“La evaluación Aprender comete una injusticia con las escuelas más postergadas”
En vistas a la aplicación de la evaluación nacional “Aprender”, la legisladora provincial Carmen Nebreda (Córdoba Podemos) remarcó que “la calidad educativa se sostiene con presupuesto e inclusión social”.
Este martes se realiza por primera vez la Evaluación Nacional Aprender 2016, organizada por el Ministerio de Educación y Deportes de la Nación y que reemplaza al Operativo Nacional de Evaluación (ONE) que se realizaba desde 1993.
Según las autoridades educativas, el objetivo de evaluar a casi 1.400.000 alumnos es «relevar información oportuna y de calidad sobre los logros alcanzados y los desafíos pendientes del sistema educativo. Los resultados permitirán brindar orientaciones que contribuyan a la mejora continua de los aprendizajes y a una mayor equidad, y planificar políticas que optimicen la calidad educativa».
Consultada al respecto, la legisladora Carmen Nebreda recordó que al mes de septiembre, la ejecución del presupuesto educativo de Córdoba apenas alcanzó un 16%, perjudicando centralmente la aplicación de recursos para infraestructura y para los programas que permitían incluir a los sectores menos pudientes. “En Córdoba tenemos escuelas que según el Ministerio de Educación están ‘operativas’ pero que se encuentran en ‘emergencia’, con serios problemas edilicios y de funcionamiento”, explicó.
Frente a este escenario, señaló que el “Operativo evaluación nacional 2016 Aprender” constituye una acción homogeneizante, que desconoce la heterogeneidad del punto de partida de los alumnos y de las escuelas, cargando la responsabilidad de los fracasos en los docentes y no en las políticas aplicadas desde el Estado. “Generan un ranking de escuelas, en el que los establecimientos de las zonas más vulnerables siempre estarán en la base de la pirámide”, advirtió Nebreda y agregó: “La evaluación Aprender comete una injusticia con las escuelas más postergadas”.
“Podemos afirmar que estamos ante un proceso de privatización enmascarado”, afirmó la legisladora.
Según Nebreda, estas políticas de omisión y vaciamiento no se desarrollan solo en la provincia sino que responden al “cambio estructural” que propone el Gobierno Nacional y que ya aplicó en la CABA. Allí se redujo 45% el presupuesto de las escuelas públicas y se duplicó el de la enseñanza privada, lo que se tradujo en más de 300 mil alumnos excluidos de las escuelas públicas por falta de oferta.
Así, el gobierno nacional concreta la reducción del presupuesto educativo – que paso del 6 al 3,5 % del presupuesto total- cerrando programas clave como Progresar, Conectar Igualdad, Libros para todos, y eliminando la producción contenidos para Canal Encuentro, que elevaban notablemente la propuesta pedagógica de los argentinos.
Mientras tanto, el Ejecutivo avanza por primera vez en la convocatoria a paritarias a los gremios representantes de los docentes del sector privado, dejando a los públicos fuera de juego. “Podemos afirmar que estamos ante un proceso de privatización enmascarado”, afirmó la legisladora.
Nebreda analizó además que estas reformas neoliberales “son la receta para la región”. En Brasil, por ejemplo, el gobierno de Michel Temer dispuso el congelamiento del gasto público por 20 años, recayendo el ajuste especialmente en educación y salud.
“No debería extrañarnos entonces que la estrategia sea la de vaciar y descalificar a la escuela pública, que para estos gobiernos representa un ‘costo’ y una amenaza en tanto eleva la valoración de la mano de obra local”, reflexionó la legisladora.
“La evaluación nacional Aprender consiste en un examen estandarizado ‘multiple choice’, que no reconoce el proceso de enseñanza-aprendizaje en el aula y cuyas conclusiones se alejan de las realidades sociales de los estudiantes. Desde una perspectiva tecnocrática, este examen –que se concentra estrictamente en los resultados- alimenta el desprestigio de la escuela pública y justifica las políticas de ajuste en educación, reforzando así las diferencias entre sectores sociales”, concluyó Nebreda.