Taser: la mentira de la no letalidad
Por Frente Antirrepresivo en Lucha
Los disparos efectuados por el oficial Facundo Nahuel Amendolara al cuerpo del músico Santiago Moreno Charpentier, más conocido como “Chano”, vuelve a ser la excusa de aquellos sectores que buscan implementar un nuevo tipo de armas como respuesta al desmantelamiento que tantos otros sectores estatales vienen sufriendo, como lo es el tema de la salud mental. En este caso, y tal y como viene siendo una costumbre desde el comienzo de las acciones presentadas por el gobierno nacional y los diferentes gobiernos provinciales, son nuevamente las fuerzas represivas las que salen como respuesta a un problema de salud.
Cabe recordar que la ex ministra de Seguridad Patricia Bullrich hizo utilización y promoción de las armas taser durante el gobierno de Mauricio Macri, dotando a las fuerzas federales de las mismas. Con el claro repudio de diferentes sectores organizados que salieron a responder sobre esta política represiva fue que se logró la derogación de la utilización de las taser en diciembre de 2019, cuando ya había asumido Sabina Frederic a dicho ministerio.
Nuevamente, se pone en evidencia que la lucha contra las políticas represivas debe ser una constante, ya que, desde el mismo sector político de Sabina Frederic, más específicamente su colega de la provincia de Buenos Aires, Sergio Berni, vuelve a tomar un caso como el de “Chano” Charpentier para sacar a relucir su intención de implementación de este tipo de picanas portátiles, bajo la mentira de que son armas no letales, esta vez con el apoyo explícito de otras personas del Frente de Todos, como el precandidato a diputado nacional, Leandro Santoro, aunque suavizando el tono diciendo que “no son para casos como el de Chano”.
Señalamos también que Facundo Amendolara, el bancado por Berni, fue imputado por lesiones gravísimas luego de dispararle a Chano, lo que motivó que se reuniera con el asesino Chocobar, el bancado por Bullrich, que dijo que “Amendolara había actuado correctamente”.
Lo que ninguno menciona, ya sea Patricia Bullrich del PRO, que volvió a proponer este tipo de armas, o Sergio Berni del Frente de Todos, es la mentira de que hay armas no letales. Tanto Walter Bulacio, asesinado a golpes de tonfa en Buenos Aires, como Carlos Fuentealba, asesinado en Neuquén con un disparo de gas lacrimógeno, son claros ejemplos de que lo letal es la policía y que la utilización de cualquier objeto en manos de una fuerza represiva es letal. Más cuando hablamos de armas taser, que son picanas capaces de dar descargas de 5.000 voltios. Ninguno de los promotores de las taser ha hablado de que efectivamente son varias las personas asesinadas por estas descargas en los países donde son utilizadas y que son de un riesgo importantísimo para personas que sufren problemas cardíacos, embarazadas, menores de edad, personas de edad avanzada, personas con problemas de consumo y personas con afecciones en su salud metal, ni de las lesiones que pueden provocar en ojos, músculos, cabeza y órganos internos, provocando incluso la muerte súbita.
Son los mismos de siempre buscando el voto bala, el voto de los sectores más reaccionarios de la sociedad, y que ante cualquier situación encuentran en la represión una respuesta. Es por ello que, ante este tipo de avances represivos, debemos continuar la lucha de manera colectiva y organizada.
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*Por Frente Antirrepresivo en Lucha / Imagen de portada: Frente Antirrepresivo en Lucha.
