Vecinos de Paravachasca en alerta por fumigaciones a menos de 100 metros
Ante una nueva e inminente época de siembra en los campos que rodean la localidad de Dique Chico, la Asamblea de Vecinxs exige a la Comuna que garantice la salud de sus habitantes, suspenda las fumigaciones con agrotóxicos y fomente la producción agroecológica.
Por Redacción La tinta
Desde mediados del año pasado, los vecinos autoconvocados de la localidad de Dique Chico (comuna ubicada a 14 kilómetros de Alta Gracia, sobre la Ruta Provincial Nº 5) se organizan para frenar las fumigaciones con agrotóxicos en los campos que rodean al pueblo.
Más de 100 vecinos y vecinas -el 50% del padrón electoral- firmaron un petitorio para exigir al jefe comunal Nilo Pérez que prohíba de una vez por todas los agroquímicos en el ejido y que brinde ayuda a los productores para que cultiven de manera «ecológica y responsable”.
«Es necesario que la Comuna determine distancias mínimas acordes a este tipo de prácticas, resguardando la integridad y los derechos de sus habitantes», remarcan lxs vecinxs organizadxs a partir de un comunicado de prensa.
Hoy nuevamente los tractores están iniciando los trabajos de siembra en los campos que rodean a Dique Chico y desde la Comuna comunicaron que hay presentadas, desde la semana pasada, recetas fitosanitarias para volver a fumigar en estos días. «Esto quiere decir que próximamente tendremos nuevamente a las máquinas trabajando frente a nuestras casas, así como también alrededor de la escuela a donde asisten nuestros hijos e hijas», lamentaron los vecinos.
Las pruebas de la fumigaciones existen en esta localidad desde que los propietarios de los campos implementan estas prácticas, ya que nunca los sucesivos jefes comunales han controlado, regulado o prohibido las fumigaciones. Incluso recientemente, un grupo de vecinos halló a 150 metros de la escuela de la Comuna un campo con bidones de agrotóxicos tirados en el piso, sin el tratamiento correspondiente obligatorio para dichos materiales y faltando a toda «buena práctica agrícola»
«No queremos ni una fumigación más. Lo hemos dicho y lo volveremos a decir las veces que sean necesarias. Entendemos que es una responsabilidad ineludible de esta Comuna bregar por los derechos fundamentales de las personas que habitan este pueblo y en ese sentido, exigimos que se dé un freno a la fumigación hasta tanto se resuelvan formalmente las cuestiones vinculadas al ejido comunal», expusieron los habitantes organizados, remarcando que solicitan que se garanticen canales de información claros entre las autoridades y la comunidad.
* Por Redacción La tinta / Imagen: Pablo Piovano