Abuso policial: entrevista a Coordinadora Antirrepresiva Alta Gracia
Durante la primera semana de abril, circuló por las redes sociales un video que daba cuenta de otra situación de abuso policial, esta vez, en la ciudad de Alta Gracia. Desde La tinta, entrevistamos a les integrantes de la Coordinadora Antirrepresiva Alta Gracia (COANAG). Les preguntamos sobre el accionar de las fuerzas de (in)seguridad en aquella zona.
Por Redacción La tinta
“Nunca rati
Nunca azul ni vigilante
Nunca cobani botón
Nunca bota
Nunca un corazón ortiva
Nunca milico opresor
Nunca facho, nunca macho ni bigote
Nunca cana ni buchón
Nunca yuta, nunca policía
Nunca un represor”
(Tranki Punki)
No es un policía, es toda la institución
Las Fuerzas de Seguridad de la Provincia de Córdoba tienen una matriz represiva que es clasista, racial y patriarcal. Desde hace años, el abuso policial y los asesinatos por parte del Estado en las calles, comisarías y cárceles son denunciados por organizaciones sociales. La criminalización de la pobreza recae sobre les pibes de los barrios con la verdugueada policial a diario. Mujeres y disidencias sexuales padecen la falta de perspectiva de género en la policía y en trabajadores penitenciarios.
Resistimos con conciencia histórica exigiendo Memoria, Verdad y Justicia por los crímenes de lesa humanidad de la última dictadura cívico-militar. Alojamos la represión en las calles y las torturas en los cuerpos; el miedo de la persecución política; las ausencias de las personas desaparecidas y asesinadas en dictadura y en democracia. La Coordinadora Contra la Represión Policial e Institucional (CORREPI), desde 1996, viene construyendo el Archivo de Casos, el cual contiene más de 6.000 nombres y apellidos de las personas asesinadas por el Estado Argentino desde la vuelta a la democracia. Estas ausencias se vuelven presencias que, desde lo más profundo y capilar de las experiencias, son válidas razones para dudar del accionar de todas las Fuerzas de Seguridad. No hay policías buenos ni malos, hay una estructura represiva que tiene prácticas intactas de persecución, violencias y muerte.
Abuso policial en Alta Gracia
Desde La tinta, nos comunicamos con integrantes de la Coordinadora Antirrepresiva Alta Gracia (COANAG). Nos contaron que la zona del Valle de Paravachasca cuenta con un historial de accionar represivo sobre les vecines que no es muy diferente al que podemos observar en otras regiones.
En este momento de la pandemia por el Coronavirus, Alta Gracia fue declarado por el Ministerio de Salud de la Nación como zona de circulación local, si bien integrantes de la COANAG observan mayor arbitrariedad en las detenciones y mayor presencia, agregan que el armado de causas, el hostigamiento y las amenazas por parte de la policía no varía de lo ocurre en otros momentos. Ante lo cual, reflexionan: “Esta vez, sí tienen un aval, para nada discreto, de algunos sectores de la sociedad; peligroso si se llega a naturalizar tanto el fuerte control o la buchoneada del vecine”.
Ojo, vigilante
Desde la Coordinadora, explican que las opiniones de les vecines sobre la actuación de la policía en tiempos de cuarentena son diversas: “Hay muchos a quienes les parece que `la mano dura´ viene bien para `que la gente entienda´ la situación en que nos encontramos. Muchas otras aseguran que se les está pasando la mano en varias ocasiones”. Como el hecho reciente que quedó registrado por un video filmado por la misma familia que sufre el atropellamiento policial en el interior de su propia vivienda.
Además, agregan que también están recibiendo “quejas de que la policía no está usando ni guantes ni barbijos. Registramos violencias físicas y verbales, desde amenazas a insultos hasta llegar a los golpes”. Creen que “por supuesto, la policía ha aprovechado esta situación tan desfavorecedora para la clase trabajadora para seguir reprimiendo a quienes ya tenían entre ojos y detener a les pibes que ya tienen ´marcados´”. A quienes “venían persiguiendo y verdugueando”, son los casos de abuso registrados durante este tiempo excepcional. “Por lo cual, notamos que el eje represivo no ha cambiado, sino que se ha ampliado, puesto que mucha gente que está siendo demorada o detenida nos cuentan también del maltrato que tienen los policías hacia ella”, concluyen.
Indignación que se organiza
Quienes integran la COANAG cuentan que “la bronca y la impotencia ante las reiteradas faltas de respeto, golpes, insultos y amenazas a los jóvenes por parte de la policía local” impulsó a organizarse en una Coordinadora Antirrepresiva. También fue “a partir de la detención de un joven que terminó en el hospital, tras una fuerte golpiza por parte de la policía. Ante este hecho que tuvo una gran relevancia en la ciudad, varias organizaciones y personas independientes de la zona empezaron a juntarse para repensar lo sucedido en conjunto con la familia del pibe, víctima de la golpiza”. Así, la Coordinadora comenzó a funcionar a principios del año 2020 con el objetivo de denunciar y acompañar los casos de represión dentro de la región. En la COANAG, se juntan “diferentes organizaciones sociales, abogados, grupos artísticos/culturales, medios periodísticos, madres e hijos víctimas del abuso policial, y gente interesada en apoyar y participar en la visibilización del abuso policial”, cuenta un integrante de la Coordinadora.
Es importante denunciar todas las situaciones de abuso policial. Desde la Coordinadora, registran amenazas, insultos y golpes a quienes pierden su libertad, ya sea por detenciones arbitrarias o no, confirman que “el trato por parte de la policía es tortuoso, denigrante y antihumano”. Ante ello, intentan, dependiendo de los casos, contener a las víctimas y a la familia; visibilizar los hechos por redes sociales y juntar la información debida para realizar una denuncia.
“Esperamos, una vez terminada la cuarentena, poder concentrarnos y/o movilizarnos para visibilizar el funcionamiento del aparato represivo del Estado. La emergencia sanitaria nos ha frenado la actividad en la calle, pero, por redes, seguimos estando presente y tratamos de comunicarnos con aquellas personas que quieran denunciar”, contaron integrantes de la COANAG.
La Ley provincial de Seguridad Pública de Córdoba sostiene en uno de sus objetivos el fortalecimiento democrático del sistema de seguridad provincial. Sin embargo, gran parte de la sociedad tiene -tenemos- algún recuerdo vivo del maltrato y abuso policial. En tiempo de aislamiento social: ¿Quién controla el actuar de la policía?
Recomendaciones en cuarentena
Por último, desde la Coordinadora en entrevista, recomendaron: Evitar enfrentamientos con la policía, mostrar documentación y permanecer en calma. Les pibes con antecedentes de hostigamiento o que “ya están marcados” por la policía no salgan a hacer los mandados. Por último, alientan a no perder la esperanza y solidaridad: “Por suerte, hay vecines que están dispuestos a dar una mano”.
*Por redacción La tinta.