Memoria, verdad y justicia: reflexionar en casa en tiempos de cuarentena
En el marco del 44° aniversario del golpe de Estado militar, cívico y eclesiástico, los Sitios de la Memoria de Córdoba nos invitan a hacer memoria desde nuestras casas y en familia. Conversamos con Jésica Rosencovich del Espacio Campo de la Ribera, quien nos cuenta la propuesta pedagógica y didáctica creada para este tiempo de excepción que estamos viviendo.
Por Redacción La tinta
“Algunas personas piensan que de las cosas malas y tristes es mejor olvidarse.
Otras personas creemos que recordar es bueno; que hay cosas malas y tristes que no van a volver a suceder precisamente por eso, porque nos acordamos de ellas,
porque no las echamos fuera de nuestra memoria”.
Graciela Montes. El golpe y los chicos
Cada 24 de marzo, llenamos las calles, nos encontramos para abrazar la memoria del pasado reciente que aún nos duele. Las madres y las abuelas nos enseñaron a resignificar ese dolor en una lucha incansable por memoria, verdad y justicia. Este año, fue diferente, los pañuelos blancos como faro en cada balcón, terraza, puerta, ventana, ahora que estamos en las casas. En esta excepción, no olvidamos y reinventamos otras formas de recordar.
Los Espacios de Memoria de Córdoba, en un trabajo colectivo y articulado, han realizado diversas propuestas pedagógicas y artísticas, en un ejercicio de seguir construyendo las políticas públicas de Memoria, Verdad y Justicia. Hasta que nos volvamos a abrazar físicamente y volvamos a recorrer los sitios de memoria.
La tinta conversó con Jésica Rosencovich, que trabaja en el espacio Campo de la Ribera y nos cuenta cómo surge esta propuesta de materiales virtuales, de los cuales ya llevan 10 entregas. “Desde el momento que nos enteramos que no íbamos a poder hacer actividades en los sitios ni marchar, pensamos en hacer un aporte a la sociedad toda con herramientas pedagógicas. En estas fechas, a nosotres nos llegan miles de preguntas de les docentes; desde qué pueden trabajar para el 24 hasta ir a realizar los encuentros de memoria y recorridos a los tres sitios. Es el mes de trabajo más fuerte, que se extiende durante todo abril generalmente, ya que, desde muchas escuelas, asisten con estudiantes a los sitios. Cada uno de los equipos de trabajo de pedagogía ya venía pensando en qué hacer para este año y, ante la medida sanitaria, decidimos juntarnos los tres sitios y salir con estas entregas”.
Es importante contarles a quiénes están dirigidos estos materiales, porque aquí radica un ejercicio de memoria que trasciende lo escolar, nos explica Jésica que “son herramientas no solo para docentes, sino para todos aquellos espacios educativos, como los de organizaciones sociales. Pero, sobre todo, la intención de estas entregas tiene que ver con pensar que las familias están en sus casas y pueden servir como herramientas para reflexionar, para darnos un tiempo con mamá, papá, abuelo, tío, tía que esté con les niñes o les jóvenes, y puedan, a partir de estos vídeos, textos y de estas actividades que proponemos, trabajar la memoria en casa”.
Los equipos están trabajando online y seguirán compartiendo materiales en las próximas semanas, en las redes de cada uno de los sitios. “Es un material construido con mucho amor y pensado según lo que nosotres vemos en estos más de 10 años y de experiencia sobre cómo trabajar con los grupos en los sitios, desde ese mismo lugar del trayecto que tenemos, lo pensamos en clave de trabajo en las casas con la familia. También pensamos que tenga un impacto para les adultes que están al lado de les chiques”, dice Jésica.
En cada entrega que se realiza, se explicita si es para edades en inicial, primaria o secundaria, cada uno de los materiales están focalizados y pensados desde los lineamientos curriculares construidos para trabajar la memoria a lo largo de todo los niveles educativos. Por ejemplo, en la entrega de Periplos de la memoria, van a encontrar materiales, recursos y propuestas para abordar temáticas vinculadas con los procesos de Memoria, Verdad y Justicia. Es una propuesta interactiva que tiene diversos recorridos con textos, reseñas de libros, imágenes, películas, entre otros materiales, a partir de los siguientes ejes: 1) Dictadura cívico -militar 2) Memoria, Verdad y Justicia 3) Democracia y participación. A su vez, cada recorrido plantea paradas con materiales específicos: Aportes para la reflexión, Lenguajes del arte, Documentos, Materiales pedagógicos.
También encontrarán actividades para les más chiquites, “links para trabajar desde los dos ejes que propuesta para esta edad: identidad y libros prohibidos. Además de los cuentos que fueron prohibidos en dictadura, proponemos actividades para jugar y reflexionar. Compartimos cómo hacer flores rojas, que son un sello identitario de Córdoba. Contamos la historia de cómo nace la idea de la flor roja, desde el primer momento, tuvo que ver con las marchas, la calle, los juicios y tiene que ver con les desaparecides que no tenemos a dónde llevarle una flor. Recuperamos la historia de una hija que se tatúa la flor roja pensando, como no tiene adónde llevarla, la tiene siempre con ella”.
Hay recomendaciones de libros, documentales, “una batería de ideas que sumen en estos días de hacer memoria, de pensar por qué NUNCA MÁS tiene que pasar en nuestro país lo que pasó. El nunca más, como decimos, siempre hay que llenarlo de contenido, no es una simple frase; para nosotres, el ir a los espacios de memoria y reflexionar, el hacer talleres, recorridos y homenajes tiene que ver con llenar ese contenido”.
La imaginación política crea formas por donde recorrer los límites de lo posible, ahora que ponemos en el centro la vida, hasta que volvamos a las calles. “Ayer, no pudimos marchar, pero creemos que es muy potente la acción de hacer cosas en casa, las manifestaciones por las ventanas, puertas, patios hasta el trabajo más interno y más, más chiquito de entre todos y todas”.
Insiste Jésica: “No olvidar por qué pasó lo que pasó, quiénes fueron los responsables y por qué es importante defender la democracia. Si no se puede salir a la calle a gritarlo, a cantarlo, lo vamos a hacer en casa con mucha fuerza para redoblar la apuesta. Cuando ya podamos salir, porque esto es solo transitorio, muy pronto, nos volvemos a encontrar en los sitios, ahí les esperamos, porque es muy importante visitarlos. Nunca es lo mismo salir a la calle, ir a los sitios, lo que se vive, lo que se siente y se comprende con el cuerpo”.
*Por Redacción La tinta / Imagen de portada: Colectivo Manifiesto.