¿Por qué no vas al estadio?
Zahra Khoshnavaz fue detenida por ingresar a un estadio a ver fútbol. Desde hace 40 años en Irán, las mujeres tienen prohibido hacerlo. Con barbas postizas y gorros, decena de mujeres son apresadas por año. Agrupaciones de mujeres apelan a FIFA para cambiar una norma que rige desde 1979. ¿Cómo puede ser que la mejor selección de Asia esté prohibida para mujeres? ¿Cómo puede ocurrir esto, tan cerca del país que será sede del primer mundial en Medio Oriente?
Por Redacción La tinta
Entonces Zeinab
lo ve en las noticias
totalmente asqueada
decide
dejar de quedar
al margen de todo
Entra al estadio
Y nadie advierte
Que la barba es falsa
Parece varón
Grita muchas cosas
que antes callaba
(«Concatenación» – Por Maia Slipczuk)
En febrero de 2018, una imagen de hombre sacudió medio oriente y también parte de occidente. A pocos meses del Mundial Masculino de Fútbol, Zahra Khoshnavaz viralizó una foto en sus redes sociales en la cual resultaba casi imposible identificarla. Con un gorro en su cabeza y una barba postiza bien adherida, Zahara lucía la camiseta del Persépolis FC. Así fue como entró por primera vez a ver un partido del club de su pasión. En Irán, las mujeres tienen prohibido asistir a partidos de fútbol.
Desde el triunfo de la Revolución Islámica en 1979, se estableció una estricta separación entre hombres y mujeres dentro de los espacios públicos. La normativa también prohíbe la presencia de mujeres en los estadios de fútbol. Así, desde hace 40 años, las iraníes han tenido que vivir bajo innumerables prohibiciones a sabiendas de que su incumplimiento las llevará a prisión. Jafar Panahi, uno de los mejores directores de cine iraní de este siglo, supo contárselo al mundo en su película «Offside».
Dos meses antes de camuflarse, de burlar la seguridad y esquivar controles, Zahra sobrevivió a uno de los terremotos más importantes de los últimos años en Medio Oriente. El desastre, ocurrido en la provincia de Kermanshah, dejó más de 630 muertos y 8100 heridos. «Me pregunté: ‘¿Por qué morir en un terremoto y no realizar tus sueños? ¿Por qué no vas al estadio?» Así que decidí ir», cita el sitio Euronews. «Cuando vi el terreno de juego, rompí en llanto», afirmó en 2018 cuando ya sumaba algunas gambeteadas al Estado iraní y sus leyes. Sin embargo, en la última semana, se conoció un pedido internacional de liberación por la detención de cuatro mujeres que intentaron entrar a un estadio. Entre ellas, Khoshnavaz.
Durante el último fin de semana, la organización Human Rights Watch (HRW) instó al Gobierno de Irán a liberar a las mujeres presas desde el 13 de agosto, afirmando que dicha exclusión es una clara violación de las normas de los estatutos y de la política de Derechos Humanos de la FIFA. El texto remarca que toda discriminación contra la mujer «está estrictamente prohibida y se castiga con la suspensión o la expulsión» de la federación internacional del balón. El 17 de agosto, Irán liberó a Khoshnavaz y a las otras tres mujeres que la acompañaban.
Según se conoció, entre las detenidas, se encontraba Forough Alaei, reconocida fotoperiodista, premiada recientemente con el primer puesto del World Press Photo 2019. El galardón le llegó por su trabajo de documentación sobre la exclusión de las mujeres en los estadios de Irán. Khoshnavaz, Alaei y las otras mujeres resultaron detenidas en medio de otra acción que buscaba visibilizar la lucha feminista por eliminar la prohibición. «Las mujeres iraníes no deberían pasar ni un segundo en prisión porque las autoridades las acusan de desafiar pacíficamente una prohibición ridícula que niega a las mujeres y las niñas la igualdad de derechos para asistir a un partido de fútbol«, expresó Minky Worden, directora de Iniciativas Globales de Human Rights Watch.
Actualmente, Irán es la mejor selección masculina de fútbol de Asia, ubicándose primera en el ránking de su confederación, superando a Japón. Con grandes expectativas por clasificar a Qatar 2022, el movimiento de mujeres ha decidido apelar a FIFA para derribar la prohibición. ¿Cómo puede ser que la mejor selección asiática prohíba el ingreso de mujeres a las canchas? ¿Cómo puede ocurrir esto a pocos kilómetros del país que será sede del primer mundial en Medio Oriente? Las militantes feministas apelan a que FIFA presione a la Federación de Fútbol de Irán, advirtiéndola con suspenderla e impedirle participar de la próxima Copa Mundial.
Si bien el titular del ente internacional, Gianni Infantino, envió una carta a la federación iraní en el mes de junio, instando a que busque modificaciones en la norma, la voluntad de aplicar sanciones reales no se logran ver en un horizonte próximo. «Le pido a la FIFA que ejerza más presión y la presión quiere decir sanciones, ¿no?», manifestó Maryam Shojaei, otra de las principales militantes de la causa. Shojaei no es solo un de las voces que se hace oír en Irán, es también hermana de Masoud Soleimani Shojaei, capitán de la selección masculina y héroe nacional con tres Mundiales en su historial. «Debe haber consecuencias para la federación. Esta podría ser, por ejemplo, la suspensión del fútbol iraní», resaltó Maryam en una nota publicada por The New York Times en julio.
Shojaei es ciudadana canadiense y su militancia la ha ejercido intentando desprenderse de la figura de su hermano. Según ha contado, su lucha comenzó cuando conoció lo popular que es la selección de fútbol entre las mujeres que pudieron viajar al Mundial de Brasil 2014. Ya en Rusia 2018, protestó como fundadora de la organización My Fundamental Right (Mi derecho fundamental).
El derecho a poder ingresar libremente a un estadio en el que se juegue fútbol sigue siendo una utopía en Irán. La lucha por derribar la prohibición es fundamental para un movimiento feminista que crece también en los países de esta región. En noviembre de 2018, Infantino visitó el Estadio Azadi, sede de la selección y de equipos populares como el Persépolis. Para ese día, las autoridades dejaron ingresar a 100 mujeres y el dirigente lo tomó como un avance. «Infantino formó parte de una farsa. Fue una traición terrible para las mujeres iraníes que le han suplicado por escrito durante años que tome medidas al respecto», dijo la directora de Human Rights Watch.
La prohibición continúa como continúa la pasión de las mujeres que siguen infiltrándose en los estadios, camufladas como hombres, arriesgando su libertad. El estadio nacional Azadi sigue prohibido para ellas. «Azadi», paradójicamente, significa «Libertad» en persa. La libertad sigue prohibida.
*Por Redacción La tinta
