Balance 2021: Honduras cierra el año con grandes retos y algunos logros para LGBT+
El año en Honduras estuvo también marcado por las elecciones que tuvo como ganadora a Xiomara Castro, la primera presidenta mujer de ese país.
Honduras vivió un año único e irrepetible en el 2021. La sentencia que condenó al Estado por el asesinato de Vicky Hernández marca un hito en la historia LGBTIQ+ del país y al mismo tiempo desencadenó una ola de odio por parte del gobierno del presidente saliente, Juan Orlando Hernández.
Los migrantes LGBTIQ+ se unieron a la gigantesca caravana de desplazados (más de 300 personas diversas), el Congreso Nacional pasó a categoría de constitucional los artículos que especificaban el tema del aborto y las uniones igualitarias.
Además, por primera vez en la historia, los votantes eligieron a una mujer presidenta que promete una agenda más inclusiva a favor de las mujeres y poblaciones diversas.
Xiomara, la primera presidenta hondureña
Una mujer presidenta luego de 12 años de gobierno conservador que poco o nada hizo por los ataques de odio y muertes LGBTIQ+.
Sin duda que el momento estelar para las mujeres y los demás grupos invisibilizados fue la elección como presidenta de Honduras de la candidata del partido de centroizquierda Libertad y Refundación (Libre), Xiomara Castro.
Castro llega al poder luego de 12 años de gobierno del conservador Partido Nacionalista, el cual se impuso luego de un sangriento golpe de Estado en 2009 contra el esposo de Xiomara, Manuel Mel Zelaya.
Xiomara Castro es un rayo de luz para los movimientos feministas y diversos de Honduras. Su partido, Libre, ya ha dado muestras de ser una institución más inclusiva al nombrar secretaria de la Diversidad a la reconocida abogada y activista trans, Vienna Ávila.
Una lista diversa
Libre también contaba en las elecciones de 2021 con una respetable cantidad de candidatos y candidatas LGBTIQ+, como Víctor Grajeda, quien se convirtió en el primer diputado suplente abiertamente gay en la historia del Congreso hondureño.
El gobierno nacionalista de Juan Orlando Hernández poco o nada hizo por visibilizar a los grupos LGBTIQ+ hondureños. Por el contrario, los llamó “enemigos de la independencia” en su discurso de bicentenario de las fiestas patrias, lo cual desató las críticas nacionales e internacionales contra un gobierno que ha sido señalado por una gran cantidad de escándalos de corrupción, incluyendo el robo de billones de lempiras del Seguro Social y la compra sobrevalorada de hospitales móviles que no cumplían su función de atender a los contagiados de coronavirus, según el Consejo Nacional Anticorrupción, CNA.
Al menos unas 20 organizaciones como Colectivo Violeta, Asociación Arcoíris, Honduras Diversa y Cattrachas denunciaron el “discurso de odio” del mandatario Hernández.
Honduras Diversa acudió al Ministerio Público para denunciar formalmente el discurso de Hernández, pero los fiscales argumentaron que las frases del presidente tienen el respaldo de la Constitución.
Una justicia que tardó, pero llegó
La derrota por más de 20 puntos de diferencia frente a Libre no fue el primer traspié del gobierno del Partido Nacional en 2021. Unos meses antes, en junio de este año, sufrió un duro revés cuando la Corte Interamericana de Derechos Humanos lo condenó por el asesinato de la activista trans Vicky Hernández en 2009, en medio del toque de queda por el golpe de Estado de ese año contra Manuel Zelaya.
Tras 12 años de buscar la justicia, los mismos que llevaba el Partido Nacional en el poder, la familia de Vicky pudo respirar con alivio cuando la Corte IDH condenó al Estado y le exigió crear iniciativas a favor de las poblaciones diversas de Honduras.
Ley de identidad de género
Una de las normas que la CIDH ordenó establecer es la ley de identidad de género que los grupos diversos del país han estado exigiendo.
