Un represor en prisión domiciliaria ejerce violencia de género contra una mujer
En el marco de la cuarentena por el COVID 19, las situaciones de emergencia por violencia de género se agudizan en San Juan. Un caso emblemático es la del represor ex militar Daniel Rolando Gómez, quien actualmente posee prisión domiciliaria por una condena de 25 años y una cadena perpetua por crímenes de lesa humanidad, y que ahora ha sido denunciado por violencia de género.
Por El cimbronazo
En horas de la noche, se conoció el desesperado pedido de ayuda de una mujer, vecina de Daniel “Roly” Gómez, denunciando las agresiones verbales del represor. Por estas horas, la mujer radica una denuncia en la Comisaria de la Mujer, y se ha dado parte a las autoridades federales de incumbencia, debido a que Gómez fue procesado dos veces por la justicia federal argentina, y actualmente es uno de los acusados en la Megacausa III que inició hace pocos meses en San Juan. Aduciendo razones de salud, Gómez fue beneficiado a partir de 2015 con una prisión domiciliaria.
Pero no es la primera vez que Rolando Gómez ha sido denunciado por sus vecinos del Consorcio Centro empleados de Comercio, en la ciudad de San Juan. Ya en 2019, se registró una denuncia en su contra, luego de que amenazara a uno de los vecinos en una reunión de consorcio. Gómez presenta un cuadro de salud terminal, situación que ha beneficiado su condición de preso de la justicia argentina, y que lo ha eximido durante los últimos años de hacerse presente en las audiencias de los juicios por crímenes de lesa humanidad en los cuales sigue imputado.
Los vecinos cuentan que Gómez ha pretendido crear un entorno de “prisión hospitalaria” dada su condición, situación que no se acomoda a la vecindad del lugar, en la cual conviven niños, niñas, y adolescentes, y personas jóvenes que tienen una rutina social que “irrita” al condenado. Pese a estas denuncias, la situación beneficiosa de Gómez no se ha visto modificada y le ha dado un “aire de impunidad” que ha ido en escalada.
Gómez estuvo a cargo del distrito Militar en San Juan hasta la década de los años 90 e integró la denominada Compañía “C” del Regimiento de Infantería de Montaña 22 junto al represor Gustavo Ramón De Marchi. Por sus actuaciones durante los años negros de la última dictadura argentina fue condenado por la Justicia Federal Argentina junto a otros represores de la época, entre ellos, el el ex jefe de Operaciones del RIM 22 y jefe durante tres meses en 1976 de la Policía provincial, Rubén Arturo Ortega; los ex integrantes de la Compañía «A» del RIM 22 Eduardo Daniel Vic y Juan Francisco Del Torchio; el integrante de la Compañía «Comando» Horacio Jorge Páez; de la Compañía «Servicio» Walter Amadeo Mello; de la Compañía «Arsenal» Eduardo Daniel Cardozo; el ex teniente Juan Carlos Mendez Casariego, el ex subteniente Elías Lucio Arancio; el ex suboficial Pedro Eduardo Blanco; y el ex sargento de la Banda de Música del RIM 22, Osvaldo Benito Martel.
La Dirección de Mujer de la provincia de San Juan ha tomado conocimiento del caso y acompaña a la mujer para realizar las pertinentes denuncias, luego de que debiera, incluso, cambiar la cerradura de la puerta principal de su departamento a pocos metros de la residencia del represor.
*Por El cimbronazo / Imagen de portada: La tinta.
