Consultorio de Salud Integral: autogestión, salud y amor
Hace ocho años que el Consultorio de Salud Integral brinda acompañamiento en procesos de cuidados en salud sexual y (no) reproductiva en la provincia de Córdoba. Miles de personas han transitado por la institución por su calidad y por la atención amorosa que reciben.
Por Redacción La tinta
“Estamos escribiendo una nota sobre el Consultorio de Salud Integral, ¿alguna tiene algo para decir?”, pregunté en un grupo de amigas. “Ese consultorio es amor”, dijo Rocío, “fue la primera vez en la vida que disfruté ir al/la médicx”, largó Tania, “ay, una amiga se atendió en una situación difícil y ama el consultorio”, agregó Selva.
El nombre formal es Cooperativa de Trabajo Salud Integral Ltda., pero muches en Córdoba lo conocemos como Consultorio de Salud Integral. Es un espacio amoroso de acompañamiento en las decisiones que tomamos para cuidar nuestros cuerpos. Decisiones atravesadas, muchas veces, por miedos, prejuicios y silencios, pero “entrás ahí y ya te das cuenta de que va a estar todo bien, que es un ambiente cuidado y respetuoso”, señala Ana, otra de las tantas personas que lo eligió como espacio de atención ginecológica.
El Consultorio de Salud Integral funciona desde el año 2013 en el centro de la ciudad de Córdoba, garantizando el acceso a procesos de atención y cuidados en salud sexual, reproductiva y no reproductiva. En tiempos donde andábamos, aún amparades por la ley, buscando desesperadas quién acuerpe nuestras decisiones, el Consultorio fue y es un lugar seguro de abrazo.
Está conformado por un equipo de trabajadores de la salud, que abordan la tarea desde una mirada activista/militante feminista. Se especializan en la prevención del embarazo inoportuno/no deseado/no planificado desde un modelo integral de atención y desde una perspectiva de derechos humanos y de géneros. Andrea Nieva, médica integrante del espacio, explica a La tinta que “salud integral es pensar que la atención de las personas implica el abordaje de todos los aspectos que tengan que ver con su vida. Es recibir a una persona sabiendo que tiene una historia de cuidados generales y de cuidados de salud, que posee conocimientos, que tiene cierto nivel educativo, que tiene posiciones determinadas ante la vida, que posee cierto nivel socioeconómico y que todo esto puede condicionar o favorecer la resolución de problemas”. Se trata de un abordaje que no solo tiene en cuenta lo físico, sino también lo psico-social.
Es un espacio autogestivo y cooperativo, que apuesta a un modo horizontal para la toma de decisiones, a partir de acuerdos colectivos de trabajo, asumiendo roles por áreas y no cargos jerárquicos. “La autonomía está presente desde nuestra raíz”, dice una de sus integrantes. El compromiso activista nutre su accionar social y político como institución de salud y, desde esa perspectiva, promueven el ejercicio de la autonomía en cada usuarie.
¿Qué podemos encontrar en el Consultorio?
“Yo me atendí por un aborto no punible y fue todo el amor que puede existir. Hablaron conmigo como pares, como hermanas que comparten lo que saben y te contienen”, relata Alejandra, usuaria del Consultorio. Brindan asesorías en anticoncepción y cuidados en salud sexual, garantizando el acceso a prácticas seguras de Tratamiento de Aborto Incompleto (TAI), Interrupciones Legales del Embarazo (ILE) y, a partir de la Ley Nacional N° 27.610, la Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE). Además, funciona como centro capacitador y de acompañamiento a efectores y equipos de salud que quieran ampliar conocimientos y prácticas en el tratamiento integral del embarazo no deseado/no planificado.
Les trabajadores se especializan en salud sexual y (no) reproductiva. Acompañan distintos procesos vitales de las personas que se acercan a la institución, consultas relacionadas con (auto)cuidados y prevención y abordaje de situaciones de violencias de géneros. En el Consultorio, ofrecen IVE dentro de un conjunto de otras prácticas relacionadas con la salud sexual como el papanicolau, el asesoramiento en métodos anticonceptivos, los controles ginecológicos.
