La Rimbombante: 15 años al aire
Desde la Escuela primaria Hugo Leonelli, en Barrio Granja de Funes, una radio comunitaria lleva más de 15 años al aire con las voces de la comunidad: “Desde Argüello pa’ todo el multiverso”. Integrada por una Red de organizaciones, instituciones y vecines de la zona, apuestan a la gestión colectiva. La Rimbombante es un proyecto de comunicación popular, un espacio de encuentro, de organización y, sobre todo, un orgullo barrial. Hablamos con dos integrantes que nos cuentan cómo la promoción de la salud está al aire. ¿Quién dice que la radio pasó de moda? Sintonicen la 104.9.
Por Redacción La tinta
En tiempos de múltiples plataformas que producen contenido e información enlatada, unidireccional, en el loop del bombardeo mediático que reproduce sentidos hegemónicos, las radios comunitarias siguen siendo espacios valiosos de pluralidad de voces.
En la Escuela primaria Hugo Leonelli de Barrio Granja de Funes 2, está La Rimbombante 104.9, radio comunitaria nacida en 2006, como parte de un proyecto de la Red Agenda -hoy llamada Mesa de Organizaciones- para trabajar distintas problemáticas comunitarias. Lo más preocupante, en ese momento, era que muchos jóvenes y niñes dejaban sus procesos escolares. Así aparece la radio, como un proyecto puente para vincularles de nuevo a la escuela. El nombre es fruto de un grupo de jóvenes pioneres en comenzar a habitar y hacer radio.
Integrada por organizaciones, instituciones y vecines del territorio, la radio tiene mojones desde los cuales miran la realidad y construyen sus agendas y programaciones: los derechos humanos, la inclusión de la diversidad de voces, la participación protagónica de organizaciones e instituciones locales, la promoción de los pueblos originarios, las identidades de género y las niñeces y juventudes como sujetos de derecho.
Conversamos con Mariela Lario y Stella Morell, ambas trabajadoras de la salud e integrantes de la radio, con dos programas de radio donde la salud es la protagonista. “Una de las referentes barriales siempre dice que la radio es hija de esa red de organizaciones de comienzo de los 2000. Creada como radio escolar y comunitaria, fundamentalmente porque no querían que quedara limitada o circunscripta a las lógicas y gestiones de lo público estatal y los cambios de gestión”, cuentan mientras hacen memoria de esos comienzos.
Comunitaria, sin fines de lucro y de gestión colectiva, así La Rimbo se ha sostenido durante todos estos años. Los recursos y materiales son de propiedad colectiva, para fines sociales, culturales y educativos. “Quien pasa por la radio sabe que el compromiso fundacional sigue vigente: promover la diversidad y el protagonismo de voces de los barrios en la construcción de noticias, en la expresión de las necesidades y en la búsqueda de proyectos”, detallan Mariela y Stella.
Una comisión integrada por referentes de los distintos espacios que conforman la radio se reúne cada semana, piensan la agenda, construyen redes, se presentan a proyectos y buscan las formas para sostenerse económicamente. Quienes nadamos las aguas de la autogestión sabemos que no es fácil. La Rimbo tiene dos fuentes principales de financiamiento: el Club de amigues y socies que hacen aportes mensuales, puede ser desde $50 a $1.000, lo que cada quien pueda. Y los salarios complementarios, fundamentales para sostener la operación técnica, la producción y la conducción que llevan adelante vecines. Nos explican que “el acceso a estos salarios es parte de la articulación y la participación política en el Foro Argentino de Radios Comunitarias (FARCO), para quienes integramos este foro, estos reconocimientos económicos son imprescindibles para sostener al aire las radios y entenderlas como parte del campo de la economía popular”.
A contramano de lo que pasó con otras organizaciones, para La Rimbo, la pandemia les dio una chance, una oportunidad y ampliación del trabajo y de la oyencia. “Accedimos al servicio de internet, algo que durante mucho tiempo, por dificultades económicas y de accesibilidad en la zona, no tuvimos y empezamos a salir por Facebook en vivo. A la vez que fue una herramienta central para las docentes, que generaron en todos los programas contenidos educativos. En medio de un año terrible, de retrocesos y de crisis, la radio fue un lugar de apropiación, fue muy escuchada por las familias y por toda la comunidad, fue un espacio de encuentro, de saberse ahí. Frente a las dificultades de acceso a dispositivos tecnológicos e internet para poder participar de la educación virtual, la radio por aire estuvo siempre al alcance siempre y fue una opción para acceder a contenidos, información y entretenimiento”, nos cuentan.
