Se debate un proyecto de ley para extender la licencia por paternidad
El domingo es el día del padre y quedó pegado al feriado puente del 20 de junio. Si contamos desde el domingo hasta el martes, son más días que la licencia por paternidad que está vigente en el país actualmente. A mediados de mayo, comenzó a discutirse el proyecto que propone la creación del Sistema Integral de Políticas de Cuidados y uno de los puntos es la ampliación y extensión de los regímenes de licencias parentales. Conversamos con Daniel Jones, integrante de la Campaña Paternar, quienes acompañan la iniciativa.
Por Redacción La tinta
La Ley n.° 20.744 de Contrato de Trabajo, vigente en el país desde 1974, establece solo dos días de licencia por paternidad. Descontando los trabajos en formas de precarización, que hoy abundan, como el régimen monotributista que está alejado de los derechos de la previsión social. Somos uno de los países en la región más retrasados en tema de licencias parentales, realidad que agranda la brecha de corresponsabilidad de cuidados en las crianzas, sostiene un modelo de familia tradicional y reproduce desigualdades en varios aspectos, que recaen siempre sobre las mujeres.
¿Cómo generar cambios profundos en las formas de paternar, que permitan roles que no sean sólo los que se han asignado históricamente a los padres como proveedores económicos y tengan más que ver con la responsabilidad en el cuidado y la división sexual del trabajo? Hay movimientos que son culturales y colectivos, otros personales y quizá lleven mucho tiempo, pero hay cambios que pueden allanar el camino y van de la mano de leyes y políticas concretas. No había pasado, hasta la actualidad, que los varones reclamen y demanden la extensión de sus licencias, y, en general, los derechos sexuales y (no) reproductivos ampliados fueron conquista de la organización y lucha feminista.
¿Todos los varones están dispuestos a cuidar? Lo que pasa en la actualidad no alcanzaría para afirmarlo, ni siquiera en el rol de proveedores, son extensos los reclamos por el cumplimiento de las cuotas alimentarias. Pero la sospecha es que la ampliación de las licencias puede tener efectos que vayan mejorando el piso material y simbólico en una equidad en las tareas de cuidados.
Conversamos con Daniel Jones, sociólogo, investigador y docente de la UBA, miembro del Instituto de Masculinidades y Cambio Social, e integrante de la Campaña Paternar, quien nos cuenta sobre el origen de la iniciativa: “La Campaña nació a comienzos del 2021 como un espacio de articulación entre cuatro organizaciones que estaban trabajando género y masculinidades, sobre todo, el trabajo con varones, y decidimos aunar esfuerzos para promover la ampliación de las licencias parentales. Nos organizamos y empezamos a hacer acciones desde las redes sociales, reuniones con referentes sindicales y, ahora, en el plano de lo legislativo, actividades de una organización en promoción de derechos que discute esta ampliación mediante la función de nuevas leyes”.
Desde el regreso a la democracia, se han presentado múltiples proyectos para modificar la Ley de Contrato de Trabajo. En mayo del año pasado, hubo un avance significativo cuando, desde el Ejecutivo, vía el Ministerio de Mujeres, Género y Diversidades de Nación, se envió el proyecto Cuidar en Igualdad, que contempla la creación de un Sistema Integral de Cuidados que incluye, a su vez, la modificación del régimen de licencias. La agenda de los cuidados es un tema que los feminismos vienen priorizando y empujando con mucha fuerza, porque es la base que sustenta una organización social desigual.
Desde hace un mes, la Cámara de Diputados, en el trabajo conjunto de la Comisión de Mujeres, Género y Diversidades, y la Comisión de Trabajo, están abordando casi 45 pre-proyectos de ley, relacionados a los regímenes de licencias, centralmente, las vinculadas a paternidad, maternidad o situaciones de adopción o nacimientos prematuros, y/o con alguna dificultad de salud.
Desde la campaña, explicaron que se pretende generar un piso legal de 30 días de licencia por paternidad obligatoria, remunerada e intransferible, y supone beneficios no solo para las personas que paternan, sino también para las madres e hijes, en el camino hacia mayores niveles de corresponsabilidad en las tareas de crianzas y cuidados por parte de las familias, el Estado y las empresas. Reconocen que la ampliación de las licencias parentales podría impactar en ofrecer mejores condiciones materiales para el involucramiento de los varones en las tareas de cuidado, desde el primer momento.
“Creemos que hay un vínculo a construir y consolidar con una mayor presencia, por eso, el tema de la campaña es más días para estar más presentes y eso significaría también un rebalanceo de la hoy desigual distribución de las tareas de cuidado que existe al interior -sobre todo- de las parejas heterosexuales y pensar la división sexual del trabajo de crianza de una manera más equitativa. El impacto también puede ser positivo para la vida de niños y niñas, que tienen derecho a ser cuidados y cuidadas por sus padres”, afirmó Jones.
La mayoría de los miembros de la campaña son padres y decidieron politizar sus paternidades, “eso significa que los problemas, desafíos y déficit que tenemos en el ejercicio de la paternidad los reconocemos como un problema que puede revertirse también con la intervención del Estado, la creación de políticas públicas, la promoción de acciones de parte de la sociedad civil, como es la propia campaña. Nos organizarnos colectivamente para demandar, somos padres activos, presentes, responsables, que reflexionamos también sobre nuestra paternidad, pero no hay nada excepcional en eso, hay muchos que ejercen su rol con muchísimo amor y entrega. La diferencia quizá es que nosotros decidimos darle un marco colectivo y político para demandar derechos, no solo para nosotros, sino para aquellos padres que vayan a venir y que necesitan estar más presentes esos primeros tiempos con un modo afianzar el vínculo y, sobre todo, de empezar a comprometerse de entrada con una tarea de crianza y de cuidado”, concluyó el sociólogo.
De aprobarse el proyecto presentado, quienes maternan pasarían a tener 126 días de licencia y quienes paternan, 30 días. Tanto en el sector público como privado, para trabajadores gestantes, no gestantes y adoptantes en relación de dependencia, monotributistas o autónomos/as. Será un avance para disponer de mejores formas de crianzas, habrá que ver qué uso hacen los varones de estos beneficios y si esto permite mover el amperímetro de la desigualdad en los cuidados.
*Por Redacción La tinta / Imagen de portada: La tinta.