Tensión entre Chile y Argentina por la plataforma continental
El Estado chileno planteó el reclamo de un territorio marítimo que ya había sido designado para Argentina, lo que generó una fuerte tensión diplomática entre ambos países.
Por Julián Pilatti para ARGMedios
El pasado 28 de agosto, un comunicado de la cancillería argentina alertó sobre una medida del gobierno de Chile que, de forma unilateral, buscó “proyectar la plataforma continental” hacia el este. Se trata de la famosa “medialuna”, ubicada bien al sur entre ambos países, y que tiene más de 5.000 kilómetros cuadrados.
Lo cierto es que el reclamo chileno no condice con el Tratado de Paz y Amistad celebrado entre ambos países, en 1984, ni con su respectiva resolución de la ONU. Semejante aventura soberana despertó algunas conjeturas respecto a la verdadera intención del presidente Sebastián Piñera, quien atraviesa su peor año político y se prepara para abandonar el Palacio de la Moneda.
En diálogo con ARGMedios, la Subsecretaria de Asuntos Internacionales de Ushuaia, Cecilia Fiocchi, explicó la importancia del territorio en disputa y qué medidas se podrían tomar para destrabar el conflicto.
“En primer lugar, no hay una disputa de soberanía, sino que justamente la Argentina aprobó, en 2020, su nueva delimitación de la Plataforma Continental a través de la modificación de la ley de espacios marítimos. Argentina presentó a la Comisión para la Plataforma Continental de la ONU un trabajo de más de 20 años para demarcar definitivamente su Plataforma”, introdujo Fiocchi. Vale aclarar que la Convención de Naciones Unidas respecto al Derecho del Mar (CONVEMAR) determina que ese es un derecho que tienen los Estados ribereños.
“La República de Argentina llevó adelante investigaciones para comprobar que la continuidad de su plataforma geológica continental se da hasta la milla 350. Esto fue aprobado por la ONU y el Congreso de la Nación, de forma unánime”, aclaró la Subsecretaria, que también se ocupa de temas relacionados a Malvinas y la Antártida.
Por todo esto, Fiocchi descartó que Chile esté realizando un reclamo y lo califica, hasta ahora, como “una pretensión”. “No hay un conflicto aún y esperamos que, a través del diálogo, la diplomacia y el respeto al derecho internacional, se pueda resolver”, matizó.
Pero, ¿cuál es la importancia estratégica de este amplio sector marítimo, más allá de la lógica defensa de la soberanía? Para Fiocchi, la importancia de este territorio tiene que ver “no solo con la ubicación geoestratégica en término de comunicación entre el océano Pacífico y el Atlántico, sino por los recursos que se encuentran en el subsuelo de este territorio. En términos generales, la importancia es geológica, económica y científica”, sintetiza.
Por todo esto, desde el lado argentino, aspiran a resolver la situación de una forma diplomática. En el peor de los escenarios, se podría buscar una referencia mundial para que oficiara de “árbitro” en el conflicto, algo que no creen probable.
“El Tratado de Paz y Amistad es el instrumento normativo que puso fin a la controversia con el Canal de Beagle y delimitó la soberanía y jurisdicciones de cada uno de los Estados en este espacio marítimo particular”, explica Fiocchi. Y agrega: “El gobierno cree que podrá solucionar el problema con el diálogo y la buena fe de ambas partes, pero que, si eso no fuera suficiente, queda la herramienta del arbitraje, para que alguna entidad internacional pueda intervenir sobre el tema. En el último conflicto diplomático con Chile, quien arbitró fue el Papa Juan Pablo II”.
Pero del lado chileno, la postura del presidente Sebastián Piñera se mantiene intransigente, por lo menos, hasta ahora. Este fin de semana, en diálogo con la prensa local, el mandatario aseguró que “lo que Chile está haciendo es ejercer su derecho y declarar su plataforma continental”.
“Lo que estamos haciendo como gobierno es un proceso de continuidad de la política exterior y esperamos en noviembre enviar a la Comisión de Límites de la Plataforma Continental de las Naciones Unidas la plataforma continental al oeste de la península antártica”, amplió el mandatario.
“Tendremos que ver la forma de resolverlo y el primer camino es el diálogo. Estamos absolutamente abiertos y así lo hemos conversado con el presidente (Alberto) Fernández cuando visitó Chile, para buscar caminos de diálogo para resolver este tema. Si no llegáramos a un acuerdo, existen muchos otros instrumentos a nivel internacional”, manifestó el presidente chileno.
Desde el 2019, Piñera viene sufriendo una caída estrepitosa de su imagen política, tras las históricas movilizaciones que desencadenaron en un referéndum popular y una nueva Asamblea Constituyente.
La respuesta de la cancillería argentina fue tajante: “La medida intentada por Chile pretende apropiarse de una parte de la plataforma continental argentina y de una extensa área de los fondos marinos y oceánicos (…) La citada pretensión chilena no es aceptable para la República Argentina y plantea una situación que corresponderá resolver a través del diálogo en defensa de los derechos argentinos; de acuerdo a la histórica hermandad de nuestros pueblos y el derecho internacional”.
*Por Julián Pilatti para ARGMedios / Foto de portada: Sputnik