La asesoría en anticoncepción que realizan es innovadora en tanto pone en el centro a la persona consultante. No se trata de un detalle de todos los métodos disponibles o de recomendaciones, sino que se individualiza a le usuarie y, a partir de la salud, el estilo de vida y la accesibilidad, se llega al ideal para esa persona en ese momento.
Juan Burgos es orientador del espacio, un rol fundamental para el acompañamiento a las personas que acuden al Consultorio, con una escucha activa para la toma de decisiones autónomas. Relata que “muchas mujeres refieren que no tener garantizado un método anticonceptivo o depender de la pastilla del día después o de que su pareja sexual eyacule afuera, también impacta en el modo con que viven el disfrute de su sexualidad y del placer. Sucede, sobre todo, en el contexto actual, con la falta de métodos anticonceptivos que hay en los centros de salud y en general”.
Aborto Legal
A fin del 2020, como consecuencia de décadas de lucha transfeminista, conseguimos que se garanticen por ley los abortos hasta las 14 semanas de embarazo inclusive, con la sola voluntad de la persona gestante. A partir de las 15 semanas, existen causales para el acceso a la interrupción legal del embarazo: cuando se pone en riesgo la vida o la salud de la persona gestante, o cuando el embarazo proviene de una situacion de violencia sexual.
“El reconocimiento masivo y público de ese derecho hace que el acompañamiento sea más fácil, no menos complejo, pero sí más liviano”, explica Andrea y agrega: “La salud pública tiene la obligación de garantizarlo, ya no es un favor que se le hace a las mujeres que desesperadas pedían abortar, ahora lo pueden exigir y eso empodera y favorece otra subjetividad, menos culpógena, menos denigrante, y la autonomía ya no es una quimera”.
En el Consultorio, realizan atenciones en IVE con un modelo de atención integral en que la persona gestante tiene la posibilidad de contar con una consulta médica y con orientación en el acompañamiento para despejar dudas, miedos, mitos, conflictos que pueden estar asociados con el imaginario y vivencias relacionadas con aborto. Garantizan el acceso a tratamientos farmacológicos y Aspiración Manual Endouterina (AMEU) con altos estándares de calidad científicos y basándose en las recomendaciones y guías de la Organización Mundial de la Salud y del Protocolo para la atención integral de las personas con derecho a la Interrupción Voluntaria y Legal del Embarazo del Ministerio de Salud de la Nación.
“La IVE descriminaliza y desestigmatiza a quienes deciden interrumpir sus embarazos en la medida que queda sujeta a la voluntad, al deseo de no gestar o de interrumpir la gestación, y no exige justificativos para la toma de esta decisión”, explica Juan. “El carácter voluntario del acceso a la práctica hasta la semana 14 la equipara con otras prácticas médicas de complejidad similar, quitándole su carácter excepcional, tabú, moral”, agrega.
La legalización del aborto abrió nuevos horizontes para el Consultorio. Por un lado, proyectan generar convenios con obras sociales para ampliar la cobertura y, por otro lado, sueñan con crecer espacialmente y en la oferta de servicios: “Actualmente, acompañamos las IVE hasta la semana 14, según estipula la ley. Quisiéramos acompañar ILE y para eso necesitamos una infraestructura de mayor complejidad y otros recursos”, explica Andrea. “Deseamos ampliar las prácticas porque son muy frecuentes relatos de falta de accesos a un montón de prestaciones, muy obstaculizadas históricamente, no solo las IVE, sino también, por ejemplo, el acceso a la ligadura tubaria (esterilización quirúrgica) y la vasectomía”, sigue.
La concepción de este grupo de trabajadores y profesionales ha sido siempre garantizar un cuidado integral de la salud desde una mirada feminista, “poniendo en crisis las prácticas patriarcales y favoreciendo la autonomía sobre los cuerpos”, concluye Andrea.
En sus redes sociales, una usuaria les escribe: “Gracias por este espacio que abre puertas a destinos deseados”.
*Por Redacción La tinta / Imagen de portada: Consultorio de Salud Integral.
