Pioneras de la revolución
Un 25 de mayo de 1965, Centro Cultural Alberdi y Tigre se midieron en un emblemático partido de fútbol femenino jugado en cancha de Estudiantes. La entidad riocuartense fue uno de los primeros equipos de la provincia, mientras que el club de Victoria presentó a cinco futbolistas que disputaron con la Selección Argentina el histórico Mundial de México 1971.
Por Retruco
“Nos dice que no sufre ninguna vergüenza ante el público, ya que considera al fútbol un deporte apasionante, que las mujeres no pueden dejar de practicarlo ni sustraerse a su influjo”. Las sensaciones de Luisa Díaz, en una nota publicada el 19 de mayo de 1965 en el Diario La Calle, trascienden el tiempo, se convierten en atemporales y adquieren una total vigencia. La, por entonces, arquera de 27 años fue titular en un partido emblemático para la historia del fútbol femenino de Río Cuarto y región.
Un 25 de mayo de 1965, Centro Cultural Alberdi perdía 3 a 0 frente a Tigre en el estadio de Estudiantes. Gloria “Betty” García anotó los tres goles del equipo porteño que, por entonces, realizaba giras exhibiendo su potencial por todo el país. “Qué lindo recuerdo ver esa foto. En el entretiempo, me cargaba el técnico porque no hacía goles, pero después pude hacer muchos”, narra la goleadora del encuentro en diálogo con el colega David Pedraza.
La visita del club de Victoria adquiere un doble tinte histórico. El estadio de Estudiantes, con una multitud en las tribunas, fue escenario de un duelo entre pioneras del fútbol femenino a nivel local y nacional. Centro Cultural Alberdi fue uno de los primeros equipos conformados en la provincia de Córdoba. Las “mercedarias” tuvieron su origen en 1964 y, a partir de entonces, formaron un numeroso plantel que paseaba su fútbol por la región. Dos meses antes del choque ante cuadro porteño, la entidad riocuartense estuvo presente en Alejandro Roca en donde sus equipos (uno denominado “Celeste” y el otro llamado “Blanco”) jugaron un partido amistoso. El 11 de julio, los dos representativos de Alberdi se midieron en cancha de Belgrano de Coronel Moldes, con una recaudación de 61.800 pesos. Un fragmento de la nota del Diario La Calle contextualiza lo que representaba el advenimiento de la mujer en el fútbol, siendo un golazo a conceptos arcaicos: “Mucha gente se dio cita en el campo de deportes aludido, llevado por la curiosidad de presenciar la práctica del más popular de los deportes por genuinas representantes del sexo débil”.
Por su parte, Tigre fue considerado uno de los mejores team del país en la década del ‘60 y, entre sus filas, estaban García, Blanca Brúccoli, Eva Lembessi, Zulma Gómez, Zunilda Troncoso, quienes integraron la Selección Argentina que disputó el primer Mundial de fútbol femenino, en México 1971. Precisamente, el pasado 24 de abril, el Senado de la Nación –organizado por la comisión de Deporte y la Banca de la Mujer- reconoció a las futbolistas (renombradas como Las Pioneras) que defendieron los colores del país en tierras mexicanas.
Jugar sin miedos
Luisa Díaz –con inicios futbolísticos en el Sportivo Río Cuarto- tuvo un dedo de su mano enyesado hasta días previos al esperado encuentro. La arquera se lesionó en uno de los últimos entrenamientos y, sin miedo, dijo presente en el estadio “celeste”. Otra evidencia del coraje la brindó María Catalina Torres en una nota al Diario La Calle, publicada el 19 de mayo de 1965: “Con curiosidad, le preguntamos si no tiene temor de cabecear. Nos manifiesta que no, y que casi ninguna integrante del plantel lo tiene”. Así se despachó la jugadora de 13 años, la más joven del aquel plantel de Alberdi, rompiendo prejuicios previo al compromiso frente a Tigre.
Centro Cultural Alberdi tenía a su propia crack: Mercedes Luna. Sus compañeras la apodaron “Pelé” en referencia al astro brasileño que, por entonces, era considerado el mejor del mundo. “Lo primero que me genera es una gran emoción. Recuerdo la cancha de Estudiantes llena de gente, estaban mi familia y amigos, siendo que, por primera vez, se jugaba un partido de fútbol femenino ahí”, describe la atacante en diálogo con Al Toque Deportes. Y agrega: “En ese momento, para nosotras, era una ilusión enfrentar a un equipo de Buenos Aires, representaba algo importante porque el fútbol femenino no se conocía como ahora y, con el tiempo, lo tomo como una gran satisfacción de haber formado parte de ese partido”.
