Arrancó el torneo de fútbol femenino de AFA
Pases, traspasos, ascensos, descensos, directivos versus jugadoras. Casi 200 futbolistas firmaron contrato. El torneo de fútbol femenino de AFA comenzó demorado, sin cumplir los plazos que la propia organización había estipulado. Habrá cuatro partidos televisados por fecha.
Por Iván Barrera para Marcha
Pasaron cuatro meses desde que la UAI Urquiza se coronó campeona del último campeonato amateur del fútbol femenino de la AFA. Cuatro meses cargados de partidos de la selección y de idas y vueltas para definir qué será de este primer campeonato semiprofesional de la historia del fútbol femenino. Con las jugadoras poniéndole el cuerpo una vez más, parece terminar de definirse el arranque del torneo.
Se viene el campeonato
El primer campeonato semiprofesional de la AFA viene haciéndose rogar. Durante el mes de julio, Jorge Barrios, Presidente del Fútbol Femenino, había definido que el 1 de agosto se iba a realizar la presentación del nuevo campeonato y que exactamente un mes después iba a jugarse la primera fecha. No se cumplió ningún plazo y el torneo no arrancó. Luego de idas y vueltas, este fin de semana, un mes y medio después que la fecha pautada originalmente, el torneo de fútbol femenino arrancó.
El nuevo campeonato cuenta con 17 equipos que jugarán todos contra todos y luego se dividirán en dos zonas: zona campeonato para los equipos que salgan en las primeras 8 posiciones, y zona descenso para los restantes. En cuanto a los equipos que lo disputarán, hay varias novedades. Por un lado, Atlanta y el Deportivo Morón ya no serán parte de la Primera División, ya que descendieron la temporada pasada. En su lugar se sumarán Gimnasia y Esgrima de La Plata y SAT (club vinculado al sindicato SATSAID). La otra novedad es que se suma a la primera Rosario Central, el primer equipo por fuera de la ciudad y la provincia de Buenos Aires que disputará este torneo.
¿La buena? Cuatro partidos por fecha serán televisados. A su vez, todos los partidos deberán contar con soporte para la prensa y para el público, lo que significa que ya no deberían disputarse los partidos en canchas auxiliares y de entrenamiento. ¿La mala? La señal que transmitirá los partidos será TNT Sports, señal que se incluye en el pack fútbol de cada cable operador.
El campeonato arrancó el viernes con dos partidos televisados en canchas profesionales: Villa San Carlos recibió a Rosario Central (1-5) y Gimnasia hizo lo propio con Huracán (2-0). El sábado Platense recibió a Racing (1-5) y ya el día domingo Estudiantes enfrentó como local a Defensores de Belgrano (3-1) y SAT hizo de local frente a El Porvenir (8-1).
La acción continúa el martes a las 15:10hs con el superclásico. Hasta el domingo, la información oficial señalaba que Boca recibiría a River en el complejo Pedro Pompilio, en una de las canchas auxiliares de xeneize. Sin embargo, en las últimas horas del fin de semana se confirmó que clásico entre ambos equipo se jugará la Bombonera, tal y como lo hacen los planteles masculino de primera. La fecha sigue ese mismo día con Lanús recibiendo a San Lorenzo a las 15:30hs y finaliza el miércoles cuando debute el campeón, la UAI Urquiza, enfrentándose a Independiente a las 15.30hs
Pioneras en el profesionalismo
Por primera vez en la historia del fútbol argentino tendremos jugadoras con contrato, percibiendo un salario y ostentando de todos los derechos que cualquier trabajo formal conlleva. Al momento, son más de 180 las jugadoras que pusieron el gancho en su primer contrato profesional y se espera que este número alcance los 200 en este campeonato.
Según este primer reglamento, para participar de la primera división se debe contar con ocho contratos profesionales. Sin embargo, muchos clubes han optado por superar ampliamente esa cantidad. Entre ellos se destacan Boca con 21 contratos profesionales, River con 18, San Lorenzo con 18 y la UAI Urquiza con 15.
Las pibas contra Goliat
Esta pausa entre campeonatos también fue protagonistas de hechos nefastos. El club Real Pilar participó en dos ocasiones de la segunda división de la AFA. En ambas ocasiones llegó a disputar la final por el ascenso a la máxima categoría y solo las separó de la gloria un gol. Durante julio de este año, la dirigencia le informó al cuerpo técnico vía mensajito de Whatsapp que ya no continuarán con el fútbol femenino. Con excusas presupuestarias infundadas y que era necesario priorizar las instalaciones para el masculino, las pibas se quedaron sin fútbol. La mayoría de ellas tuvo que correr rápidamente a buscar club y reubicarse en otras instituciones. Muchas de ellas disputarán la máxima categoría.
Villa San Carlos fue otro club que atentó contra el fútbol de las pibas. El equipo participa del torneo hace 8 años, en los que jugó 6 veces en primera y se disponía a disputar su 7° campeonato. Sin embargo, ante la necesidad de presentar los ocho contratos profesionales para disputar la máxima categoría, los dirigentes decidieron que el equipo descienda una categoría para así mantener el amateurismo. Aun contando con el apoyo presupuestario que la AFA otorga para solventar los contratos, los dirigentes priorizaron desprenderse del femenino.
Las jugadoras no se lo dejaron pasar. Mientras otros equipos se concentraban en la pretemporada, jugaban amistosos y concentraban, las jugadoras de Villa San Carlos salieron a buscar sponsor para poder autofinanciarse los contratos y la inversión que acarrea la profesionalización. Enviaron petitorios a la AFA solicitando extender los plazos legales y se hicieron cargo de toda la burocracia. Hoy, las villeras tienen confirmada su participación en primera. Gracias a las jugadoras, nunca a los dirigentes.
Por Iván Barrera para Marcha