Un montón de espaldas
Por Juliana Lago y Antonella Álvarez. Ilustración: Alan Dufau.
“Siempre vieron al pueblo
como un montón de espaldas que corrían para allá
como un campo para dejar caer con odio los garrotes”.
(Roque Dalton. Los Policías y Los Guardias)
Matar
Matar por la espalda
La espalda, antítesis del rostro
El rostro es del “otro”, las “otras” distintas, amenazantes, atacantes, abatidos, delincuentes, terroristas, marginales. Marginales. Radicales. RAM. Rostros autóctonos marginales.
Los rostros que mueren por la espalda se asemejan. Los que matan por la espalda también. Los Halcones revolotean. Matan por la espalda. Pena de muerte.
Muertos y muertas están quienes se ahogan en mentiras mediáticas. Pena convertida en rabia de quienes ponemos lxs muertxs y el cuerpo. Cuerpos tendidos, abandonados, agonizantes. Asesinados.
Cuerpos, rostros, ojos, miradas de un otro que se hace una y miles en lucha. Cuerpos devenidos en lucha.Cuerpos en lucha
Remedio para mi pena. Violeta.
Marginales. Mujeres, mariposas y travestis.
Por cambiarlo todo.
Por esos rostros, que ya no podemos mirar. Y porque sabemos,
el olvido siempre
es más doloroso.
Espalda(s). Un montón de espaldas.
Yo por ellas madre y ellos por mí.
*Por Juliana Lago y Antonella Álvarez. Ilustración: Alan Dufau.