Provincia sigue en deuda con las organizaciones sociales
Desde que comenzó el aislamiento social, preventivo y obligatorio, el Ministerio de Desarrollo Social de la provincia de Córdoba, a cargo de Juan Carlos Massei, posee una deuda con las organizaciones sociales. En algunos casos, alcanza dos meses de retraso en las ayudas alimentarias que entrega regularmente a los comedores comunitarios de la provincia de Córdoba.
Por Encuentro de Organizaciones para La tinta
El ministerio cuenta, hace años, con un programa de asistencia a comedores comunitarios. Alrededor del día 20 de cada mes, hace entrega de una ayuda alimentaria para fortalecer el trabajo indispensable de más de 450 comedores comunitarios en toda la provincia que alimentan a más de 58.000 personas, fundamentalmente, niñas y ancianas. Al día de hoy, debe a algunas de las organizaciones sociales las ayudas alimentarias del mes de marzo y a todas, las del mes de abril.
“Al principio, la respuesta del ministerio era que estaban enfrentando dificultades operativas a causa de la cuarentena, algo que, aunque nos molestara, nos parecía entendible. Un mes después, ya sin respuestas del ministerio, creemos que es pura negligencia o falta de voluntad”, explica el Secretario Adjunto de la CTEP-Córdoba, Iván Fernández.
“En un contexto de emergencia social agravada por la pandemia como en el que estamos, este tipo de errores cuestan el doble. El Ministro Juan Carlos Massei debe resolver esta situación con urgencia. Y, en un mismo movimiento, atender la situación en el interior profundo de la provincia que, muchas veces, queda relegado de estos programas”, agrega Fernández.
A esta deuda del Ministerio de Desarrollo Social de la provincia de Córdoba con las organizaciones sociales, se suma la cancelación arbitraria de Tarjetas Sociales de la última semana, la suspensión del pago por tres meses a más de 27.000 beneficiarias y beneficiarios de programas de empleo del Ministerio de Promoción del Empleo y la Economía Familiar, y una deuda millonaria en concepto de remuneraciones con más de 500 trabajadoras textiles que cosieron mochilas y cartucheras para el Ministerio de Educación, quien las entregó a los niños y niñas más humildes de Córdoba al comienzo de clases.
La pandemia del coronavirus ha supuesto una amenaza que modificó las prioridades en una gran parte del mundo, poniendo, en el centro, la sostenibilidad de la vida. Bien podría el gobierno de la provincia de Córdoba tomar nota de la gravedad de las circunstancias y actuar en consecuencia.
*Por Encuentro de Organizaciones para La tinta. Foto: Colectivo Manifiesto.