David Moreno: la memoria no es un espacio en blanco
Semanas atrás, lxs nuevxs dueñxs del local donde la Policía de Córdoba asesinó a David Moreno blanquearon el significativo mural que, en 2016, se había realizado en su memoria. Familiares, vecinxs de Villa 9 de julio y diversas organizaciones hicieron un comunicado y solicitaron a lxs propietarixs el permiso para rehacerlo, apelando a que la pintura simboliza la memoria activa del barrio y es un espacio de encuentro y de lucha por todxs lxs asesinadxs en el Argentinazo del 2001.
Por Redacción La tinta
David Moreno tenía 13 años. En la triste jornada del 20 de diciembre de 2001, el niño que había ido a ver qué sucedía frente al supermercado Mini Sol en Villa 9 de julio (Argüello) fue asesinado por balas de plomo de la Policía de Córdoba. El Gobierno Provincial había ordenado reprimir los intentos de saqueos.
En 2016, familiares, vecinxs, organizaciones sociales del barrio y diversas organizaciones políticas y de Derechos Humanos realizaron un mural por los 15 años del episodio, en el preciso lugar donde mataron a David, en la pared donde funcionaba el mini mercado y que, desde el 2001, tiene problemas judiciales. El espacio de Justicia por David Moreno repudió la decisión y publicaron un comunicado en el que explican que, en la actualidad, el inmueble se encuentra en manos de una nueva dueña y un apoderado, “quienes aludieron que el contenido del mural era un hecho pasado y que ahora molestaba a la fachada del mismo, así y sin preguntar sobre la historia del mural y sin importarles absolutamente nada”.
“Lo blanquearon de pura ignorancia y falta de compromiso social, porque no desconocían lo que había sucedido en ese lugar. Así mismo, lo tapan, desvalorizando el sentido social que tenía y dándole más valor a los intereses económicos por una posible venta y en palabras textuales del encargado del inmueble: este mural arruina la fachada”, cuenta a La tinta Marta Filgueiras, del Movimiento Pueblo, Lucha y Trabajo.
“El mural para el barrio, familia y compañerxs de militancia se realizó para visibilizar el pedido de justicia… a partir de haber pintado ese mural, también se reactiva la lucha por justicia, es un espacio de memoria viva, activa y de lucha que interpelaba a la sociedad toda y generaba interrogantes en las nuevas generaciones, el mural, además de expresar los hechos sucedidos en todo el país, expresaba la ternura de un niño como era David. Decimos que le dimos vida a un muro que no decía nada, un lugar abandonado con pastizales y escombros”, agrega Filgueiras.
Desde Justicia por David Moreno, afirman que el mural es necesario para la memoria colectiva y la identidad del barrio, y están solicitando la posibilidad de rehacerlo en la misma pared, por lo significativo del emplazamiento: “ Aquel mural trascendía una fecha y una lucha puntual. Aquel mural representaba el grito de lxs jóvenes que son perseguidxs, criminalizadxs y judicializadxs por el Estado, el grito de lxs pibxs que ya no están porque fueron desaparecidxs y asesinadxs por las fuerzas represivas. En ese pedazo de pared, estaba pintada nuestra denuncia contra los gobiernos que explotan, hambrean y reprimen al pueblo trabajador”.
A casi dos décadas del asesinato de David, hay un pedido colectivo y con múltiples adhesiones, que apela a la reflexión de lxs nuevxs dueñxs del local para poder rehacer la pintura, para volver a ocupar un muro que congrega a la memoria colectiva “y se alimenta año tras año, conmemorando lo sucedido en nuestro país y en el barrio”, se refuerza en el comunicado.
“Ese pedazo de pared que para nosotrxs es historia viva. Pedimos que nos permitan realizar el mural nuevamente, entendiendo que, mientras sea privado, pueden tomar las decisiones que quieran… pero apelamos al sentido social de lxs propietarixs”, concluyó Filgueiras.
Por Redacción La tinta / Imagen de portada: A/D.
