Se cumplen 50 años de la muerte de José Sabino Navarro en las sierras de Córdoba, uno de los fundadores de la organización guerrillera Montoneros. Por Alexis Oliva.
Un minuto antes, el presidente del Tribunal Oral Federal 4 (TOF4) de San Martín terminaba de beber el último trago de la bebida cola que lo acompañó en la mayoría de las 78 audiencias que se realizaron desde el 9 de abril de 2019, con más de 200 testigos aportando evidencia sobre el accionar genocida del aparato de inteligencia de la dictadura cívico-militar contra aquella política de la organización del Peronismo Revolucionario. Por Carlos A. Villalba
Cinco perpetuas para cinco asesinos ha sido el resultado de un juicio histórico ejemplar que concluyó ayer en Buenos Aires. De esta manera, se hace justicia enviando a la cárcel común de por vida a quienes, obedeciendo a un plan sistemático de exterminio que planteó la última dictadura militar, secuestraron, torturaron y finalmente asesinaron a quienes, desde la Organización Montoneros, optaron por la lucha armada en el marco de la Contraofensiva Montonera.
“Costó mucho leer el plan de exterminio desde el lugar en que fue concebido, que es la Inteligencia”, asegura la fiscal Gabriela Sosti en esta entrevista. Y se adentra en el juicio Contraofensiva, que juzga exclusivamente a militares de esa estructura. “Estamos hablando de tipos de escritorio muy bien formados, jerárquicos, y que fueron los responsables de definir a quiénes secuestrar y la ‘disposición final’ de los detenidos”. Por Valeria Parente
En la madrugada del 22 de agosto de 1972, la Marina de Guerra fusiló a 19 prisioneras y prisioneros políticos en la base naval Almirante Zar de Trelew. Eran militantes del Partido Revolucionario de los Trabajadores-Ejército Revolucionario del Pueblo, Fuerzas Armadas Revolucionarias y Montoneros. Por Abel Bohoslavsky
Pablo Verna, integrante del colectivo Historias Desobedientes, realizó una histórica declaración testimonial en el juicio por la represión a la Contraofensiva de Montoneros. Ante los jueces, relató lo que le confesó su progenitor, Julio Alejandro Verna: que participó de los vuelos de la muerte de Campo de Mayo, inyectando a las víctimas para adormecerlas antes de ser arrojadas al mar o al río. Por Fernando Tebele