El aborto no es delito
En 2015 una joven de 17 años fue a hacerse un aborto al hospital de El Maitén, provincia de Chubut. Días después murió. El fiscal acusa a la médica que la acompañó en la interrupción del embarazo. El estado de salud de la joven no coincide con el certificado de defunción. Imputar a esta médica tiene un fin “disciplinador” para las mujeres.
Stella Manzano, ginecóloga y perito médica, deslizó que la imputación contra la médica de parte del fiscal que entiende en la causa de la joven que falleció en el hospital de Esquel luego de un aborto en el nosocomio de El Maitén, tiene un fin “disciplinador y machista”. Dijo que las que figuran como causales del fallecimiento nada tienen que ver con la interrupción del embarazo. Reveló que por ejemplo, hablan de una “sepsis” que es una infección generalizada, cosa que no existió. “Seguir insistiendo en eso es faltar a la verdad. Duele porque genera temor”.
La Fiscalía sostiene la responsabilidad de la médica que acompañó en el aborto. La defensa pidió el sobreseimiento, atribuyendo la causa de la muerte a otros motivos. El juez Martín O’ Connor entendió que las dos hipótesis son factibles y que sólo podrá llegar a determinarse lo que efectivamente sucedió en un juicio oral y público. La fecha fue fijada del 31 de julio al 8 de agosto.
El eje del debate se centrará en discusiones médicas. Se busca establecer si hay responsabilidad penal por el fallecimiento de la joven, y de haberla, si tal responsabilidad es achacable a la imputada. El fiscal considera que cuenta con elementos que así lo indican y por ese motivo pidió llevar el caso a juicio. La Defensa sostiene que esa línea de pensamiento es equivocada y buscará demostrarlo en el debate confrontando pruebas.
Los sucesos
La joven solicitó la interrupción legal del embarazo en el hospital de Maitén. Ella cursaba un embarazo de 7 semanas. Decidió realizarlo en el hospital para estar más acompañada y porque no quería que su familia se entera de esta situación. Según el Código civil, ella puede tomar autónomamente decisiones sobre su cuerpo, sin la necesidad de que una persona adulta la apoye. Es además una obligación del personal de salud guardar secreto profesional.
La médica que la acompañó en ese momento era residente, es decir se estaba especializando en Medicina general y familiar. Siempre trabajan supervisadas, no solas. Sin embargo, es una medica con título y puede ejercer su profesión. Una de las acusaciones que hace la fiscalía es que no sería una médica diplomada, lo cual es falso.
La provincia de Chubut desde 2010, cuenta con la ley XV-14 que posibilita a las personas que solicitan una interrupción del embarazo, se realice en instituciones públicas, basándose en el artículo 86 del Código penal. Por lo que la profesional no hizo más que cumplir con su deber de funcionaria pública.
La Organización Mundial de la Salud recomienda la utilización de medicación para la realización de abortos en el primer trimestre de embarazo. También recomienda cita a control posparto entre los 7 y 15 días, porque es el mejor momento de corroborar que ha sido completo y no quedan restos.
El fiscal acusa a la médica de no haberla legrado a los dos días, cuando eso no es lo que médicamente corresponde. Y a la vez, el legrado es un práctica que está desestimada por la medicina, ya que genera secuelas sobre la salud de quien se practique.
También, la acusa de no haber interconsultado con una psicóloga. Esto no tiene sustento ya que dentro de las causales de aborto legal, la joven decidió no asumir el riesgo que implica llegar a un embarazo a término apelando al peligro a su salud física y no psíquica.
Reveló la ginecóloga que “en un país en el que la cuarta causa de muerte de mujeres de entre 15 y 35 años, son las complicaciones del embarazo y donde más del 70% mueren en los 3 últimos meses por enfermedades, tenemos todo el derecho a prevenir esto. Es más contundente que un riesgo psíquico”.
La joven volvió a consultar a los 5 días de la interrupción del embarazo por dolor abdominal. Tenía diarrea. Le pusieron un antidiarréico. Le hicieron un análisis y los glóbulos blancos dieron altísimos, todo el resto estaba normal. En una ecografía advirtieron líquido en el abdomen y la derivaron a Esquel.
En esa ciudad le hicieron una gran cirugía. Los médicos afirmaron que había pus, le hicieron legrado y estudiaron el líquido extraído, el cual no demuestra infección. No llevaron a la joven a terapia porque dicen que “estaba bien”. Después de varias horas, la madre encuentró a su hija mal, avisó que estaba en paro y la reanimaron en la sala. La adolescente ingresó a Terapia Intensiva 40 minutos después pero ya era tarde, estaba muerta. En la historia clínica dejan asentado que la causa de muerte fue una sepsis por un aborto.
La médica explicó que cuando se habla de “sepsis”, se refiere a una infección con un punto de partida pero que termina dañando todo el organismo. Entran en fallo los riñones, el hígado, la sangre, el cerebro. Los análisis muestran que no hubo daño en los órganos ni problemas de coagulación. Nunca hubo sepsis.
La médica forense del hospital realizó una autopsia por la muerte. Informó en los primeros resultados que había muerto por una infección generalizada (sepsis). Luego de que la perito retrucó el informe, corrigieron el motivo de muerte y pusieron tromboembolismo pulmonar (coágulo que viajó hasta el pulmón), lo cual también se desmiente ya que no estaba infartado este órgano. Se pidió desde la defensa, tomar muestra de ósea ya que la causa de muerte mas acertada seria una leucemia aguda, por el nivel altísimo de glóbulos blancos, pero la fiscalía no lo permite.
Absolución
Manzano indicó que “el juez y el fiscal dicen que la joven murió debido a una sepsis provocado por un aborto. Seguir insistiendo es faltar a la verdad. Nos duele que generen temor en las mujeres que deciden hacer abortos con pastillas. Tiene un fin disciplinador, para que las mujeres piensen que abortar en peligroso y que los médicos en hospitales que hacemos abortos legales y respetamos la ley, tengamos temor. Y que veamos que aunque somos inocentes, igual nos van inculpar. A esto nos resistimos totalmente. A la injusticia también”.
Habló sobre la situación legal de la imputada. “El abogado defensor pidió que la absolvieran. Porque tienen que demostrar que causó la muerte de la joven. Poner pastillas no tiene nexo causal con todo esto, esta joven, debe haber estado en contacto con 17 médicos”.
Para finalizar, Stella Manzano no pudo evitar comparar lo sucedido, “este caso me recuerda mucho al de la joven que estuvo presa en Tucumán, Belén, en donde salieron a la luz todas las irregularidades judiciales, que jueces y fiscales permitieron. Hay un fin disciplinador y machista”.
*Por Redacción La tinta / Fotos: En Movimiento Teve.
