San Juan: restitución de restos de la comunidad Warpe
La comunidad originaria de Cuyún se hizo presente en la Sesión del Consejo Superior de la Universidad Nacional de San Juan para debatir y exigir la restitución de cuerpos de integrantes de la comunidad y el respeto los lugares sagrados que fueron profanados. Una demanda que atraviesa el país y que demuestra la brutalidad de la conquista.
Por Red Nacional de Medios Alternativos
El Consejo Superior de la UNSJ dio tratamiento a pedidos solicitados por las comunidades originarias desde el 2011 que ahora se sumaban pedidos del Defensor del Pueblo y el INAI (Instituto Nacional de Asuntos Indígenas). El desarrollo comenzó con las presentaciones de la líder espiritual Argentina Quiroga, de Nadia Gómez (representante Warpe ante el INAI) y de Carina Jofre (Investigadora del CONICET).
Sobretodo Gómez y Jofre realizaron un recorrido de las idas y vueltas de los expedientes y la aplicación de la normativa nacional y su procedimiento. También dieron antecedentes de restitución de algunos cuerpos indígenas planteando que no es solo la devolución sino también el cómo realizarlo abriendo el debate más allá de la institución educativa. Dejaron en claro la apertura de diálogo y criticaron los procedimientos de trabajo del museo ubicado en Rawson respondiendo a los dichos de las autoridades de esa área de investigación ante anteriores pedidos.
El programa Enredando Las Mañanas dialogó con Nadia Gómez, quien remarcó que la exigencia de la restitución de restos fue iniciada por la comunidad mucho antes de la existencia de la Ley de Restituciones de Restos. «Nuestros ancestros y nuestros abuelos comenzaron a luchar acá desde el año 1964 cuando se creó el museo Domingo Faustino Sarmiento para la exhibición de los cuerpos que fueron retirados de su lugar de enterramiento original, formando así una colección exhibida de dieciséis cuerpos”.
A partir de la sanción de la Ley de Restitución, se abrió un panorama alentador para los pueblos originarios. Sin embargo, los warpes han tenido que continuar batallando y peleando para hacer efectiva esta ley.
“Nosotros presentamos reiteradas veces, notas directamente al Museo, nunca a la Universidad. En su momento, la respuesta que recibimos de ellos fue mediática, desestimando nuestra filiación genética con los cuerpos, desestimando nuestra autenticidad como representantes del pueblo Warpe. A partir de esto, es que se dio una gran discusión en el Consejo Superior: el por qué la ciencia aún sigue negando nuestra identidad, nuestra autodeterminación como pueblo. La Universidad sigue sosteniendo en la actualidad esos mismos discursos”, aclaró Nadia.
Ante la consulta respecto a si las comunidades también reclaman ser parte de estos espacios de debate en la Universidad y una participación activa en los Órganos de Consulta de la Universidad, Gómez respondió: “Nosotros presentamos en 2011 un petitorio. Comenzamos un expediente, primero para que se aplique la Ley en las universidades, que son entes autónomos y autárquicos, y se rigen por las leyes nacionales. De ahí que nuestro pedido lo fundamentamos en que la Universidad, al ser un ente nacional, debe regirse por la ley 25.517”. Entre tanto, aclaró, la realidad a nivel provincial es diferente, “ya que por su forma, las leyes provinciales ponen los restos humanos como cosas, como propiedad de las provincias, y esa es una discusión que se nos viene ahora, ya que la Universidad tiene estos restos en carácter de ‘tenedoras’, y se instala la discusión de quién es el propietario de los cuerpos”.
Al respecto del proceder legal, Nadia comentó que “se conformaron dos Comisiones: una encargada de ver la aplicación de la ley nacional en el ámbito de la universidad. La ley tiene diversos puntos, como es el de realizar un exhaustivo inventario no sólo de los cuerpos, sino también de los ajuares y otros elementos, analizar las investigaciones que se vinieron haciendo, más allá de las que están publicadas. La otra comisión, que se forma con miembros de las comunidades dentro del Consejo Superior, se va encargar de revisar y tratar con las provincias las leyes de patrimonio provincial”.
“En ambas comisiones hay participación de las comunidades, que fue algo que pedimos los grupos que representan a los pueblos. También la universidad tiene programas de apoyo a las comunidades, en donde tenemos nuestra propia voz, nuestros profesionales y decimos que queremos participar directamente nosotros. Eso fue aceptado”.
Recientemente se nombró a Jimena Psathakis como presidenta del Instituto Nacional Indígena. Al respecto, Gómez indicó: “Yo pertenezco a la Mesa Nacional del Consejo de Participación Indígena. Y los pueblos indígenas nunca fuimos consultados, nunca fuimos informados. Nosotros como Mesa Nacional, no hemos recibido una comunicación oficial de este cambio de autoridades. Venimos reclamando desde febrero de este año, que se realice una Mesa Nacional de participación indígena. Se reciben muchas críticas de algunos representantes, pero sabemos que es la única instancia de participación, donde las comunidades eligen a sus representantes, y es la instancia donde las comunidades deben discutir las políticas con el Estado Nacional. Por lo que vemos, y lo que está pasando en los territorios, es muy difícil que esto pueda llegar a cambiar o mejorar la relación con los pueblos originarios”.
Finalmente, Nadia también dejó su reflexión explicando que “como pueblo, repudiamos lo que sucedió en la comunidad Lof en Resistencia Cushamen, y exigimos la aparición de Santiago Maldonado, porque nos parece que en un Estado de Derecho no pueden seguir sucediendo estas cosas”. Y continuó afirmando que “los comentarios de la Ministra de Seguridad sobre el pueblo Mapuche, me resultaron muy graves. Reproduce esta mentalidad colonial. Ya es bastante grave que estemos viviendo esta situación, y que la sociedad no reaccione de alguna manera. Hay una persona desaparecida, que fue llevada por Gendarmería, esto es grave”.