Por amplia mayoría, Chile le dijo NO a la nueva Constitución

Por amplia mayoría, Chile le dijo NO a la nueva Constitución
5 septiembre, 2022 por Tercer Mundo

La nación trasandina se pronunció ayer en rechazo a una nueva Constitución que deje atrás la carta magna impuesta durante la dictadura militar de Augusto Pinochet.

Por Redacción La tinta

Por una amplia mayoría, les chilenes que este domingo participaron en el plebiscito sobre la nueva Constitución rechazaron el proyecto que, durante un año, se debatió en una Convención Constituyente. Ahora, el gobierno del presidente Gabriel Boric tiene como opción la convocatoria a un nuevo proceso constituyente. Según medios chilenos, esta iniciativa cuenta con un amplio consenso político, con la excepción de los sectores más conservadores.

El mismo domingo, a través de una carta, el mandatario convocó a los titulares de los partidos políticos chilenos a “dar continuidad al proceso constituyente”, mediante una reunión que se efectuará este lunes en el palacio presidencial de La Moneda. En la invitación, se llama a participar de “un espacio de diálogo transversal sobre los desafíos que debemos enfrentar como país para dar continuidad al proceso Constituyente”.

Según el Servicio Electoral de Chile (Servel), el Rechazo a la carta magna obtuvo el 61,86 por ciento (casi ocho millones de votos), mientras que el Apruebo alcanzó el 38,14 por ciento (casi cinco millones de sufragios).

Antes del referéndum, el Servel informó que 15.076.690 de ciudadanes estaban habilitades para emitir su voto en territorio nacional, mientras que 97.239 fueron convocades en el extranjero. Al ver el mapa chileno por regiones, el impacto de los resultados es mayor: solo ocho comunas en todo el país apoyaron el Apruebo.

Pasadas las 22 horas, Boric se dirigió al pueblo chileno con un discurso en el que llamó a discutir nuevamente el proyecto constitucional, aprendiendo de los errores y sumando las críticas.

“Chile no quedó satisfecho y ha decidido rechazar”, expresó el mandatario, que agregó: “Esta decisión de los chilenos y chilenas exige a nuestras instituciones y actores políticos a que trabajemos con más empeño, con más diálogo, con más respeto y cariño hasta arribar a una propuesta que nos interprete a todos, que nos dé confianza, que nos una como país”. Boric también se comprometió “a crear un nuevo itinerario constituyente que logre agrupar a una amplia mayoría”.

El presidente chileno reconoció que en el país existe un “malestar” que “sigue latente”, del cual el gobierno no puede olvidarse. “Sé que esperan respuesta y soluciones contundentes ante la inseguridad, la violencia en el sur, el déficit de vivienda, el aumento del costo de la vida, la reactivación de nuestra economía, las eternas listas de espera en salud, la calidad de educación y las bajas pensiones”, enumeró. A su vez, anunció «ajustes» en el gabinete de cara al nuevo panorama nacional.


El nuevo texto constitucional, de 178 páginas, consagra un «Estado social de derechos», la plurinacionalidad del país y establece un nuevo catálogo de derechos sociales en salud, aborto, educación y pensiones, con un marcado énfasis medioambiental. Para muches analistas internacionales, pero también constitucionales, la nueva carta magna sienta precedentes a nivel mundial en materia de género y medioambiente.


A su vez, el proyecto constitucional incluye límites a la figura presidencial y su capacidad de legislar, con un bicameralismo asimétrico que, en la práctica, implica la eliminación del Senado, una institución de 200 años de historia. También sostiene la autonomía del Banco Central y termina con derechos de propiedad sobre el agua entregados a perpetuidad en la Constitución vigente.

Pero su cambio más grande es romper con la Constitución impuesta durante la dictadura militar de Augusto Pinochet (1973-1990), de marcado corte neoliberal.

Como sucedió en los últimos años en los países latinoamericanos que impulsaron reformas o cambios constitucionales para modernizar las cartas magnas correspondientes, en Chile también se vivió una fuerte campaña de fake news contra el proyecto constitucional.

Desde diferentes sectores, antes de conocerse los resultados finales, comenzaron a difundirse declaraciones con respecto al plebiscito. Flavia Torrealba, presidenta de la Federación Regionalista Verde, manifestó estar impactada y triste, “pero reconocemos naturalmente la derrota. Va a haber un momento para analizar todos esos factores. Creemos que es un momento de tranquilidad ahora, de buscar los espacios para la reflexión y de encontrar las razones y la voz de este pueblo chileno que se manifestó tan contundentemente”.

“La primera lectura que tenemos de la Federación Regionalista Verde es que, en este país, había que ofrecer institucionalidad y creemos que, a lo mejor, hay que revisar la estrategia que se usó –agregó-. No necesariamente fueron ellos, tal vez los partidos tuvimos que haber cumplido un rol más significativo. El presidente de la República va a ser un símbolo de la unidad en nuestro país, el presidente Boric va a ser quien llame a la unidad nacional y naturalmente vamos a estar disponibles a apoyarlo”.

En tanto, Carmen Hertz, diputada del Partido Comunista (PCCH), dijo a la prensa: «No teníamos la vocería para desbancar las fake news. Esto es un retroceso, no para Apruebo Dignidad (AD), sino para la sociedad chilena».

Del lado de enfrente, la senadora Ximena Rincón, de la Democracia Cristiana (DC), afirmó que la jornada de votación fue “ejemplar” y “habla de lo que somos como país”. “Cuando nos convocan, respetamos las reglas y no nos saltamos camino a que no son democráticos”, estimó. “No cabe duda que los chilenos quieren una nueva Constitución, pero que nos convoque a todos, una buena y nueva Constitución. Eso nos ha pedido hoy la ciudadanía, hoy se abre una nueva oportunidad. Chile lo merece”, enfatizó la legisladora.

Chile mesas de votacion constitucion la-tinta

*Por Redacción La tinta / Foto de portada: Martín Bernetti – AFP

Palabras claves: chile, Constitucion, Gabriel Boric

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