La Ley Clarín: otro paso hacia el control de la libertad de expresión
La Cámara de Diputados dio media sanción al proyecto del diputado Diego Bossio que desregula la producción y venta de papel prensa. La medida pasa ahora al Senado, pese al fuerte rechazo que concentra en diarios, periódicos y revistas regionales, recuperadas y cooperativas de todo el país. “El manejo es tan arbitrario que van a discriminar o disciplinar a los medios que tengan una línea distinta”, apuntan desde Tiempo Argentino. En Córdoba, donde cerraron 20 diarios en los últimos tres años, el diario cooperativo La Nueva Mañana sostiene: “Se allana el camino para la concentración y, especialmente, para que Clarín y La Nación decidan a quién le venden y a quién no”. En El Independiente de La Rioja alertan: “La desregulación va a disparar todos los precios y no va a haber barreras de referencia. Peligran muchos puestos de trabajo”. Tres análisis desde el periodismo sin patrón y la urgencia de cara al año electoral.
Por La vaca
La Cámara de Diputados aprobó el proyecto de ley que establece la desregulación de la producción y venta de papel prensa, presentado por el diputado del Bloque Justicialista, Diego Bossio, y apoyado por el oficialismo pese al amplio rechazo de medios gráficos de todo el país, de cooperativas a pymes. La norma deroga gran parte del articulado de la Ley 26.736 (2011) que declaraba “de interés público la fabricación, comercialización y distribución de pasta celulosa y de papel para diarios” y favorece la discrecionalidad en el manejo del precio y la cantidad de producción de la materia prima clave para la prensa gráfica.
El texto de la ley, que llegó al recinto en medio de un trámite exprés en la comisión de Comercio con las firmas del titular del bloque del PRO, Nicolás Massot, y del presidente del interbloque de Cambiemos, Mario Negri, retoma los reclamos de Papel Prensa y de algunos diarios agrupados en la Cooperativa de Provisión de la Prensa Argentina (Cooppal), que cuestionaban que la anterior normativa impedía “la libertad comercial, encarecía los insumos y obstaculizaba inversiones”. La norma también llegó a las sesiones extraordinarias llamadas por el presidente Mauricio Macri, con las firmas del jefe del interbloque del PJ Federal, Pablo Kosiner, y de los massistas Marco Lavagna y Alejandro Grandinetti, entre otros.
Sin embargo, diarios recuperados y cooperativos, junto a otros medios regionales de todo el país, cuestionan que la Ley derogó el artículo 20 y eliminó así la obligación de comercializar el papel para diario a un precio único y público de pago. “Es un atropello a la comunicación en general y a la democracia en particular, porque se está coartando el derecho a la libertad de expresión de todos los argentinos y las argentinas”, explica a lavaca Julio Delgado, del diario recuperado El Independiente de La Rioja. “Están desregulando una ley solamente para beneficiar a un grupo concentrado como Clarín y La Nación, accionistas mayoritarios de Papel Prensa”.
Lavaca habló con tres diarios sobre las amenazas del proyecto.
Un proyecto para la concentración
“El acceso a la información es un derecho, así como también lo es la posibilidad de informar. Y el Estado es responsable de garantizar su cumplimiento”. Así comienza el documento elaborado por una decena de medios cooperativos (lavaca entre ellos) que participaron en el Encuentro Nacional de Diarios Recuperados la semana pasada. Si bien en el encuentro se trazaron las proyecciones del sector, la comunicación que de alguna manera da inicio a la Red hace eje en el proyecto aprobado hoy en Diputados. “La provisión del papel ya era un problema con la ley vigente, porque el precio representaba para nosotros el mayor gasto de la cooperativa: el 55 por ciento de nuestros ingresos se van en la compra”, explica Federico Amigo, presidente de la cooperativa Por Más Tiempo. “Si con estas condiciones de supuesto resguardo ya era un problema, es difícil imaginar una situación superadora que mejore cuando la actual norma desguaza el marco regulatorio”.
Amigo subraya que el precio va a definir la existencia de un medio. “La lógica es: si no podés comprar, dejá de existir. El proyecto apunta en esa dirección. Lo que está en riesgo es la libertad de expresión, porque les transfieren un poder decisión sobre a qué medio podés vender y a cuál no”.