La radio no es solamente un medio comunitario de comunicación, es también una organización, un lugar de encuentro, de intercambio y construcción de discursos. “La Rimbo nos da identidad a las personas que la transitamos, al barrio le da una característica propia. Es fuente de oficio, de capacitación, de difusión de eventos del barrio y la zona. ‘La rimbo te lo hace saber’”.
La Salud al aire
¿Qué tiene que ver una radio comunitaria con un Centro de Salud? El sistema de salud tiene como estrategia de organización la diversificación en 3 niveles de atención, según complejidades y problemas. El primer nivel es el que acontece en los llamados Centros de Salud en los barrios. Mariela es Psicóloga y Stella es Trabajadora Social y Comunicadora, trabajan juntas en esto que se llama Primer Nivel de atención de la salud e integran el equipo de salud del Barrio IPV Argüello, y son parte de la radio desde que llegaron al barrio, en 2008. Entienden que la salud es una capacidad de las personas, las organizaciones y la comunidad para transformar la realidad.
“La salud tiene muchas dimensiones: subjetivas, sociales, económicas, biológicas, físicas, comunitarias e históricas. Lo que hoy vivimos tiene que ver con todo un entramado de historias y contextos en los que vivimos, con sus posibilidades y sus limitaciones. No se puede reducir la salud a la atención individual y física en un consultorio, que es la primera representación que se nos viene a la cabeza: un consultorio con algún profesional de la medicina o de la enfermería. Si bien eso es parte, no lo es todo cuando se trabaja en los barrios en el primer nivel de atención”, nos explican.
Lo comunitario de la salud tiene que ver con la puesta en marcha de estrategias de promoción de salud y prevención de las enfermedades, el trabajo en red con las organizaciones e instituciones que también producen salud. Ellas están en los consultorios, pero, sobre todo, pateando el barrio y haciendo radio. Son comunicadoras populares y efectoras de la salud al aire, desarrollando contenido actualmente en dos programas: “Mujeres con todo el aire”, que sale todos los martes a las 9 horas, desde 2014. Trabajan desde y por los derechos de las mujeres y el acceso a la salud. Al calor de los procesos feministas, este programa ha ido poniendo a circular barrialmente una diversidad de relatos, contenidos e información de distintos campos como la nutrición, los derechos sexuales y (no) reproductivos, la salud mental, entre muchos otros que vehiculizan a través de la radio.
El otro programa es la apuesta de este año: “La salud en colectivo”, realizado conjuntamente desde 3 centros de salud, Stella desde el N° 57 en IPV Argüello, Mariela en el N° 92 de Barrio Cortaderos y Amalia Paez en el N° 33. Salen al aire los martes a las 11 horas. Recuperan la historia de sus centros de salud, las experiencias comunitarias que se desarrollaron en cada uno de los territorios. Un espacio para traer a la memoria los procesos históricos de cada barrio, como un ejercicio de las narrativas que se necesitan en este contexto fragmentado al que nos expuso la pandemia, volver a esos afectos que fueron el motor de procesos comunitarios. “Trabajamos diversas temáticas de salud, intentamos problematizar nuestras propias prácticas como agentes de salud, generar nuevas resignificaciones y poner la voz de la comunidad sobre esas prácticas. Y sobre todo, hacer visible que la salud no es solamente el tránsito por los equipos de salud, sino que se produce de la mano o en muchos casos, principalmente, de centros comunitarios, escuelas, comedores, clubes”, detallaron desde el programa.
Los miércoles a las 10 horas está “Rimbo Salud”, producido y conducido por tres jóvenes del barrio, que ponen a circular sus perspectivas y miradas políticas de la salud en sus realidades.
Que la salud sea un contenido central en la radio es una forma de que ingresen en los discursos y en las instituciones públicas otras lógicas sobre la construcción de salud. La Rimbombante lleva la delantera desde hace años. Reconocer y apoyar todo este tremendo trabajo territorial es un mimo. Y también colaborar para que esto siga pasando y se multiplique. Para colaborar, podés contactarte por sus redes sociales o escribir a rimbombanteradio@gmail.com. Y aguanten las radios comunitarias.
*Por Redacción La tinta / Imagen de portada: Radio Rimbombante.