Se lanzó la Cátedra Fidel Castro en Córdoba
La iniciativa continental de la articulación de los movimientos sociales hacia el ALBA también tuvo su acto de apertura en Buenos Aires y se realizará en otros puntos del país y otras ciudades del continente.
Por Mariano Pacheco para La tinta
Con la presencia de la educadora popular Cubana Marilin Peña Perez (integrante del Centro Martin Luther King de La Habana); Claudia Gamba, de la Fundación Un Mundo Mejor es Posible (UMMEP) que lleva adelante las Misiones Cubanas en Argentina y Gonzalo Armúa (del Alba movimientos), se llevó adelante el lanzamiento de la Cátedra Fidel Castro en Córdoba.
La actividad se llevó a cabo en la clínica oftalmológica «Dr Ernesto Che Guevara», donde se desarrolla la Operación Milagro, comenzó con un sentido homenaje a Berta Cáceres a un año de su asesinato, con una mística en la que no faltaron las semillas, el agua y los pañuelos del Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH). «Hoy nos llovió Berta y con la esperada y ansiada agua llovió y se esparció por la ciudad de Córdoba nuestro homenaje a la hermana y compañera», leyó con la voz entrecortada una de las integrantes del Alba movimientos. «Hoy nos llovió Berta y aportó el agua a nuestras ofrendas, el agua-vida, el agua-flujo, el agua-torrente, el agua-gota paciente. Hoy nos llovió Berta y mojó las semillas traídas de las tierras cordobesas de donde el pueblo expulsó a Monsanto, otra trasnacional de la muerte como aquellas contra las que peleaste y continúan hoy dando batalla tus compas del COPINH».
También se homenajeó a Hugo Chávez, a cuatro años de su fallecimiento, quien estuvo presente en la sala a través de un video, en la que destacó con sus palabras la importancia de combatir el capitalismo y avanzar en la construcción del socialismo, pero también, de incomodar a quienes no se definen, a quienes intentan promocionar un «capitalismo con rostro humano» y de dar batalla «contra el reformismo».
«Fidel era un gran promotor del trabajo político, del trabajo de masas y también, del trabajo ideológico»
Claudia Gamba agradeció al ALBA Movimientos por haber elegido la Clínica como sede para realizar el lanzamiento y aprovechó la ocasión para contar los entretelones de cómo se había organizado la Operación milagro junto a Fidel Castro, para «desembarcar» en Bolivia y luego, cómo el grupo de argentinos comenzó la tarea en Córdoba. Destacó la «mirada estratégica de Fidel», su capacidad de liderazgo y puntualizó que Fidel nunca dejaba una misión emprendida sino hasta haberse terminado. «Hoy Fidel seguramente estaría conspirando», dijo. «Estaría viendo con quien, con quienes, se podría promocionar un amplio movimiento Latinoamericano para frenar esta ofensiva conservadora que se despliega en el continente».
Gonzalo Armúa, por su parte, recordó los orígenes del ALBA como propuesta de articulación de Estados de la región encabezada por Fidel Castro y Hugo Chávez, y cómo luego, a instancias del MST de Brasil, surgió la propuesta de realizar una articulación continental de los movimientos sociales, más allá de que sus gobiernos adhieran o no a la propuesta del ALBA. También destacó la importancia de la formación política, de la comunicación popular para contrarestar el discurso de los medios hegemónicos de comunicación, a los que caracterizó como «los partidos de la oposición» y de la solidaridad activa con entre los distintos países. «Una solidaridad», dijo, «que vaya más allá de lo declamarorio, de las firmas de adhesión y de los comunicados, que son necesarios pero que no alcanzan».
Finalmente, Marilin Peña Perez comenzó su intervención proyectando una canción realizada por distintos artistas en homenaje a Fidel tras su muerte y aclaró que era la única canción que llevaba en su celular. En su discurso realizó un recorrido por lo que fueron los años ´90 en Cuba, cuando ella era estudiante, en medio de la complicación económica en el país y la debacle política a nivel mundial. Recordó cuando Fidel se reunió con las Federaciones Universitarias para explicar los problemas que atravesaba el país, escuchar a los y las estudiantes y poner en discusión qué hacer con las becas que muchos de ellos recibían del Estado para poder estudiar.
La educadora popular cubana rescató el ejemplo de Fidel en cuanto a la formación, la capacidad de lectura y de procesar información, pero por sobre todo, su intento permanente por analizar cada situación a la luz de resituarla en su historicidad. «Fidel era un gran promotor del trabajo político, del trabajo de masas y también, del trabajo ideológico», destacó. Y recordó que Fidel insistía mucho con eso de escuchar, pero también «con disputar ideas, con el internacionalismo y con la promoción de la unidad, tanto de la unidad popular en cada país como de la unidad continental; de reconocer las debilidades y fortalezas propias y del enemigo, de la necesidad de la formación y de la solidaridad», destacó.
Finalizó, entre calurosos aplausos de los asistentes, diciendo: «Sí se pudo, sí se puede, sí se podrá».
*Por Mariano Pacheco para La tinta