La ternura en los animales de papel de María Debanne

La ternura en los animales de papel de María Debanne
31 marzo, 2023 por Inés Domínguez Cuaglia

A partir de la técnica de cartapesta, la artista cordobesa crea personajes misteriosos. Propone una tensión híbrida entre lo humano y lo animal, y elige como postura poética la ternura en las miradas que se cruzan, en el encuentro del espectador con sus esculturas. El mundo Debanne es maravilloso y sensible. En esta nota, te invitamos a conocerlo. 

Por Inés Domínguez Cuaglia para La tinta

Unos seres extrañamente tiernos me intrigan hace años. De ojos humanos y sensibles, cruzan miradas con quien los ve. Hace un tiempo no escribo de las cosas que me gustan tanto, de las que me devuelven un rato el entusiasmo por volver al taller, ensuciarme las manos, perder la noción del tiempo. Estas criaturas híbridas, su creadora y una catarata de coincidencias de la vida me traen por aquí.


María Debanne es la artista que, hace más de 20 años, lleva adelante un proceso creativo desde y con el papel. En el taller y en la docencia. Con las manos llenas de engrudo y ávida de pensamientos que dan sentido a este juego que mezcla lo animal con lo humano. Es que somos una mezcla, pienso, ella con sus seres de cartapesta da fe de eso.


Esta artista se dedica al collage digital desde hace tiempo y, desde hace más, a la cartapesta. Es docente y escenógrafa. También escribe increíblemente hermoso. Nació en Córdoba, pero vive hace unos cuantos años en Villa Rumipal. Cuenta que, a partir de su tesis de la licenciatura en Grabado, empezó a especializarse en el collage y que, paralelamente, trabajando con Lilian Mendizabal -reconocida por su trayectoria como escenógrafa-, llega a la técnica de la cartapesta. Por esa época y durante 7 años, dictó un taller de cartapesta en la Facultad de Artes; ese espacio le dio pie para afianzarse con el material y su enseñanza. 

arte-cartapesta-María-Debanne-6
(Imagen: María Debanne)

La cartapesta es una técnica que se basa en la superposición de capas de papel y pegamento. Papel, engrudo, papel. Algunos cuentan que se originó en Venecia, mejor dicho, en los preparativos de carnaval. Dicen que esta era la técnica elegida para hacer las conocidas máscaras venecianas. La cartapesta posibilita generar volúmenes resistentes y livianos, esto hace que sea elegida para construir escenografías teatrales también. Más cerca nuestro en el tiempo y en el espacio, los mexicanos pueden darnos cátedra. La famosa cartonería mexicana tiene en sus bases esta misma técnica: papel con papel para hacer objetos decorativos y artísticos.


“Es una técnica que a mí me fascina porque es accesible, no es tóxica y podemos trabajarla con lo que tenemos en casa. Nos lleva por el camino de reutilizar lo que tenemos disponible”, comparte María en comunicación con La tinta.


Debanne nos explica que, en un principio, fue todo un desafío desarrollar su proceso artístico con esta materialidad porque esta técnica siempre estuvo relacionada a objetos utilitarios y adornos. Y, ya sabemos, los prejuicios en el campo de las artes son moneda corriente.

Mi idea fue, en los inicios, hacer una búsqueda para trabajar con la cartapesta como escultura y que sea válida como obra. Fue un camino difícil porque los materiales que son más valorados, digamos, para la escultura son los materiales nobles. Y el papel siempre cuesta mucho, lo tiran abajo porque está el pensamiento de que, por ejemplo, se va a deteriorar”, dice la artista.

Lejos estamos de querer ser la yuta del arte. ¿Quiénes somos para decir qué material vale y cuál no para crear? ¿Quién dice qué es obra y qué no? Podríamos tener discusiones eternas, pero lo importante es decir, contar y, sobre todo, hacer. Y cuando digo hacer, pienso en un hacer sensible y empático, que acerque, que una, que haga lazos, que no se olvide, que conmueva.

“Mi modo de trabajo siempre es desde el material. Después le voy buscando la vuelta para poder llevarlo a la obra. Una obra que tenga también un concepto, una idea. La cartapesta es hermosa en ese sentido. Es una técnica que sugiere mucho desde el material”, explica María Debanne.

María recuerda que, hace 20 años, cuando empezó a trabajar con la técnica, lo hizo creando animales con caras humanas; después, humanos con rasgos animales, por lo que el carácter de híbrido siempre ha sido eje en su obra, afirma. Luego, vinieron las representaciones de las pieles como ropa o ropas como pieles. Debanne hace un juego de palabras-concepto en este punto.

En su obra, se encuentran dos conceptos: por un lado, la tensión del hibridaje que se genera entre lo humano y lo animal, y, por el otro, la ternura como postura poética y política.

arte-cartapesta-María-Debanne
(Imagen: María Debanne)

“Aparece la ternura como un elemento que genera empatía con el que ve la obra. La ternura de lo descubrible, de la mirada. La mirada es muy importante en los personajes, esa mirada humana de los animales genera un encuentro con el espectador. Eso me gusta y lo pienso como una decisión estética y poética”, explica la artista.

La obra de María Debanne muestra una coherencia exquisita entre el hacer y el pensar. Respetuosa del entorno, trabaja con materialidades sustentables. Su obra, totalmente influenciada por el paisaje, vincula lo humano con el espacio que habita. Y postula las pieles, los ropajes como aquello que marca nuestro estar en el mundo, como evidencia de lo salvajes y tiernos animales que podemos ser.

La artista es parte del colectivo artístico “Ochas colectiva”. Ella nos cuenta que, desde que es miembro de este grupo, su proceso creativo se afirmó en nuevos sentidos, gracias a las lecturas y construcciones de sentido que hacen juntas.

Por último, Debanne reflexiona en relación a cómo su obra se vio influenciada por el cambio de vida que involucró mudarse a Calamuchita. Vivir en un entorno más natural hace que el paisaje atraviese toda su práctica artística. “Durante mucho tiempo, disocié todas mis actividades como si fueran algo separado. Hoy, puedo decir que es todo parte de lo mismo. Soy en el paisaje. Soy en el espacio. Soy ocupando un lugar en este mundo. Y, a todo eso, lo voy volcando en estos personajes, un poco tiernos, un poco salvajes, un poco inquietantes”.

María Debanne nos convida seres extraños, llenos de ternura. Nos da la certeza de que un arte cercano, amoroso, sencillo y profundo es posible para todxs.

*Por Inés Domínguez Cuaglia para La tinta / Imagen de portada: María Debanne.

Palabras claves: Arte, Maria Debanne

Compartir: