Seis segundos

Seis segundos
1 abril, 2022 por Redacción La tinta

Luis Seroni nació en Quilmes, Buenos Aires, en 1962. A los 18 años, ingresó al Regimiento 7 «Coronel Conde» en La Plata para cumplir con el servicio militar obligatorio. Un año después, se encontró en una guerra. 37 años después, comenzó a escribir en un cuaderno todo lo que recordaba de su paso por la guerra de Malvinas. Esos cuadernos se transformaron en su primer libro, «Dejando el silencio atrás» (2019). También escribió «Rápido La Plata» (2020) y «Baobab» (2021).

Por Luis Seroni

El orgasmo promedio de un hombre es de seis segundos, también lo que tarda un meteorito en cruzar el cielo. Cada seis segundos se vende un Chevrolet y once bebés nacen en el mundo.

Pasó en abril, en un tiempo que todavía no podemos entender, a pesar de que la fragata estaba a 20 km de las islas, igual se escuchó el ruido de salida del proyectil, seis segundos sería lo que se tardaría en llegar a tierra. El latido del corazón de Carlitos se detuvo en ese instante, su respiración se aceleró, sus dedos índices taparon sus oídos. Todo eso pasó en dos segundos, el tercer segundo pensó en su madre, su padre, su hermanito; los recordó felices, riendo, cómo serían sus vidas cuando recibieran la noticia, entonces su corazón se estremeció.

En el cuarto segundo rezó, se juró y se re juró que iba a cambiar, que iba a pedir ayuda, los segundos eran eternos. En el quinto segundo, numeró las cosas que no había vivido, pensó que no conocía el mar, que nunca vio nevar, jamás se había enamorado, no tendría ni hijos ni nietos. En el último segundo, vio como en una película, en cámara ligera, distintas imágenes de su corta vida: vio la ternura de su madre cuando curó la primera frutilla en su rodilla, el primer gol y la cara de felicidad de su abuelo, por último, su primer beso contra la pared esa tarde de verano.

La bomba cayó lejos del pozo de Carlitos.

Pero Carlitos jamás volvió a ser Carlitos.

*Por Luis Seroni / Imagen de portada: Ana Medero para La tinta. 

Palabras claves: Guerra de Malvinas, Luis Seroni

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