Les pisaron la manguera
El gobierno nacional le recortó a los bomberos voluntarios de todo el país los fondos que les corresponden por ley y, además, todavía no se los depositó aunque ya se cumplió el plazo para hacerlo.
Por Vove
La voracidad del gobierno nacional por recortar recursos no reconoce límites. Esta vez, las víctimas del ajuste fueron los cuerpos de bomberos voluntarios de todo el país, a quienes les restringieron los fondos que una ley les asigna para comprar equipamiento.
Según denunció a través de un comunicado el Consejo de Federaciones de Bomberos Voluntarios de la República Argentina, esta situación ya había sido advertida por las organizaciones cuando se presentó el proyecto de Ley de Presupuesto a fines del año pasado. En aquella oportunidad, el organismo que nuclea a todos los cuerpos de bomberos voluntarios del país había advertido que el monto presupuestado era un 40% inferior al “cinco por mil de las primas de seguros excepto las del ramo vida” que marca la ley 26.987.
Cuando las asociaciones pegaron el grito en el cielo la respuesta oficial fue que, si bien estaba consignado así en la “ley de leyes”, serían girados los fondos completos que les correspondían. Sin embargo, su temor se confirmó cuando la Superintendencia de Seguros de la Nación (SSN), que recauda y gira a los bomberos voluntarios los recursos comprometidos, les informó que, según sus cálculos, la recaudación final de 2017 y las proyecciones de 2018 reducían esos fondos en un 60% respecto de lo que las organizaciones evaluaban recibir. Se trata, según las estimaciones de los bomberos voluntarios, de 637 millones de pesos menos para 2018, a los que se sumarían los 147 millones que adeudaban de 2017.
Para rematarla, las organizaciones señalaron que al día de hoy no recibieron un solo peso de esos fondos, pese a que la ley establece claramente que “el subsidio se deberá cumplimentar dentro de los primeros seis meses de cada año”.
“No hemos recibido ningún pago ninguna de las asociaciones”, contó María José Chávez, de los Bomberos Voluntarios de Campo Castañares y secretaria de la federación salteña. Según explicó, saben que la SSN ya realizó el depósito de los fondos al Ministerio de Seguridad de la Nación, que es el encargado de distribuir los fondos entre las asociaciones, “pero hasta el día de hoy no tenemos novedades”.
La asociación que integra Chávez había recibido el año pasado casi 1.100.000 pesos, y ya les había avisado que iban a percibir un poco menos este año. Los recursos son utilizados para equipamiento. Según Chávez, “vestir hoy a un bombero con toda la protección necesaria y con las normas que nos exigen” cuesta 250 mil pesos. Además, su cuartel no cuenta con autobomba: una nueva vale no menos de 6 millones de pesos, y una de 15 años (el límite de antigüedad exigido por Seguridad) al menos 1.800.000 pesos.
“La explicación que se está pidiendo es adónde están desviando los fondos”, se indignó la secretaria de la Federación de Bomberos Voluntarios de Salta. “Nosotros no estamos pidiendo que se nos aumente o que se nos dé un subsidio nuevo. Esos fondos por ley son exclusivos para los bomberos voluntarios”, agregó.
Chávez recordó que los bomberos voluntarios no perciben un salario y que deben tener otro trabajo para sostenerse, dedicando su tiempo libre al servicio de la sociedad. “No es justo que lo único que se recibe para cuidar a la comunidad ahora nos lo estén quitando”.
*Por Vove.