En medio de la crisis láctea, empresa recuperada inauguró una fábrica
Se trata de la cooperativa La Ciudad que, bajo la marca Séptimo Varón, abrió ayer una planta en la localidad de Ranchos, que se suma a los cuatro locales porteños que posee el emprendimiento. La apertura de la nueva fábrica “muestra a las claras cómo el cooperativismo puede sobreponerse a cualquier situación, incluso en situaciones económico-financieras como las actuales”, señaló el presidente de la federación Facta.
Por Ansol
“La apertura de la nueva fábrica de la cooperativa láctea La Ciudad en Ranchos es muy importante porque muestra a las claras cómo el cooperativismo puede sobreponerse a cualquier situación, incluso en situaciones económico-financieras como las actuales, donde los pequeños y medianos comerciantes, y las pequeñas y medianas empresas cierran todos los días”, declaró a esta agencia Federico Tonarelli, presidente de la Federación de Cooperativas de Trabajadores Autogestionados (Facta).
A contramarcha de la crisis económica que atraviesa el país, el cooperativismo multiplicó su capacidad de producción con esta nueva planta que hará muzzarellas Séptimo Varón.
“Para nosotros, es un orgullo porque vuelve a poner en valor el cooperativismo, que es todo entusiasmo, militancia y voluntad. Hoy fuimos muchos abrazando a La Ciudad y felicitándolos”, señaló Tonarelli.
La producción de leche atraviesa graves problemas estructurales, tanto en el oligopsonio en la compra de leche que afecta a los tamberos como en su comercialización. “Este hecho le agrega un mérito doble a esta iniciativa”, remarcaron desde Facta.
Sobre la cooperativa
La iniciativa proviene de una empresa recuperada en el año 2002 que, desde sus inicios, mantiene su expansión. Originalmente, contaba con una sola sede en la calle Alcaraz. Ahora, bajo gestión cooperativa, y a pesar de la crisis económica y del sector lácteo, la cooperativa cuenta con cuatro locales de expendio de productos.
“Hace cinco años, con las propiedades de Montecastro prácticamente a punto de ser rematadas, la cooperativa terminó comprando las propiedades. Como solamente una parte de la fábrica se ponía a remate, alquiló el otro sector para poder quedarse tranquilos y empezar una nueva etapa. Esto sucedió hace cinco años. Ahora, después de establecerse y crecer, con cuatro locales en Floresta, Montecastro, Villa del Parque, pueden ampliarse trasladando parte de la producción a la ciudad de Ranchos”, continuó contando Tonarelli, que estuvo presente en la inauguración junto a las cooperativas asociadas en Facta.
En estos locales, casi la totalidad de sus productos provienen de otros emprendimientos cooperativos. Su local original, frente a la amenaza de remate por parte del juzgado que intervino en la quiebra de la empresa primigenia, fue adquirido por la cooperativa.
Comenzaron siendo seis trabajadores y hoy llegaron a ser 24 gracias a la política de expansión que les permite generar más fuentes laborales, facturar más y hacer crecer la proyección de la marca Séptimo Varón.
“Tenemos la política de hacer crecer la cooperativa, que los excedentes vayan a conseguir nuevos asociados y puestos de trabajo. Hay dos trabajadores más desde que abrimos el local. En 2015, éramos 8”, había contado a esta agencia Fabio Resino, presidente de la empresa social. “Como cooperativa, no perseguimos una ganancia extraordinaria, sino una buena relación precio-calidad”, agregó.
El hecho de tener una distancia de siete cuadras entre local y local facilitó la logística y focalizó la marca en el barrio, donde aprovechan la territorialidad para dar a conocer que existe otra economía posible: todos los días de la madre, todos los días del padre y todos los días del niño realizan festivales en los que sortean premios cooperativos como juegos de Factorial o cenas en restaurantes recuperados como Los Chanchitos.
*Por Ansol. Imagen de portada: Cooperativa La Ciudad