Poner en perspectiva plural lo individual
Por Julio Villafañe y Verónica González para La tinta
“Veo proyectada, como un film, toda mi vida”.
Serú Girán
Susana Nieri no es una canción, pero su vida está atravesada por la imagen o sus imágenes están atravesadas desde su vida. En esta entrevista, la documentalista, directora de Gotas de Lluvia, repasa cómo la imagen estuvo siempre presente desde su infancia y cómo politizar lo personal es indispensable para la construcción de los feminismos.
Su primer documental la llevó a recorrer diez provincias argentinas para dar cuenta de la situación sobre Educación Sexual Integral. El embarazo adolescente de su sobrina le despertó la necesidad de salirse de lo más cercano, lo conocido, de su vida resuelta llegando a los 30 años, y se lanzó a hacer esa road movie que transita desde la indiferencia, la ausencia estatal, la violencia institucional y, sobre todo, la necesidad de dar cuenta de todas las realidades.
Nacida en Córdoba, en la localidad de Marcos Juárez. Parte de su infancia está marcada por el trabajo de su madre, uno de tantos que tuvo como jefa de hogar luego de que el padre enfermara. La madre de Susana trabajaba en una casa de fotografía. Su casa estaba llena de revelados y más imágenes. En esa casa, hay una pared que está vestida de historia, retratos de la familia la cubren por completo y cuentan una historia a través de imágenes.
Hija de obreros, sus estudios iniciaron con un no inicio. El comienzo se postergó por la necesidad de trabajar para apoyar a la familia. Al segundo intento, Susana entró a estudiar en la Escuela de Artes Aplicadas Lino E. Spilimbergo. Paralelamente, trabajaba en un videoclub y, después de los dos años de estudios de fotografía, hizo un año más para incursionar en las técnicas audiovisuales.
Los principios de los 90 la encontraron fotografiando la escena del rock cordobés. Y aunque nos dice que todavía es rockera, hubo una pausa con tonos caribeños.
Cuba
La Escuela Internacional de Cine y Televisión en San Antonio de los Baños, en La Habana, es una de las más prestigiosas en el mundo. Fundada en 1986 por Gabriel García Márquez y Fernando Birri, significó, en Cuba, la inauguración de una importantísima sede de la Fundación del Nuevo Cine Latinoamericano. Julio García Espinosa fue clave también en la creación de esta escuela que instauraba nuevas técnicas y métodos de estudio para sus alumnas y alumnos. Un aprendizaje de la práctica, con cineastas que trabajaban activamente.
Susana había partido hacia allá con un taller de fotografía cinematográfica como destino. El pasaje que sacaron con su compañero era abierto por un año.
En el paso por Dominicana, en Santo Domingo, presentó el currículum en el Diario Hoy De pronto, era la única reportera gráfica en toda la isla. Cada jornada significó un desafío y un ejercicio de reconstruirse, cada día recibía ataques a sus herramientas de trabajo. Pero la experiencia también fue formativa, la versatilidad del oficio la llevó a recorrer desde la imagen un Santo Domingo en el que la brecha entre pobres y ricos no entra en ningún cuadro. En ese diario, publicó una columna llamada Portafolio en la que publicaba fotografías propias y de otres, reseñando sus trabajos.
El viaje a Cuba para realizar el taller en San Antonio de los Baños no pudo realizarse, el vuelo estaba sobrevendido.
Susana y su compañero no llegaron a Cuba.
Al regresar a Córdoba, Ser Humano fue su muestra de despedida. En la Casona Municipal¹, hizo esa muestra que recorría por las salas y por el cuerpo. Un recorrido con fotografías de gran tamaño y una performance con la que ella misma ofrecía una panorámica de la vida humana.
Adolofo Sequeira fue curador de esa muestra y, cuando terminó la inauguración, la empujó al cine. La imagen comenzaba a ser en movimiento.
Punto de Giro
Una amiga chilena la instó a inscribirse en la Escuela Nacional de Experimentación y Realización Cinematográfica (ENERC). El cupo era muy limitado, la especialidad de fotografía tenía más de 500 inscriptos y solo se admitían diez alumnes. Susana quedó segunda en el orden de mérito. Buenos Aires se convirtió así en la ciudad en la que vivió los años más hermosos (sic). Claudio Remedi y Dolly Pussi configuraron el acceso a la carrera como documentalista, el género con el que habita casi toda su carrera como productora audiovisual.
La lente ahora es una herramienta para observar la realidad y para observar su realidad.
En el 2002, en una reunión con Dolly, llega otro punto de giro, el segundo.
El Toro por las Astas
Lo personal es político. Politizable.
El embarazo adolescente y la Educación Sexual Integral no eran temas que ocuparan la agenda de Susana. Cuando su sobrina queda embarazada, el embarazo adolescente se cuela en el cuadro, en el guion y el ingreso al feminismo llega con esa investigación que comienza en la casa de Dora Barrancos, la primera entrevistada para la producción del guion de El Toro por las Astas (2006). Esa entrevista es la base de la animación que se observa en el documental. Pero el inicio es la segunda entrevista que realiza.
