
Guadañas: cuando jugar al fútbol es un acto de amor y militancia
Dicen que eran el niñe que estaba en un rincón mirando mientras sus compañeros aprendían a dominar la pelota. Dicen que creían que “eran un queso”. Dicen que ese fútbol, el de la infancia y de la adolescencia, los expulsó. Dicen que, ya de grandes, descubrieron que les gustaba la cancha y que había otra manera de practicar un deporte que les devuelve la alegría. Dicen mucho más de lo que dicen cuando hablan, cuando juegan, cuando se abrazan y se ríen y festejan sin importar cómo salió el partido. Por Gabriela Cruz.