Las deficiencias de la salud pública llegaron a la Justicia
La llegada del invierno acentúa el crecimiento de las enfermedades respiratorias en la provincia de Córdoba y, paralelamente, los hospitales se encuentran desbordados, dado que no cuentan con la estructura necesaria. Ocho familias necesitadas de acceder a camas de terapia intensiva para sus hijos recurrieron a la Justicia y los casos derivaron en dos amparos y una medida cautelar.
Por Desafíos Urbanos
La llegada del invierno acentúa el crecimiento de las enfermedades respiratorias en la provincia de Córdoba y, paralelamente, los hospitales y los centros de salud se encuentran desbordados, dado que la amplia demanda no tiene una estructura en condiciones para la atención de los usuarios.
La cantidad de internaciones se duplicó con respecto al primer cuatrimestre de 2019 y existen múltiples dificultades, como la falta de disponibilidad de camas, abandono de la cobertura médica y faltante de personal.
Los espacios más críticos son la Unidad de Cuidados Intermedios (UCI) del Hospital Pediátrico del Niño Jesús, que se encuentra cerrada desde inicios del año pasado; el Hospital Neonatal, donde sólo funcionan 26 de las 33 unidades de terapia intensiva, dos de las cuatro unidades de trabajo de parto de recuperación, 20 de 24 camas del internado común y 20 de 24 camas de internado por embarazo de alto riesgo; el Hospital Misericordia, donde funcionan siete de las 20 camas comunes, cuatro de las 16 de cuidados intermedios y cuatro de las 12 de terapia intensiva; y el Hospital San Roque nuevo, donde sólo funciona una de las dos terapias.
Las causas son variadas: desde la reducción de la atención, producto de la baja demanda en verano y otoño, pasando por el recorte de horas de trabajo y de personal, a la utilización de espacios de alta complejidad para internaciones simples, la falta de camas comunes y de terapia intensiva. A esta situación, se le suman las atenciones limitadas en el Hospital Córdoba, el Hospital de Niños y la Casa del Joven. Desde el Ministerio de Salud, comandado por Francisco Fortuna, no hubo respuestas inmediatas, sino recién después de diversas presentaciones judiciales por parte de distintas familias afectadas.
Los amparos surgieron a partir de que ocho familias necesitaron acceder a camas de terapia intensiva, porque sus hijos cursaban graves cuadros respiratorios. Así, recurrieron a la Justicia y los casos derivaron en dos amparos y en una medida cautelar.
Los mismos fueron presentados por Eloísa Sacco, asesora en lo Civil y Comercial del 10° Turno, y la jueza en lo Civil y Comercial de 43ª Nominación, Mariana Liksenberg. Por su parte, las autoridades sanitarias de la Provincia aseguraron que a esos niños nunca les faltó asistencia y advirtieron sobre los riesgos de judicializar problemas de salud.
Luego de la judicialización, desde el Ministerio de Salud, emitieron un informe asegurando que se cumple “ampliamente con la demanda, con todas las unidades críticas y camas comunes. No hay restricciones en ningún servicio” y anunciaron el refuerzo de todos los servicios para afrontar la suba de la demanda en la temporada de invierno y la continuidad de la campaña de vacunación antigripal. Las medidas de protesta, en algunos hospitales públicos, se retomaron días atrás, debido a que trabajadorxs de la salud reclaman por la falta de personal y la escasez de disponibilidad en las camas de internación.
*Por Desafíos Urbanos