“Pelé” recuerda que “los delegados de Tigre me quisieron llevar ese mismo día a jugar para ellos, pero no se dio. Sin embargo, dos años después, tuve la suerte de formar parte de ese club durante un breve tiempo. Fue una linda experiencia que me llena de satisfacción”. Los recuerdos de Mercedes Luna concluyen con una reflexión: “El fútbol femenino es una vocación que invita a seguir adelante ese sueño que nosotras iniciamos hace más de 50 años. Es una semilla que sembramos y ahora está germinando. Ahora, hay un auge mundial y es increíble como niñas chiquitas ya están jugando al fútbol en nuestra ciudad”.
Testimonios, datos y recuerdos que sobrevuelan del pasado al presente propios de un partido que quedó en la historia por encontrar a las pioneras de la revolución del fútbol femenino en una misma cancha justo un 25 de mayo.
Síntesis:
Centro Cultural Alberdi: Luisa Díaz; Stella Utrilla y Eva Díaz; María Torres, Olga Quevedo y Rosa Ponce; Soledad Martínez, Mercedes Luna, María del Carmen Rodríguez, Alicia Andrada y Martha Rivero. DT: Manuel Casal. También jugaron Juana Barrios, Betty Bueno, Nélida Prado, María Ponce y Graciela Farini.
Club Atlético Tigre: Roldán; Sosa, Figueroa, Gómez y Lembesis; Troncoso y Frontera; Arias, García, Brúccoli y Cardozo. DT: Antonio Emilio. También jugaron Iriarte y Berregui.
Goles: a los 8’ PT, 24’ ST y 28’ ST Gloria García (CAT).
Árbitros: Pereyra y Pirani.
Cancha: Asociación Atlética Estudiantes.
Recaudación: $ 300.200.
Un gran marco para la obra
De acuerdo al artículo publicado el 28 de mayo por el Diario La Calle, la recaudación del encuentro entre Alberdi y Tigre rondó los 300.200 pesos. “La novedad de ver en acción a dos conjuntos femeninos en el más popular de los deportes fue un incentivo para que una extraordinaria cantidad de espectadores se dieran cita en una tarde realmente magnífica en el estadio de la A. A. Estudiantes”, reza la crónica del periodo. La placa fotográfica es un fiel registro de lo que exponen los números y relatos periodísticos.
A modo comparativo, ese mismo día, Atenas e Instituto de Córdoba igualaron 3 a 3 en el estadio “9 de Julio” con recaudación aproximada de $ 70.000. La “gloria” se fue al descanso dos a cero gracias a los goles de Gómez y Álvarez, mientras que, en el complemento, el “albo” descontó por intermedio de Serra, Pavón volvió a marcar para los cordobeses hasta que Lucero y Durán estamparon la igualdad final. Un tal Percello –a la postre ídolo de Estudiantes- jugó para el cuadro de Alta Córdoba.
Puntapié inicial
No existe oficialmente registro alguno, pero publicaciones periodísticas dan cuenta que Centro Cultural Alberdi es pionero del fútbol femenino en la provincia de Córdoba. El 12 de noviembre de 1964, el Diario La Calle narra el origen de la disciplina en la entidad “mercedaria”: “Todo comenzó al leer uno de los dirigentes un artículo de cierto órgano periodístico porteño sobre un team femenino de fútbol. La idea comenzó entonces a germinar, con ciertas inhibiciones lógicas al comienzo, pero con fuerza arrolladora después”. Esa “fuerza arrolladora” se expandió a la región con el advenimiento del Club 25 de Mayo de General Deheza y contagió a otras instituciones de Río Cuarto como el surgimiento de la práctica en Sportivo Río Cuarto y Estrella Azul.
*Por Retruco / Fotos: David Pedraza y Diario La Calle
*Fuentes: Archivo Histórico Municipal, Diario La Calle, www.infobae.com, y CeDAT (Centro de Documentación Al Toque).