«Es necesario enseñar a luchar contra la violencia y el racismo»
Silvino Báez es el papá de Fernando Báez Sosa, el joven de 18 años que fue asesinado por un grupo de rugbiers en enero de 2020, a la salida de un boliche en Villa Gesell. Mientras el rugby vuelve a quedar en el ojo de la tormenta por las declaraciones xenófobas y machistas de jugadores de Los Pumas, Silvino reflexiona e invita a que el deporte eduque para que no haya más casos como el de Fernando.
Por Silvino Báez para La Garganta Poderosa
Esta semana, se vieron los dichos de varios jugadores de rugby, las expresiones racistas y xenófobas, y de todo lo que dijeron debería hacerse cargo la Justicia. A nosotros, el 18 de enero en Villa Gesell, un grupo de rugbiers nos quitó a Fernando y, hasta el día de hoy, estamos esperando que el juez ponga fecha de juicio para los ocho asesinos que hoy están presos.
A mi hijo lo golpearon por racismo y estaban preparados para matar a alguien; si no era él, seguro iba a ser otro. Fue con odio; tal vez piensan así y se sentían superiores porque eran rubios y Fernando tenía la piel morena. Si hubieran pensado en la otra persona, no habría pasado nada de esto.
Pasaron casi 11 meses desde que lo mataron y desde que nuestra vida dio un giro muy grande; ya no somos como antes, todo el tiempo extrañamos esos momentos felices con él. Hoy estamos como el primer día que no está: con mi esposa trabajamos para intentar distraernos y ocuparnos la cabeza, pero siquiera podemos escuchar música, porque hay canciones que nos recuerdan a Fernando y no nos da para tanto el corazón.
Sentimos que todavía nos cuesta aceptar que ya no lo tenemos. Hay un vacío enorme y nuestro día a día es vivir sin un futuro, sin planes, perdimos el rumbo. Yo soñaba en poder verlo crecer, que termine la facultad, pero ya no… Ya no puedo soñarlo. En su camino, se cruzaron personas que sin piedad lo asesinaron brutalmente a golpes y patadas.
Yo no estoy en contra del rugby ni de ningún otro deporte; simplemente creo que es necesario enseñar a luchar contra la violencia y el racismo, porque esas personas que lo patearon hasta matarlo no tienen vergüenza para pegarle a un pibe que está desmayado en el piso. Y todos esos pibes que no dejaban que sus amigos lo ayudaran, todos esos que estaban atajando a los demás pibes para que no pasaran, tampoco.
Hoy, necesitamos justicia y que en el deporte se siga educando, para que no haya más casos como el de Fernando.
* Por Silvino Báez para La Garganta Poderosa. (Imagen de tapa: La Garganta Poderosa)