¿»Reperfilar» la deuda o Default Selectivo?
Por Ignacio Vila para Revista PPV
El miércoles por la tarde, el recién asumido Ministro de Economía, Hernán Lacunza, brindó una conferencia de prensa anunciando una serie de medidas ligadas a la situación financiera de nuestro país. La introducción de su presentación hizo eje en equilibrar las culpas entre oficialismo y la oposición: la responsabilidad sería igual tanto de los que han tomado las decisiones económicas, como de los que no han tomado ninguna. Más allá de esta caracterización, el mensaje del Ministro fue: es necesario frenar el dólar, y es necesario dar un mensaje común del gobierno y la oposición hacia los acreedores para darles la tranquilidad de que las deudas serán pagadas. En fin, la introducción buscó dar certidumbre, ¿lo habrá logrado?
La presentación difundida por el Ministerio muestra un diagnóstico en el cual se puede ver la pérdida de confianza en la economía argentina.
En primer lugar, se observa la explosión del Riesgo País que en las últimas semanas pasó de los 800 a los más de 2000 puntos.
En segundo lugar, se mostró el empeoramiento del BONAR 2020, un bono emitido por Argentina en dólares, cuya cotización cayó mas de un 30% en el último mes.
Por último, se difundió un gráfico en el cual se muestra el nivel de renovación de las LETES durante el 2019, exhibiendo el completo fracaso de las últimas dos licitaciones. Es decir, nadie quiso quedarse con Letes.
En fin, el diagnóstico del Ministro tuvo que ver con la aceptación de que todos los actores económicos, nacionales y extranjeros, perdieron por completo la confianza en la economía nacional. De acuerdo al mensaje del Gobierno Nacional que emitió Lacunza en conferencia de prensa, esto se debió un poco a errores propios y, otro tanto, debido a los dichos e incluso a los tweets de los principales dirigentes opositores.
A partir de este diagnóstico y del pedido de colaboración a la oposición surgieron las propuestas. La primera medida se trata de un cambio en los plazos de pago a los tenedores institucionales de Lecap, Letes, Lecer y Lelinks. Estos acreedores pasarán a cobrar su dinero de modo diferente al acordado. En lugar de cobrar el 100% de su valor en el plazo pactado, cobrarán sólo un 15%, a los 3 meses un 25% y el 60% restante a los 6 meses. Se trata de un refinanciamiento de unos 10 mil millones de dólares.
Se aspira a dar un poco de aire fresco a la reservas internacionales, y se pretende dar una muestra de que el Banco Central tiene aún más fondos para continuar enfrentando la corrida bancaria.
El segundo anuncio hizo referencia a una elevación al Congreso de la Nación de un proyecto de ley que provea las herramientas necesarias para promover “un reperfilamiento voluntario de vencimientos de capital bajo jurisdicción local, sin quita de capital ni intereses y con la sola extensión de plazos”. La tercera medida estuvo vinculada a la renegociación de los plazos de los bonos emitidos bajo legislación extranjera, para lo cual comenzarán a tener reuniones con representantes de bancos.
Por último, anunció que se reunirán nuevamente con el FMI para “reperfilar” la deuda, teniendo en cuenta la existencia de fuertes vencimientos durante el período 2021-2023. La idea es patear para adelante la deuda, para que no sea tan difícil para el próximo gobierno hacerse cargo de estos pagos. Las propuestas, al fin y al cabo, se parecen mucho entre ellas: estirar los plazos de pago de diversas deudas que tiene el país frente a diversos actores económicos.
Finalmente, se mostraron indicadores positivos de la Argentina, intentando demostrar la ausencia de motivos estructurales reales para la incertidumbre actual. Por ejemplo, las mejoras en la Cuenta Corriente así como en el Resultado Primario.
Luego, el repunte en el tipo de cambio real multilateral, con la idea de mostrar que ya no existe atraso cambiario, y que el valor de nuestra moneda se encuentra equilibrado y no se necesita una nueva devaluación.
Finalmente, y como factor más importante, se mostró el nivel actual de reservas, que se encuentra en uno de los niveles más altos de los últimos 15 años. El mensaje intentó ser el siguiente: hay reservas suficientes para enfrentar cualquier corrida bancaria.
En diálogo con Revista PPV, diversos economistas no han mostrado una postura unificada. No hay claridad ni acuerdo en las posibles consecuencias de los anuncios del miércoles. Algunos han asegurado que se trata de un default selectivo, debido a lo detallado en la primera medida de Lacunza y creen que los bonos argentinos tendrán un mal momento y que el dólar seguirá subiendo. Otros recomiendan esperar a la reacción de los mercados, y otros creen incluso que los bonos argentinos pueden subir y que habrá inversores que los elegirán aprovechando sus bajos precios. De todas maneras, la mayoría es pesimista y no cree que las medidas tomadas alcancen para generar certidumbre, confianza y estabilidad en el corto plazo.
Como ya ha demostrado la historia, las medidas que buscan regular mercados suelen ser exitosas cuando la situación es ventajosa, pero ante escenarios adversos estas medidas difícilmente tengan el resultado deseado. Una vez perdida la confianza y desatada una corrida cambiara con pocos precedentes, será difícil encontrar ideas que logren poner un freno a la situación. Lamentablemente, desde Revista PPV, hemos advertido en reiteradas oportunidades la inviabilidad del modelo económico macrista y hoy estamos ante la presencia de nuestras peores predicciones. La bomba de incertidumbre generada por Macri y su equipo económico echó más leña al fuego y los resultados no van a ser felices.
* Por Ignacio Vila para Revista PPV