Libertad para Dayana
Comenzó una campaña para exigir la libertad de Dayana. Presa por un delito que no cometió y víctima del Poder Judicial machista de Córdoba.
Ayer por la tarde se llevó a cabo una radio abierta acompañada de una volanteada e intervención artística para pedir que liberen a Dayana Gorosito.
La actividad impulsada por la Mesa de Trabajo Libertad para Dayana busca denunciar la situación que está atravesando la joven de tan solo 20 años, presa en Bouwer desde hace más de cinco meses -sin poder ver a su hijo- acusada de la muerte de su beba recién nacida.
Recordemos que en las primeras horas del 19 de mayo de este año, Dayana fue obligada por su pareja Luis Oroná, a parir en un descampado de la localidad de Unquillo -Córdoba-, a la intemperie, con frío y sin asistencia. Apenas nacida la beba, Oroná se la arrancó de los brazos y se la llevó.
El Estado, por medio de su brazo judicial, sigue victimizando a Dayana en lugar de buscar reparar las múltiples violencias de las que ha sido objeto.
Durante los días siguientes, sometió a la joven a un peregrinaje mediático para sostener una coartada, con la amenaza de que si no lo hacía no vería más a su hija. Una historia armada con testigos que después se comprobó, eran falsos, pagados por los propio Oroná. Sumado a eso, el cuerpo de la beba -que murió a las horas de nacer- fue hallado dos semanas después en la casa de ellos cuando ya habían hecho cinco allanamientos.
Mientras tanto, Dayana fue internada en el hospital Rawson con una infección severa dada las condiciones inhumanas en que fue obligada a dar a luz. Luego de haber sido incomunicada, intentó irse para ver a su hijo de tres años y a su beba, y fue nuevamente detenida.
“El Estado, por medio de su brazo judicial, sigue victimizando a Dayana en lugar de buscar reparar las múltiples violencias de las que ha sido objeto” explican desde la Mesa de Trabajo Libertad para Dayana.
Además, en el día de hoy se convoca a una concentración frente a la Cámara de Acusación de Tribunales II a partir de las 10hs, para acompañar la presentación formal de un nuevo pedido de libertad de sus abogados y abogadas.
En apenas unos días de lanzada esta Campaña, ya más de cien organizaciones, instituciones y referentes sociales, feministas y del movimiento de mujeres de todo el continente se sumaron a este reclamo, incluyendo personalidades como Nora Cortiñas y Mirta Baravalle de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, instituciones como la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de Córdoba y organizaciones como la Marcha Mundial de Mulheres de Brasil, la Red de Sanadoras de Guatemala, la Confluencia de Mujeres de Colombia, además de la Campaña Nacional contra las Violencias hacia las Mujeres y la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto.
Justicia machista
Acusarla de que sabía que Oroná iba a matar a su hija sin pruebas y de no tener instinto materno por no dejar la vida para protegerla, responde a una reproducción de estereotipos machistas que existen sobre la maternidad y a una revictimización constante de la víctima.
Acusarla de que sabía que Oroná iba a matar a su hija sin pruebas y de no tener instinto materno por no dejar la vida para protegerla, responde a una reproducción de estereotipos machistas que existen sobre la maternidad y a una revictimización de la víctima constante.
De hecho, Laura Vilches -legisladora por el PTS/Frente de Izquierda de Córdoba en la Unicameral- presentó en el día de ayer un pedido de declaración en la Legislatura por la libertad de Dayana, considerando que “es un fallo disciplinatorio, que condena a una mujer que ha sido víctima de violencia de género por no cumplir con los roles que se esperan de una mujer respecto a su hijo o hija, entonces estamos repudiando ese carácter machista también del fallo, y exigiendo su pronta liberación”.
Las organizaciones sociales agrupadas en la Mesa de trabajo Libertad para Dayana manifestaron que, tal como sucedió en el caso de Belén, la justicia machista impone estereotipos que las mujeres deben cumplir y que, al no hacerlo, son juzgadas a partir de ello en relación a sus “deberes” como madres y esposas. Como se ha comprobado en diversos casos, incluso el Poder Judicial ha sido reticente a utilizar la figura del femicidio en asesinatos cometidos hacia mujeres por el sólo hecho de serlo, negando no sólo al Código Penal sino a los diversos reconocimientos internacionales.
Ayudado por los medios de comunicación, el Poder Judicial hizo que el peso de la condena social caiga sobre la mujer en este caso, quién supuestamente no cumplió con su “deber materno” de protección de su hija, evitando hacer caer el peso de la prueba sobre el otro acusado y principal sospechoso del hecho, su ex pareja, porque claro está, él es un hombre, y de él no se espera ningún tipo de rol de cuidado por sobre sus hijos.
Hoy, exigimos libertad para Dayana, presa por un crimen que no cometió. Víctima de la justicia machista.
Todas somos Dayana.