A finales del 2002, en el país se aprueba la Ley 25.673, la Ley Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable. El nuevo entrevistado sería Ginés Gonzales García, Ministro de Salud. La polifonía del docu-ficción iba sumando voces.
El Toro por las Astas es un documental que utiliza lo ficcional como un recurso para recrear la historia de Susana y su sobrina. El INCAA declaró el proyecto de Interés Cultural por decisión unánime. Decisión tan firme como la que guía todo lo que realiza. Doble aries dice, la astrología también es guía.
El impacto de la proyección de El Toro en la legislatura de CABA fue una estampida. Susana y el equipo debieron huir del recinto por la amenaza de agresión que significaba la manifestación de gente adepta al OPUS DEI en las inmediaciones del edificio.
Neuquén
Las proyecciones de la ópera prima como documentalista repitieron esa polifonía que la compone. Las giras continuaron por varias provincias y, en el viaje a Neuquén, para proyectar El Toro y realizar un foro debate, Susana viaja con Lohana Berkins, también invitada a participar del evento. Transfeminismo en movimiento.
El trabajo como documentalista continúa ahora desde el sur patagónico, nueva morada de la directora. Allí continúa su investigación, su trabajo de campo, entrevistando a mujeres que fueron víctimas de violencia de género para producir una nueva película que diera cuenta, a través de un caso, todas las manifestaciones de las violencias machistas.
La Revuelta Colectiva Feminista es una agrupación feminista que acompaña y contiene a las mujeres en situaciones de violencia. El empoderamiento y la red son herramientas que los feminismos construyen y transforman vidas. A través de ellas, empieza a tomar forma Ella se lo Buscó (2013), el caso de Ivana Rosales se transforma en el fotograma paradigmático para dar cuenta de la multiplicidad de violencias a la que están expuestas las mujeres e identidades feminizadas y disidentes en un sistema que reproduce continuamente las prácticas violatorias de derechos para todas las personas disidentes de la binaria heterosexualidad sexo genérica obligatoria.
Ivana Rosales sobrevivió en el 2002 a un intento de femicidio por parte de Mario Garoglio. Luego de estrangularla con un cable, la encerró en el baúl de su auto creyéndola muerta, pero luego la golpeó con una piedra hasta dejarla inconsciente. Garoglio se entregó y, en el 2003, fue condenado a cinco años de prisión, se escapó. Nunca cumplió esa condena.
La abogada de Garoglio, Alicia Garayo, presentó la defensa utilizando la figura de emoción violenta. El fiscal Alfredo Velasco Copello acusó a Ivana de ser mala madre y mala esposa, Ella se lo Buscó. En el 2004, Garoglio abusó de sus hijas, Abril y Mayka. La condena por estas violaciones llegaría recién en el 2012, año en que, además, Mayka se suicidaría. Esta vez, fue condenado a cuatro años y ocho meses de prisión efectiva.
«Dentro del palacio, los jueces se ríen de vos».
Las Pelotas
Cuando Susana se contactó con Ivana y le propuso realizar el documental, Ivana aceptó. Lo personal se politiza en potencia multiplicadora, Ivana estaba convencida de que esta producción era una herramienta más para continuar el trabajo transformador que realizaba cada día con la agrupación que la acogió.
La escena de apertura de Ella se lo Buscó es la narración de Ivana de la noche del intento de femicidio. Susana había realizado todo el guion en un proceso en conjunto, pero esa escena era una página en blanco hasta que Ivana grabó lo que podemos ver en el producto final. Se grabó una sola vez.
Pensada en capítulos como un libro, la película atraviesa tres ejes para dar cuenta del continuum de violencias. El silencio cómplice de la sociedad y del Estado, el rol de los medios de comunicación hegemónicos y la patriarcal y conservadora Justicia son las instituciones que vertebran esta panorámica de violencias que recayeron sobre el cuerpo y la vida de Ivana y sus hijas. El final se modificó para agregar la dedicatoria a Mayka.
Ivana Rosales falleció en el 2017, a causa de la epilepsia que padecía como consecuencia de los golpes que Garoglio le había dado cuando intentó asesinarla en el 2002.
«Giros. Dar media vuelta y ver qué pasa allá afuera».
Fito Páez
Ivana y Abril supieron capitalizar sus experiencias. Encontrarse en ese dolor de madre, hermana, esposa, hija; saberse desfavorecidas en un sistema que jerarquiza las identidades de género las hizo rearmarse y encontrarse formando redes. Sabían y estaban convencidas de que ese dolor debía ser fuego para iluminar la lucha de todas las compañeras que estaban, solo por no ser varones cis heterosexuales, expuestas del mismo modo a los mismos peligros.