Apunta que el proyecto rememora a épocas pasadas. “El momento de control absoluto de Clarín y La Nación en Papel Prensa existió y ya sabemos cómo es. Ahora el manejo es tan arbitrario que van a discriminar o disciplinar a los medios que tengan una línea distinta. Supuestamente es una iniciativa que protege a los más débiles, pero nada dice de medios cooperativos, o que se manejen como pymes. Que quede claro: la Ley no apunta en esa dirección, sino en concentrar el poder en un espectro. ¿Cómo se traduce eso en términos concretos? En un medio que no está en la calle”.
Precios descuidados
Según Diarios y Periódicos Regionales Argentinos (DYPRA), en tres años cerraron 20 periódicos del interior de Córdoba. En una nota con La nueva mañana, periódico recuperado en la provincia, el director de La Jornada dijo que “la crisis a nivel nacional causada por las medidas que lleva adelante el gobierno de Mauricio Macri, provocó que los insumos necesarios para editar en formato papel (todos ellos atados a precio dólar) hayan registrado aumentos fulminantes”.
Luego de su última asamblea anual, la Asociación de Revistas Culturales e Independientes de Argentina (AReCIA) declaró al sector en emergencia por el impacto de la crisis económica en los medios que editan publicaciones impresas: las políticas del Gobierno y el impacto en la estructura de costos de las ediciones impidieron la salida en papel de un 15 por ciento de los títulos.
La periodista Consuelo Cabral, de La Nueva Mañana, también sostiene que el sector está en alerta. “El proyecto atenta contra la libertad de expresión y no es casual que surja en este momento: corresponde a un interés del Gobierno nacional en acallar voces desde un sector hegemónico. En Córdoba hay muchos medios recuperados con una gran demanda de papel: algunos que compran directamente a Papel Prensa tuvieron un incremento, de enero a hoy, de 300 mil a 976 mil pesos”.
Cabral no duda quiénes son los ganadores: “Se allana el camino para la concentración y, especialmente, para que dos empresas decidan a quién le vende y a quién no”.
En camino hacia el unicato
En El Independiente, en La Rioja, el presidente de la cooperativa, Julio Delgado, dice que sumado toda la cadena de producción y comercialización del diario hay 400 trabajadores y trabajadoras vinculadas de forma directa e indirecta al periodismo sin patrón.
—¿Qué expresa este proyecto?
—Están negociando algunos articulados, incorporando escritos que ofrecen un arancel 0 para la importación del papel, pero es una medida que también va a beneficiar a las grandes empresas porque van a dolarizar el mercado. Todos vamos a quedar rehenes de importar o de inscribirse para traer papel del exterior. Hay que pensar que la devaluación del peso ya genera muchísimas dificultades a la industria gráfica en general. Creemos que es una situación mucho más compleja que la desregulación del papel: es coartar el derecho a la libertad de expresión de todos, pero en cierta forma el de muchos comunicadores sociales y comunidades. Se prohíbe el acceso pleno a igualdad de condiciones a la información. Se está conformando un unicato, un discurso único en los monopolios de Capital Federal, y creo que se va a profundizar en un año político. Esto nos va a generar muchísimas dificultades para ejercer un periodismo independiente.
—¿Por qué?
—Pensemos que, de por sí, el precio del papel se ha incrementado por encima de la evolución del dólar. Casi un 120 por ciento solo en lo que va del año. También hay que decir que ya se ejercía una desregulación porque Papel Prensa se negaba a venderte papel o lo hacía en los plazos que ellos estipulaban. Pero también hay algo muy importante detrás, y que no se tiene en cuenta: la fabricación del papel a nivel nacional regulaba, de cierta forma, el precio de los insumos ligados a esta producción, porque los diarios usamos papel para diario, pero la papelera en general estaba teniendo como parámetro lo que evolucionaba este papel.
—¿Cuál es el panorama entonces?
—La desregulación va a disparar todos los precios y no va a haber barreras de referencia: cualquier vendedor va a poder vender a cualquier precio. Afecta a los diarios pero también a la industria gráfica, al trabajo de comunicadores sociales, a los canillitas y a las publicaciones que se generan en universidades, centros vecinales, sindicatos, iglesias, que canalizan su comunicación interna o pública pero lo hacen en plataformas gráficas. Esto se va a ver amenazado y coartado, sumado a la posibilidad de que muchos compañeros quedemos sin trabajo. Y, sobre todo, en muchas localidades del interior, donde más cuesta trabajar, en la imposibilidad de acceder a una comunicación veraz.
*Por La vaca