Esa ley permitirá que las personas LGBTIQ+ aparezcan en sus documentos de identidad con el nombre y la apariencia que han decidido adoptar. “Esa ley sería muy útil en mi vida diaria”, dice la adolescente trans Amelian Zerón. “Resolvería muchos conflictos”.
Años para el olvido
Los 12 años de lo que muchos analistas llamaron “narcodictadura” solo sirvieron para agravar la ya terrible situación de las y los hondureños en general y de los grupos LGBTIQ+ en especial.
Castigadxs por la pobreza, la corrupción, la destrucción por huracanes y la creación de leyes como el blindaje de la prohibición del aborto y del matrimonio entre personas del mismo sexo, al menos 300 personas diversas decidieron huir del país junto con la caravana de al menos 10.000 personas que salieron de Honduras para buscar asilo en Estados Unidos.
Los crímenes de odio no cesan
Las 300 personas LGBTIQ+ también huyeron de los crímenes de odio. El año 2021 ha dejado 26 muertes violentas (18 gay, cuatro trans y cuatro lesbianas), según el observatorio de muertes violentas de la Red Lésbica Cattrachas.
Una de las muertes violentas que golpeó con fuerza a los grupos de la diversidad sexual fue la de la joven trans Ericka Tatiana Martínez García.
El asesinato de Tatiana ocurrió apenas diez días después de que el presidente Juan Orlando Hernández pronunciara lo que los colectivos LGBTIQ+ llamaron un “discurso de odio” durante la celebración del bicentenario de Independencia del país.
Lo peor es que Tatiana era una reconocida activista del Partido Nacional al que pertenece el mandatario saliente.
A pesar de esto, ni Hernández ni ningún representante del nacionalismo dijeron nada sobre el asesinato de la mujer trans ocurrido en la ciudad de Santa Rosa de Copán, en el occidente de Honduras.
Hasta el momento, solo hay una persona detenida en el mes de diciembre por este caso.
Para celebrar
El año cerró con una buena noticia. La Red Lésbica Cattrachas ganó en diciembre el premio Europa de Derechos Humanos. Primero su coordinadora, Indyra Mendoza, y Claudia Spelman se convirtieron en septiembre en una de las cien personas más influyentes del mundo en 2021, según la revista estadounidense TIME.
Mendoza mereció esa distinción junto a la activista trans Claudia Spellman, quien fue una testiga importante en el juicio en el que el Estado hondureño fue condenado por el asesinato de Vicky Hernández.
Es la primera vez que personas hondureñas aparecen en esa exclusiva lista.
Tres meses después, Cattrachas vuelve a destacar en su lucha por los derechos de las poblaciones invisibilizadas al recibir el importante premio que entrega la Unión Europea. “Es un honor para la comunidad”, dijo Mendoza.
El cierre de un pleno de desafíos
En resumen, 2021 ha sido un año de duros retos y gigantescos logros para las poblaciones LGBTIQ+.
“Fue un año de superación personal y proyectos como el de salud inclusiva”, dijo el doctor Dylan Duarte, quien es un reconocido activista trans retratado en el documental Dylan. “Fue de desafíos porque tengo meses sin un trabajo estable”.
Sin embargo, Duarte espera en 2022 encontrar un empleo fijo para sostenerse y desarrollar sus planes en favor de los grupos diversos, en especial de hombres trans hondureños.
Entretanto, para la activista trans de Asociación Kukulcán, Layonith Chinchilla, 2021 ha sido un año difícil debido al aumento de los actos discriminatorios contra las mujeres trans.
“Vivimos discriminación, estigma y rechazo en los núcleos familiares y en la sociedad”. A pesar de los desafíos diarios, Layonith afirmó que tiene grandes esperanzas para el año que viene.
Por medio de la sentencia en el caso de Vicky Hernández, Layonith espera que el gobierno cumpla, “como medida de reparación, la aprobación de la ley de identidad de género. Vamos a seguir haciendo incidencia en la lucha de nuestros derechos y reivindicaciones”.
*Por Agencia Presentes / Imagen de portada: Agencia Presentes.