Voto masivo por la paz en Venezuela: ocho millones avalan la Constituyente
Pese a la escalada de violencia que condicionó el acto electoral -hubo al menos diez víctimas fatales- la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) celebrada ayer en Venezuela recibió el respaldo de 8.089.320 ciudadanos. El organismo asume ahora la autoría principal de los designios del país.
La elección para definir a una Asamblea Nacional Constituyente (ANC) celebrada ayer en Venezuela contó con la participación de 41.53 por ciento de los más de 19 millones de ciudadanos convocados, anunció la presidenta del Consejo Nacional Electoral, Tibisay Lucena, quien destacó que a pesar de la violencia y las amenazas se sufragó masivamente.
«El balance es extraordinariamente positivo… ganó la paz. Cuando gana la paz, gana Venezuela», añadió Lucena poco antes de la medianoche, al precisar que votaron 8 millones 89 mil 320 ciudadanos y comenzar a dar resultados.
La oposición intentó todo para detener el proceso. Quemar personas, trancar las calles, amedrentar a los vecinos, ponerle candado a las puertas de salida en las urbanizaciones, incendiar comercios, asesinar candidatos, interrumpir el transporte, dificultar la actividad productiva en varias ciudades, impedir la circulación de alimentos, volar camiones o amenazar a quienes querían votar. Difamar, agredir, asustar.
Cualquier método se consideró válido para impedir la realización de elecciones a Asamblea Nacional Constituyente convocadas por el gobierno. Los partidos de la derecha, alentados en el ámbito internacional por una agitación mediática permanente y con la dudosa legitimación provista por la conspiración diplomática de gobiernos de derecha y sanciones unilaterales de EEUU (además del apoyo financiero y dirección general por parte de sus aparatos de inteligencia), creyeron poder derrocar al gobierno y evitar la ampliación de las potestades populares a través de una Asamblea Constituyente.
Lo único que no intentaron los grupos nucleados en la Mesa de Unidad Democrática – unidad y vocación democrática poco visible a estas alturas – fue lo que la mayoría del mundo sensato pedía y el gobierno ofreció repetidas veces: sentarse a una mesa a concertar la convivencia desde visiones políticas radicalmente diferentes.
La escalada tenía sus motivos: la presión instalada debía corroer la paciencia del pueblo, provocando un levantamiento contra el gobierno y lograr además atraer alguna facción rebelde en las Fuerzas Armadas que permitiera un golpe militar o un conato de guerra civil fratricida para abrir las puertas a una intervención multinacional extranjera.
Sin embargo, la estrategia falló. Nada de eso se produjo y la elección de constituyentes se realizó, tal como estaba previsto, el 30 de julio.
Por último, el miedo, el terror, las barricadas, la destrucción de material electoral, la violencia desatada en algunos sectores o la interrupción del transporte debían culminar en el abstencionismo generalizado. Todo ello también fracasó rotundamente. La movilización organizada, la persistencia en la convocatoria y, sobre todo, la férrea voluntad democrática de una importante, sin dudas mayoritaria, porción de la población, permitieron que millones de venezolanos acudieran a las urnas. Incluso con riesgo y sobreponiéndose a mayúsculas dificultades. Queremos la paz, fue el reclamo y la consigna del pueblo movilizado.
¿Qué viene ahora con la elección de la Constituyente en Venezuela?
Más de ocho millones de venezolanos eligieron, mediante voto universal, directo y secreto, a los integrantes de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) que ahora asume la autoría principal de los designios del país.
“Nadie está por encima del poder originario”, declaró este lunes el presidente venezolano Nicolás Maduro desde la Plaza Bolívar de Caracas (capital). Al hacer un llamado a un diálogo nacional, Maduro invitó en reiteradas ocasiones a la oposición a participar en la contienda, e incluso le ofreció aplazar la elección dos semanas para que pudiera sumarse, pero su ofrecimiento fue rechazado.
El mandatario puso su cargo a la orden e indicó que asistirá a la ANC para reconocer su poder plenipotenciario. El Salón Elíptico del Palacio Federal Legislativo, que alberga a la actual Asamblea Nacional (AN), será la sede del nuevo órgano.
“Hoy comienza un desencadenante histórico, hoy se instalan los constituyentistas”, señaló la abogada constitucionalista especializada en temas electorales, Olga Álvarez. La AN cesará sus funciones dado que la ANC será la nueva encargada de legislar con el objetivo de reformar la Carta Magna de la República Bolivariana de Venezuela, establecida en 1999.
El ordenamiento jurídico de 1999, sin embargo, mantendrá su vigencia con todos los derechos estipulados. Los Poderes Públicos seguirán su funcionamiento, empero estarán sometidos a las decisiones de la ANC.
Se espera que los 545 miembros de la Constituyente enfoquen su labor en materia de justicia y economía. “Esta es una Constituyente para poner orden, hacer justicia y defender la paz”, acotó Maduro este lunes.
Para esta misión consideró será necesario, con diligencia, instalar una Comisión por la Vedad, la Justicia y la Paz con poderes plenipotenciarios y así proteger a las víctimas de la violencia, generada en los últimos meses.
“Sólo a través de justicia lograremos la paz para construir la igualdad, la estabilización política del país y brindarle seguridad al pueblo, la paz es un derecho del pueblo”, subrayó.
En cuanto al factor económico, se buscará perfeccionar el sistema post petrolero y constitucionalizar el sistema de misiones sociales.
Una vez hayan culminado sus labores y tengan redactada la Constitución, será turno de la población venezolana decidir si la aprueba o no, con su participación en un referendo.
Fiscalía investiga muerte de 10 personas durante protestas de este domingo
El Ministerio Público investiga la muerte de 10 personas este domingo 30 de julio, durante protestas contra la elección de la Asamblea Nacional Constituyente impulsada por el gobierno de Nicolás Maduro.
De la cifra de fallecidos, cuatro ocurrieron en Táchira, tres en Mérida, uno en Lara, uno Sucre y otro en Zulia, de los cuales cuatro casos los llevan fiscales de Derechos Fundamentales, cuatro de Delitos Comunes y dos de Protección Integral de la Familia.
Los fallecidos fueron identificados como Ronald Ramírez Rosales (Sargento Segundo de la GNB), José Cárdenas, y dos adolescentes de 13 y 17 años (Táchira), Angelo Méndez y Eduardo Olave, José Sánchez (Mérida), Luis Zambrano (Lara), Ricardo Campos (Sucre) y Haider Ocando (Zulia).
Por su parte, la cifra de personas detenidas asciende a 19 por delitos electorales y 39 por manifestaciones, para un total de 58.
Fuente: Pressenza / El Universal / Telesur / Imágenes: El Espectador