¿Qué tener en cuenta a la hora de comprar una computadora?
Por Domus Informática para La tinta
Elegir y comprar una computadora que se adapte realmente a lo que necesitamos es cada vez más un desafío, en gran parte por la cantidad de modelos y marcas que existen en el mercado, pero sobre todo, por los tipos de computadoras que están a nuestra disposición, bien diferentes unas de otras.
Al contrario de las PC, donde se puede comprar las piezas y después armar la computadora, una notebook viene cerrada y con una configuración definida por el fabricante, es decir que no vamos a poder hacer prácticamente ningún tipo de mejora para adaptarla a nuestros requerimientos en caso de habernos equivocado en la compra.
En este variopinto escenario, la elección de una computadora que se ajuste perfectamente a lo que necesitamos implica que tengamos en cuenta las características que ofrece cada una de ellas y el modo en que la usaremos, es decir si cumplirá su función siempre en el mismo lugar, si necesitamos que se mueva, si nos dedicamos al diseño o sólo la usaremos para tareas de oficina, el tipo y tamaño de pantalla y muchos otros aspectos.
En fin, nos espera una larga tarea.
Notebook Vs. PC de escritorio
Si necesitamos contar con la portabilidad y la posibilidad de tener nuestra herramienta de trabajo o estudio cerca, sin dudas hay que comprar una notebook. Ahora, si necesitamos procesar gran cantidad de datos, diseñar piezas gráficas o editar fotos y video, invertir en un equipo portátil va a ser más costoso y seguramente no logrará el mismo rendimiento que una máquina de escritorio.
Microprocesador
Para seleccionar un Procesador, hay que pensar, como en todos los otros aspectos, qué uso se le dará a la computadora. Esto no se refiere a si se va a llevar a una montaña o a una playa, se trata de si se tendrán varios programas funcionando a la vez o si únicamente se utilizará para navegar o ver redes sociales, porque ambas actividades requieren de una velocidad diferente, puesto que el CPU es, básicamente, la central de operaciones. Si se busca tener una computadora que corra rápido, que no se cuelgue y realice tareas de forma efectiva y en poco tiempo, entonces hay que mirar las características de este componente con mucha atención.
Placa de Video
Actualmente los microprocesadores en su mayoría contienen un procesador de video integrado, el cual permite que podamos ver y reproducir imagen en nuestro equipo, lo importante es saber que para usos básicos, el procesador de video integrado será suficiente y nos permitirá trabajar y ver videos en alta resolución sin ningún inconveniente. Caso contrario será si necesitamos procesar video de forma más exhaustiva, es decir, hacer planos, editar fotos y videos, o jugar juegos en alta calidad, en este caso necesitaremos un procesador de video dedicado exclusivamente a estas tareas.
Memoria RAM
Entre más cantidad de RAM tenga nuestro equipo, mejor va a ser el rendimiento de respuesta general y mayor será la capacidad de ejecutar en tiempo real varias programas al mismo tiempo. Es decir, si queremos tener abierto el Word, quince pestañas de Chrome, reproducir desde Spotify o Youtube, será necesario tener a disposición una buena cantidad de memoria RAM, caso contrario nuestra máquina tenderá a congelarse.
Con esto en mente, debemos elegir siempre una computadora que tenga capacidad de memoria para correr cómodamente el software que utilizamos diariamente y que además nos permita que las sucesivas actualizaciones del sistema o de las aplicaciones que utilizamos no opaquen la performance.
Es importante que tenga, como mínimo, 4 Gb de memoria RAM. Sin embargo, lo ideal es tener 8 Gb o más de memoria para no afectar la performance en el caso que nos dediquemos al diseño, el video o la creación de contenidos multimedia podemos extendernos a 16 o 32GB.
Tipo y capacidad de disco duro
La memoria del equipo es el lugar donde se guardarán el sistema operativo, los programas y los documentos personales. La elección de un disco duro con gran capacidad sólo debe ser considerada en caso de necesidad, para poder evitar un aumento considerable en el costo del equipo.
Actualmente se comercializan principalmente dos tipos de unidades de almacenamiento, los tradicionales discos mecánicos y los nuevos Discos de Estado Sólido (SSD). La gran diferencia entre ambos es que mientras que los discos tradicionales nos permiten tener mucha capacidad almacenamiento y poca velocidad de rendimiento, los discos de estado sólido nos brindan mayor rendimiento pero menor capacidad de almacenamiento. Lo ideal es pensar en un equipo que pueda articular ambos discos, SSD para el sistema operativo y nuestros programas y un HD (disco tradicional) para nuestros documentos personales.
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