Está en riesgo el emblemático campo de Ramona Bustamante
Tras la muerte de doña Ramona y de su hijo Orlando, desde el Movimiento Campesino de Córdoba, temen que las tierras sean entregadas a los empresarios que estuvieron décadas intentando desalojarles. El Gobierno provincial señalizó oficialmente el campo como zona de alta conservación de monte nativo.
Representantes del Movimiento Campesino (MCC) junto al director de Ordenamiento Territorial del Ministerio de Ambiente de Córdoba, Pablo Riveros, se reunieron el pasado viernes en la entrada del campo de Ramona Bustamante para señalizarlo como zona de alta conservación de monte nativo.
Las organizaciones le piden además al Gobierno de la Provincia que expropie el campo de doña Ramona para preservarlo como patrimonio natural y cultural, y que se cree allí la Escuela de Memoria y Agroecología Ramona Orellano de Bustamante.
Las organizaciones territoriales MCC, UCAN, MNCI-Somos Tierra, FOB y UTEP se encuentran en estado de alerta desde el pasado 30 de octubre, cuando una comitiva de la Cámara Civil y Comercial de Deán Funes, junto a policías e infantería, se presentaron en el lugar para realizar una inspección judicial, a pedido de los empresarios Juan Carlos y Edgardo Scaramuzza.
«Tomamos ese legado y hoy nos encontramos cuidando y custodiando. Hoy somos sus guardianes, por Ramona y por cada Ramona que pelea en cada territorio. Porque el campesinado y la agricultura familiar en nuestra provincia siguen estando en situaciones de inseguridad en la tenencia de sus tierras y sin políticas de arraigo para que sea una opción de vida digna nuestro norte», expresaron las organizaciones en un comunicado conjunto.
Víctima de la avaricia y especulación de empresarios, gobiernos, funcionarios judiciales, policías y abogados corruptos, Ramona resistió hasta su último suspiro los intentos de desalojo en su campo, ubicado en el paraje Las Maravillas, Puesto de Castro, a unos 20 kilómetros de la localidad de Sebastián Elcano.
Símbolo de resistencia por la tierra y la vida campesina, finalmente, murió el 18 de junio de 2021, a sus 95 años. Su hijo Orlando se declaró continuador de la posesión de Ramona en esa tierra ancestral sanavirona, pero falleció hace un año.
Quienes ahora se frotan las manos son los hermanos Scaramuzza, productores y empresarios rurales de Oncativo, que hace décadas intentan desalojar a la familia y que quieren quedarse con las tierras sin tener sentencia favorable firme.
«El campo de Ramona es zona roja y amarilla. El Gobierno de la Provincia, a través de la Dirección de Ordenamiento Territorial, colocó un cartel donde dice que no se puede hacer cambio de uso de suelo ni desmontar. Fue un acto muy importante porque viene a cuidar ese territorio», expresó María Victoria Gauna, abogada del MCC, una de las organizaciones que vienen trabajando y custodiando el terreno.
Las personas que acompañan la causa remarcan que en una provincia donde queda menos del 4% de monte nativo, es necesario y urgente más acciones concretas que comiencen a revertir esta situación.
«Ese lugar es un parche natural en esa zona del norte cordobés, que tiene grandes partes desmontadas. La intención es poder preservar ese lugar y que se pueda construir allí una escuela de agroecología para la soberanía alimentaria, que no beneficie a solo una persona, sino a toda la comunidad del territorio», concluyó la abogada Gauna.
*Por Ezequiel Luque / Imagen de tapa: Ezequiel Luque para La tinta.