Para la grabación de Ella se lo Buscó, Ivana no dudó en ser parte del proceso y ser protagonista en la pantalla de una historia que significó un punto de giro en su vida. La potencia de los últimos dos trabajos recupera aquella consigna que la llevó a tomar el toro por las astas cuando decidió que la historia familiar, que esa relación tía sobrina que se reconfiguraba con el embarazo adolescente, era una situación que revestía cientos de texturas diferentes en los distintos territorios del país, hacer político lo personal.
A comienzos de 2017, Susana había hablado con Ivana para que, con el acuerdo de Abril, escribieran juntas una nueva producción, Gotas de lluvia. Pero el 6 de septiembre de ese año, Ivana muere inesperadamente. Fue entonces que, luego de una pausa, Susana le preguntó a Abril si quería continuar con el proyecto y Abril respondió que hacer este nuevo documental «podría ayudar a otras chicas«. Poner en perspectiva plural lo individual implica la transformación de una biografía a un dispositivo político, pedagógico, transformador.
Esas gotas de lluvia que sonaban sobre el techo y les recordaban a Abril y Mayka cuánto las quería su madre mientras estaban a cargo de Garoglio, mientras Garoglio abusaba de ellas. Esas son las gotas que hoy resuenan y se multiplican en cada encuentro, cada reunión, en cada plenaria en la que Abril toma la posta y decide poner el cuerpo para que ninguna niña, niño y niñe deba pasar situaciones similares, discutiéndole a la justicia patriarcal y adultocentrista sus técnicas de investigación que revictimizan y someten a niñes que fueron abusades a nuevas situaciones de violencia evitables.
Abril se multiplica en cada compañera que se suma a la cuarta ola para que seamos, de una vez, esa otra humanidad, así como se multiplicaba la voz de Ivana en cada foro, en cada proyección, en cada debate que se abría cuando compartían Ella se lo buscó en las distintas provincias. Así como se multiplica su imagen silenciosa en Gotas de Lluvia siempre acompañando a su hija, desde el abrazo contenedor, al fuego que queda encendido. El impulso para cambiar el mundo viene, como decía Lohana, del amor que fue negado, así como el Estado de Neuquén le negó la Justicia a Ivana².
«Sacar belleza de este caos es virtud».
Gustavo Cerati
Feminismos, activismo y academia
El arribo a la militancia está signado por el embarazo adolescente de la sobrina. Desde entonces, primer punto de giro, Susana Nieri ha dedicado su carrera y su militancia a los feminismos.
Actualmente, está trabajando en un nuevo proyecto documental sobre un caso de abuso sexual en las infancias dentro de una institución educativa de Córdoba. En simultáneo, espera la reactivación del INCAA para poder filmar su primer ficción Algo incorrecto, basada en la historia de un juez pedófilo de la ciudad de Mar del Plata.
El comienzo, marcado por esa tenacidad doble aries, fue casi un impulso autodidacta. La escucha y la apertura fueron la herramienta principal. Susana aprendió del feminismo por, en y con todas y cada y una de las mujeres que escuchó desde que recorría las rutas grabando El Toro. Luego, llegan los estudios formales en género; actualmente, se encuentra cursando sus estudios para el título de Doctora en Estudios Género de la Universidad Nacional de Córdoba.
Pero la militancia continúa. Forma parte de Cartelera feminista, de la Comisión de Género de APAC, también es parte de Acción Mujeres de Cine y de la RAD. En cada uno de esos espacios, trabaja por la igualdad y paridad de género en todas las ramas de la industria audiovisual.
Actualmente, las escuelas de cine tienen aproximadamente un 60% de estudiantes mujeres, pero la mayoría de ellas no llega a ejercer su profesión. El bajo porcentaje de mujeres en la industria audiovisual (un 20% aproximadamente) se dedica a tareas históricamente feminizadas. Una ley de cupo no es suficiente para modificar esta realidad. Es necesaria una política pública transversal pensada e implementada con perspectiva de género para que el cine tenga una lente y una mirada que dispute los sentidos patriarcales de la industria cultural.
El cine de Susana Nieri es una herramienta necesaria para que la cultura sea pensada como dispositivo político. Las narrativas cinematográficas pueden escapar a los imperativos de entretenimiento y a las lógicas mercantiles para apostar a un arte transformador que se puede multiplicar como Gotas de Lluvia.
*Por Julio Villafañe y Verónica González para La tinta.
Notas
¹El Centro Cultural Casona es uno de los espacios más visitados en el centro de la ciudad de Córdoba, sitio en la vieja casona de la familia Galíndez de calle General Paz esquina La Rioja.
²Gotas de lluvia fue declarada de interés cultural y social por la Legislatura de la provincia de Córdoba y de Neuquén a comienzos de 2020, y recientemente, fue declarada de interés cultural, social y político por la Cámara de Diputados de la Nación.