Cumbia Santafesina, la irreverencia de las cuerdas
A mediados de los setenta, un grupo de muchachos que se animó a romper con el legado de teclas cumbieras proveniente de Colombia. Irrumpieron las cuerdas e inauguraron un género que porta coordenadas en su nombre, arteria madre de la música tropical argentina. Este fin de semana Los del Fuego llegan a Córdoba y qué mejor ocasión para rememorar la historia de los pioneros que confiaron en que con guitarras también se puede bailar cumbia hasta el amanecer.
Por Julieta Pollo para La tinta
Este sábado arde el Abasto en una noche a pura cumbia que reunirá a los Sabor Canela y un Poquito de Café, una de las bandas emergentes más convocantes del último tiempo, y a Los del Fuego, verdadera institución de la cumbia santafesina que vio nacer el género allá por los setenta y que tradujo clásicos argentinos y latinoamericanos en el fantástico idioma del meneo tropical.
Dueños de un estilo inconfundible, los punteos de Los del Fuego han puesto a bailar a varias generaciones con clásicos del rock, el folklore y el bolero como «Jurabas Tú», «Ojalá», «Sobreviviendo», «Un poco de amor francés», «Persiana Americana», «Y tú te vas», «Ojos de Cielo», «Y sin embargo», «Labios Compartidos», «Si me das a elegir», entre muchas otras.
Viajemos unas cuatro décadas atrás al interior de la provincia de Santa Fe, volvamos a ese instante en que un pibe se animó a ir más allá y a mixturar lo impensado, vamos a ver el nacimiento de la cumbia santafesina.
La cumbia entró con fuerza y se instaló rápidamente como uno de los ritmos constitutivos de nuestra música popular. Bajo el aura del colombiano Cuarteto Imperial, que la pegó en Argentina y desde el sur se desparramó por todo el mundo, comenzaron a surgir los primeros conjuntos locales que tomaron este estilo y, de a poco y a lo largo del tiempo, supieron imprimirle una identidad local y popular. Los Palmeras y Los Cumbiambas son dos exponentes del género que aún hoy siguen girando con su ritmo de acordeones.
Tan fuerte fue el legado de la cumbia colombiana, que prescindir de acordeones y teclados se definía como un franco disparate. Eso le decían a un veinteañero flacucho que, sin otra razón que amor por la guitarra, sembró un sonido inédito que brotaría como uno de los géneros más convocantes de la música tropical argentina: la cumbia santafesina, esa que demostró que con cuerdas también se dibuja cumbia. Este visionario fue Juan Carlos Denis, que hoy pisa los 78 y, casi ciego, sigue tocando la guitarra borravino que lo acompaña hace 39 años.
A fines de los setenta salió a la luz el primer EP de Juan Carlos Denis y Los del Bohío, «A mi Gente», que llegó con el esfuerzo y aporte de un queridísimo productor de la movida tropical de la región. Todos los 5 de noviembre se celebra el Día de la Cumbia Santafesina, día elegido por ser el aniversario de fallecimiento de este productor, Martín “Chani” Robustiano Gutiérrez, que por aquellos años supo ver una joya que por falta de recursos de los propios artistas solo podía apreciarse en vivo.
Denis y Los del Bohío trabajaron el género, lo hicieron crecer y hasta lo expandieron fuera de su provincia: sin muchas certezas en cuanto a qué recibimiento iban a tener, viajaron a la provincia de Buenos Aires donde encontraron una gran cantidad de seguidores, sobre todo en zona sur.
Este grupo fue el semillero a partir del cual comenzó a ramificarse la cumbia santafesina: los vocalistas que integraron en distintos momentos Los del Bohío fueron formando sus propias bandas y cosecharon tantos éxitos como aquella. Alfredo Rafael Bernal formó Fredy y Los Nobles, «Ratón» Duarte armó Los Lamas y el cantante más popular de Los del Bohío, Juan Carlos «Banana» Mascheroni, formó Los del Fuego en 1984.
De un vistazo rápido, «Banana» puede recordar al Gitano, memorable personaje de El Puntero interpretado por Julio Chávez… y es que músico y personaje comparten un aire de tipo de barrio en cuyo rostro se pueden ver tanto las marcas de los años como los guiños que revelan un millón de anécdotas. Como cuando lo iban a apretar a su casa para que dejara Los del Bohío porque había sido cana y era un oficio impensable para un cantante de cumbia, como la navidad en que cantó en la casa de Diego Maradona, como cuando rindió homenaje junto a Karina a Leo Mattioli, otro referente de la cumbia santafesina quw conmocionó a la escena con su inesperada muerte; como cada historia detrás de los treinta discos de Los del Fuego y su sinfín de noches sobre el escenario y detrás de escena.
Cuarteto, cumbia norteña, cumbia villera, cumbia pop, cumbia santafesina… el abanico tropical argentino es amplio y es una de las vetas más importantes de nuestra música popular. Entre luces y sombras, nuestra «tropicalia» se ha erigido por sobre los prejuicios y las precariedades que la vieron nacer… hoy nos zabullimos en ella porque en nuestra cultura se escondeno -o se revelan- filamentos de nuestra historia y pedacitos de identidad.
► Fantástica Fiesta. Los del Fuego junto a Sabor Canela y un Poquito de Café y a DJ Un Oso Pasadiscos. Sábado 17 a partir de las 23 hs. en XL Abasto (Bv. Las Heras 124).
*Por Julieta Pollo para La tinta.
