Gendarmería con la Vaca atada
Custodian Vaca Muerta, la segunda reserva de gas del mundo. Organizaciones dicen que es una militarización. Empresas globales disputan los recursos. En Neuquén, está el 80% de la superficie de este yacimiento estratégico.
Por El Megáfono
El gobierno nacional envió a Gendarmería para custodiar Vaca Muerta. Fue el martes pasado por medio de la resolución 768 firmada por la Ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. En el documento publicado en el Boletín Oficial, el gobierno argumenta que se trata «de un activo de vital importancia para la estrategia de crecimiento energético y económico del Estado Nacional».
El yacimiento Vaca Muerta se extiende por 30.000 kilómetros cuadrados y abarca las provincias de La Pampa, Mendoza, Río Negro y Neuquén (provincia que posee el 80%), y es la segunda reserva más grande de gas en el mundo y la cuarta de petróleo no convencional. Según la EIA (Administración de Información Energética de EE.UU.), en gas, solo es superado por México y, en petróleo, solo están arriba Rusia, Emiratos Arabes Unidos y Libia. Por eso, esta región pasa a ocupar un lugar muy importante para la geografía mundial. Más si se tiene en cuenta que, camino a la cordillera en la localidad Bajada del Agrio, China, tiene un predio de 200 hectáreas donde instaló una estación espacial (CLCT). Estados Unidos (EE.UU.) proyecta una base de «ayuda humanitaria» impulsada por el Comando Sur en la capital de Neuquén, próximo al Aeropuerto internacional J. D. Perón y a metros de la Ruta del Petróleo.
La decisión del gobierno argentino fue tomada al día siguiente del ataque a una refinería de Arabia Saudita que disparó el precio del petróleo en todo el mundo. Pero hay otros conflictos dentro del propio yacimiento, como la suspensión de 1.000 operarios de Vaca Muerta que denunció el Sindicato General de Petróleo y Gas Pivado de Neuquén.
Además, el domingo, se produjo un incendio en un pozo petrolero que YPF no podía apagar y se esperaba la intervención de especialistas de EE.UU. o un avión ruso para controlar el mismo.
Intromisión
Distintas organizaciones rechazaron el decreto del gobierno. El secretario general del Sindicato General de Petróleo y Gas Pivado de Neuquén, y también senador nacional, Guillermo Pereyra, expresó que “se trata de una intromisión injustificada e inconsulta, y sin fundamentos en la realidad». Además, manifestó que «es inconcebible que se autorice a una fuerza de seguridad a actuar como si estuviéramos en estado de conmoción interna, cuando la realidad demuestra que Neuquén tiene una fuerza de seguridad propia, capaz de controlar su territorio».
Luis Castillo, integrante de la multisectorial No a la base Yanki en Neuquén, manifestó que «están militarizando el territorio: la ciudad está llena de gendarmes y hay presencia norteamericana con camionetas Hummer a las que no podemos ni acercanos, estamos a la deriva».
En tanto Jorge Nahuel, vocero de la Confederación Mapuche, repudió la resolución: es «un gobierno que se está yendo y que no tiene autoridad, aunque tiene muchos intereses de todo su entorno en el negociado de Vaca Muerta”.
¿Defender el Estado?
A fin de julio del año pasado, el gobierno modificó, vía los decretos 683 y 703, el rol de las fuerzas de Seguridad y las directivas en Defensa. Así, dio lugar a que las Fuerzas Armadas cumplan un rol en seguridad interna. De esta manera, el Ejército Argentino fue a cumplir tareas a la frontera norte bajo la nueva hipótesis de «terrorismo», mientras que Gendarmería pasó a cumplir tareas en el propio territorio interno y no en las fronteras.
Si bien los argumentos de la resolución del martes pasado del Ministerio de Seguridad hacen hincapié en defender los activos del Estado, es difícil dilucidar el componente nacional o extranjero de las empresas que operan en Vaca Muerta.
En Neuquén, operan 44 empresas en 27.000 kilómetros cuadrados concesionados y solo diez de ellas tienen la concesión del 70% de la superficie. De estas empresas, cuatro son extranjeras como Total, Exxon, Shell y Vista Oil and Gas (la firma de Miguel Galuccio). Otras compañías foráneas, como Statoil y Petronas, tienen asociaciones y participaciones en desarrollos junto a operadoras locales.
Dueños de la explotación
YPF tiene en marcha proyectos en 1.454 kilómetros cuadrados, lo que representa el 23% de la superficie en actividad. Es la principal productora y cuenta con un bloque como El Orejano, de apenas 45 kilómetros cuadrados, que produce casi el 10% del total de gas de la provincia. PAE, Total, Exxon y Shell completan el ranking de empresas con más desarrollo en km². Tecpetrol, la petrolera de Paolo Rocca (Techint), desarrolla un megaproyecto de gas en Fortín de Piedra y la sigue de cerca Capex y Pampa Energía. El 51% de las acciones de YPF están en manos del Estado Nacional y el resto está en las bolsas de Buenos Aires y New York. Entre sus principales accionistas, figuran el fondo BlackRock y el millonario mexicano Carlos Slim (Claro). La «Neuquina» FyP es la segunda explotadora de la zona y tiene como socios a Shell, Exxon, Tecpetrol, Pampa Energía y PAE.
*Por El Megáfono