«Un oficio es clave, te salva la vida»
Inauguró Fundación Pircas, una escuela que brinda talleres de formación y capacitación en oficios, para conectar, descubrir y desarrollar habilidades y ponerlas en práctica en la vida diaria y profesional.
Por Talía Robino para La tinta
Herrería, construcción en seco, albañilería, plomería, instalaciones eléctricas, carpintería, diseño y armado de muebles de melamina. ¿Qué sería de nuestras vidas si al menos supiéramos uno de estos oficios? ¿Cómo repercutiría en nuestra vida diaria y profesional? ¿Y en nuestra comunidad?
En el corazón de la ciudad de Córdoba, en la calle Salta, entre Sarmiento y Catamarca, Fundación Pircas inauguró este lunes su espacio, un proyecto que se venía gestando desde principios del año pasado y que busca valorizar los saberes de oficio. Un grupo de amigues con trayectorias y experiencias diversas en marcos educativos formales y no formales, y atravesades fuertemente por lo comunitario, se encontraron con el deseo compartido de gestar un espacio que sea para toda la comunidad, con el objetivo de ampliar oportunidades de formación y salida laboral.
Fundación Pircas es una escuela de oficios que tiene el propósito de construir caminos en la formación personal y el encuentro comunitario. Esta búsqueda es la que reunió hace un año a Melani Scheimberg, Mora Stiberman, Martín Scheimberg y Lucía Ferrari para fundar hoy este proyecto, que ahora cuenta con más de 50 voluntaries, profesionales y organizaciones e instituciones del sector público y privado.
“Desde un inicio, supimos que los mejores resultados en materia de impacto vienen de hacer lo que mejor sabemos hacer y más disfrutamos, en pos de una causa que nos apasiona; en nuestro caso, fue el deseo de construir desde la educación de calidad, ampliando las oportunidades en la formación de oficios para todos y todas”, comparte a La tinta Mora Stiberman, co-fundadora de este proyecto.
“Así nació Fundación Pircas”, dice Mora y nos cuenta que el nombre tiene que ver con la puesta en valor de lo artesanal y hecho a mano, con la posibilidad de abrir y marcar caminos, y con la diversidad: “Cada piedra que conforma la pirca es única y singular, a la vez que hace a la diversidad”.
—¿Cuál es la importancia que tiene para ustedes el desarrollo de un oficio hoy?
—“Cada vez que hablás con algune de les profes que conforman nuestro equipo en Pircas, no hay une que no diga ‘un oficio es clave, todes deberíamos saber un oficio. Te salva la vida’.
Desde Pircas, entendemos que los saberes de oficio están desvalorizados y que apostar por una escuela de oficios implica, en primer lugar, ponerlos en valor. En segundo lugar, entendemos que la demanda laboral de personas capacitadas en un oficio es muy grande, como así también la necesidad vital del saber hacer, del conocimiento teórico y práctico para el empoderamiento de las personas en sus vidas cotidianas”.
Tejer redes y generar oportunidades en la comunidad
Mora nos cuenta que, desde un primer momento, la iniciativa fue gestada como un proyecto social, sin fines de lucro, abierto a la comunidad, con el objetivo de promover nuevas oportunidades en formación de calidad; y que para ello, tejer redes es una pata fundamental.
“Así, de a poquito, fuimos y seguimos armando redes con organizaciones e instituciones barriales con quienes potenciarnos, difundir el proyecto y llegar a más personas. Para nosotres, son las instituciones y organizaciones barriales las que sostienen desde siempre las tramas comunitarias desde su trabajo territorial diario y sostenido en el tiempo”.
Una de las formas de tejer redes se realiza con el programa Multiplica(dos), que garantiza que por cada persona que elige formarse y puede abonarlo, posibilita que otra persona con menos recursos económicos lo pueda hacer de forma gratuita. De esta manera, trabajan en un mapeo territorial de zonas carenciadas, generan redes estratégicas con organizaciones locales y nacionales que están trabajando en el territorio, analizan los perfiles y distribuyen las becas entre les interesades.
“Creemos que las posibilidades de este proyecto son infinitas: desde la formación en oficios, pasando por la posibilidad de que les estudiantes que no finalizaron los estudios formales puedan ser acompañades desde Pircas para hacerlo, hasta generar redes que promuevan mayores oportunidades en la salida laboral”, sostiene.
En tiempos donde revalorizar los oficios es tarea urgente y necesaria, nace una escuela con la voluntad de darle valor a estos saberes. Con la convicción de que el “hacer” debe ir de la mano con el disfrute y con el compromiso social por generar oportunidades laborales y de formación en un espacio social, comunitario y colaborativo.
*Por Talía Robino para La tinta / Imagen de portada: A/D.