Descolonizar nuestros cuerpos: los órganos sexuales

Descolonizar nuestros cuerpos: los órganos sexuales
24 julio, 2017 por Redacción La tinta

Por Redacción La tinta

Estamos acostumbradas a repetir al pie de la letra las órdenes de “expertos”. Hemos perdido el conocimiento que fue pasándose de generación en generación. Nos volvimos objetas de examen y experimentación a causa del maldito patriarcado. Nos han alejado de nosotras, de conocernos, de descubrir qué es lo que nos sucede a diario. Hemos perdido el entendimiento de nuestra salud. Hemos perdido la autonomía y casi toda nuestra historia de brujas.

Empecemos a desandar este camino por conocer nuestros órganos. En ediciones posteriores podremos ir interiorizando en el funcionamiento y en formas de tratar diferentes malestares que suceden en nuestros cuerpos y recuperando los saberes ancestrales al respecto.

Nuestros cuerpos por dentro y fuera

Los órganos genitales externos de las personas que nacieron con sexo femenino son el clítoris y la labia, juntos forman la vulva. Los labios exteriores sobre las otras partes de la vulva se vuelven más finos en la base, donde se fusionan con el peritoneo, los músculos que hay entre el ano y la vagina. En el interior de los labios externos están los labios internos. Están unidos en la parte superior para formar una vaina protectora del clítoris que también protege la abertura de la uretra (por donde hacemos pis).

El área interna de los labios internos está ocupada por el himen, membrana ovalada que varía de tamaño, forma y rigidez. El himen puede romperse practicando actividades deportivas, por inserción de un tampón, practicando masturbación o por penetración vaginal.

Clítoris y las glándulas genitales

El clítoris es un órgano que sirve esencialmente para la estimulación sexual y el placer. El clítoris y la labia contienen un tejido eréctil que crece durante la excitación sexual. Hay una glándula que está adherida a la vulva: la Bartholino. Se localiza en la abertura de la vagina y segrega un fluido durante la estimulación. Normalmente es del tamaño de un maní pequeño y no es prominente. Su inflamación se puede producir por lo que se llama absceso de Bartholin.

La vagina

La vagina es un canal que contacta la vulva con órganos internos. Mide entre 7 y 12 centímetros de longitud. Allí se produce el moco cervical que va cambiando de características dependiendo del momento del ciclo o del uso de métodos anticonceptivos. Su descarga normalmente es blanca e inodora y además de revestir el interior de la vagina, limpia el canal vaginal.

El útero

El útero es más o menos del tamaño y forma de una pera. Está formado por dos partes: el cuerpo del útero y el cuello o cérvix. El cuerpo tiene tres capas. La interna, el endometrio, se forma todos los meses para dar ayuda nutritiva en caso de que haya un embarazo y en caso contrario es lo que despedimos durante la menstruación. La segunda capa es el miometrio, un músculo muy potente que permite el crecimiento y elasticidad durante los embarazos. Y la capa más externa es la que recubre al útero, el cérvix tiene la forma de un cilindro.

Todas las funciones del útero (menstruación, embarazo, menopausia) están reguladas por hormonas. El útero está conectado a las trompas de Falopio, las cuales transportan el óvulo (célula liberada por el ovario en el momento de la ovulación).

Los ovarios

Son dos. Están localizados en la pelvis, a ambos lados del útero sostenido por ligamentos. El orificio de la trompa se encuentra justo por debajo de cada ovario, con el tubo guiado hacia el útero. Tiene forma y tamaño de almendra. Producen óvulos todos los meses y además comandan a dos hormonas fundamentales en el ciclo que son los estrógenos y la progesterona.

Hasta aquí llegaremos en esta edición. Pronto continuaremos con más conocernos y descolonizarnos.

*Por Redacción La tinta / Fotos: M.A.F.I.A.

Palabras claves: feminismo, ginecología

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