero nuestra agenda histórica es construir voz propia. Voz social desde las mujeres. Construir voz feminista y eso trasciende las coyunturas, los gobiernos… va más allá de esas pequeñas artimañas”, concluye Galindo.
El día de la re inaguración de la casa La Virgen de los Deseos, se destaparon dos imágenes que representan la lucha; dos murales que fueron realizados por Esther Argollo, Danitza Luna y María Galindo: La Virgen de los ovarios: protectora de los Abortos y La virgen de los Feminicidios: que llora por todas las asesinadas. Nos vamos pensando que estas imágenes debería ser estampitas que cada una pueda llevar consigo mismo recordándonos que, al decir de Galindo “el feminismo es una alianza entre rebeldes”.
*Por Redacción La tinta / Fotos: Colectivo Manifiesto.
Mujeres Creando: no vamos a desarmar la casa del amo con las herramientas del amo – Parte 1
*La entrevista a María Galindo fue realizada junto a Carolina León Torres.