Reflexiones tras la represión en las puertas de la Barrick Gold
El sábado pasado el gobierno sanjuanino reprimió a asambleístas que cortaban el ingreso a la Mina Veladero en las cercanías de la localidad de Rodeo y Jáchal. Luego de días de movilizaciones y búsquedas, liberaron a todas las personas. Una mirada con las voces de la Asamblea Jáchal No Se Toca.
En el operativo que se realizó el sábado pasadas las 20 horas por fuerzas de seguridad de la policía de San Juan, Guardia de Infantería y Gendarmería Nacional, habían sido detenidas treinta personas, entre ellos tres menores, que constituían la totalidad de los que participaron del corte de ruta. Según lo informado por el gobierno provincial, los asambleístas serían imputados por resistencia a la autoridad, violación de domicilio y de la propiedad privada.
Si bien desde la Asamblea Jáchal No Se Toca no participaron en la organización de esta medida, rápidamente salieron a denunciar la falta de legalidad con la que se maneja la justicia y el gobierno sanjuanino cuando se trata de defender los intereses de la Barrick Gold. “Siendo las 2.15 (del domingo). Un grupo de compañeros junto a dos abogados estamos en la puerta de la Central de Policía, donde nos dicen que los detenidos están incomunicados y ni siquiera a los abogados los dejan entrar o informan sobre el estado de los detenidos y sus nombres. (El Juez) Oritja no atiende el teléfono”, difundía la Asamblea.
Las y los manifestantes habían iniciado el mismo sábado el bloqueo en la ruta de acceso a la mina Veladero. El corte de ruta se definió en el contexto del Primer Encuentro Interterritorial de Jóvenes en Lucha”. En un comunicado anunciaron las definiciones acordadas: “En el marco del 1er Encuentro Interterritorial de Jóvenes en Lucha, un grupo de personas de diferentes territorios junto a vecinxs jachallerxs e Iglesianxs hemos decidido pasar a la acción y dar un paso más en esta lucha contra este sistema opresor, saqueador y contaminante, realizando un corte total en la entrada del camino minero que se dirige a la Mina Veladero, la misma que en estos últimos años ha derramado millones de litros de agua cianurada sobre las nacientes del rio Jáchal, contaminando los ríos de 5 provincias y el océano atlántico”.
Si bien la decisión de quienes participaron del corte de ruta era “darle la espalda y realizar una acción directa, poniendo nuestros cuerpos al frente, entendiendo que es la única que nos queda para lograr que estos genocidas abandonen nuestros territorios”, las crónicas en el lugar de los hechos, afirman que prácticamente no hubo resistencia por parte de los asambleístas, y que las fuerzas de seguridad no dieron tiempo a la negociación con los manifestantes, que ya sabían que iba a ser muy difícil sostener el bloqueo.
Por su parte, la Asamblea Jáchal No Se Toca emitió un comunicado donde respaldó la acción llevada a cabo por los integrantes del 1er Encuentro Interterritorial de Jóvenes en Lucha y exigía a las autoridades estatales las garantías legales que corresponden para los detenidos. “Solicitamos al gobierno provincial y al gobierno nacional, en sus tres poderes, sean garantes del estado de derecho y de la seguridad de los detenidos” rezaba un nuevo comunicado de la Asamblea. A si también pedían a las demás organizaciones de derechos humanos que se informaran de lo sucedido en la provincia de San Juan y que tomaran posición al respecto.
Después de la noticia de la represión en las puertas de la mina Veladero, se sucedieron una serie de marchas y manifestaciones en distintos lugares del país en apoyo a los detenidos por el gobierno sanjuanino. El lunes alrededor de las catorce horas liberaron a la totalidad de los detenidos.
Un poco de memoria
El 23 de octubre del año pasado, efectivos de la Infantería reprimieron a los manifestantes que se encontraban hace dos días cortando uno de los pasos hacia la mina Veladero camino a la localidad de Tudcum, a setenta kilómetros aproximadamente de la ciudad de San José de Jáchal en la provincia de San Juan.
Se llevaron detenidos treinta manifestantes que se encontraban resistiendo en el corte del paso a la mina Veladero. La policía provincial del departamento de Iglesia había reprimido salvajemente a mujeres que estaba en el corte. Los manifestantes denunciaron que se les negó atención y primeros auxilios.
“Las han arrastrado por el piso, les pegaron. Una de las asambleístas está internada con politraumatismo de cráneo, aunque fuera de peligro, otra mujer con múltiples contusiones en todo el cuerpo, y otra mujer con quebradura de la muñeca”, relató Gustavo Herrmann a Marcha.
El corte se había iniciado el 21 de octubre. Cerca de las quince horas, la Asamblea Jáchal No Se Toca imprimía su primer informe donde relataba acerca de las razones del corte. “A partir de este momento queda bloqueado el ingreso a camiones a la empresa camino a Tudcum a 70 kilómetros aproximadamente del pueblo de Jáchal. Vecinos, asambleas y auto convocados nos estamos manifestando cansados de la burocracia y las mentiras a más de un mes del derrame de cianuro, de silencio y manipulación política y mediática”, afirmaba el comunicado.
Un año después, en este nuevo tiempo en que la minería a cielo abierto vuelve a ponerse en cuestión, esta vez en la discusión sobre el impuesto a las ganancias: La Barrick y el gobierno de Sergio Uñac vuelven a descargar toda su furia sobre los que luchan contra la contaminación y el saqueo de nuestros recursos naturales.
*Por Sebastián Saade para Marcha.